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Robert Blake, un niño actor que encontró fama en películas y programas de televisión pero cuyo legado se vio empañado por las sospechas sobre el asesinato sin resolver de su segunda esposa, murió el jueves a los 89 años.

Un comunicado emitido en nombre de su sobrina, Noreen Austin, dijo que Blake murió de una enfermedad cardíaca, rodeado de su familia en su casa en Los Ángeles.

La carrera de Blake abarcó décadas e incluyó papeles memorables en los cortos “Our Gang” (que se conocieron como “The Little Rascals”), la adaptación cinematográfica de 1967 de “A sangre fría” de Truman Capote y el programa policial de la década de 1970 de ABC “Baretta”, para que ganó un Emmy y un Globo de Oro. Pero la devoción de Blake por la actuación se vio eclipsada por la muerte en 2001 de Bonny Lee Bakley. La aspirante a actriz, entonces de 44 años, recibió un disparo mortal afuera de un restaurante mientras cenaba con su esposo.

Nació Michael Gubitosi el 18 de septiembre de 1933 en Nutley, Nueva Jersey, el tercer hijo de Giacomo Gubitosi y Elizabeth Cafone.

Blake comenzó como extra en “Our Gang”. Reveló durante una aparición a principios de los 90 en “The Joan Rivers Show” cómo obtuvo un papel de orador para la serie en la que apareció de 1939 a 1944. Fue acreditado como Mickey Gubitosi, y su personaje también se llamaba Mickey.

“Un día, un niño pequeño no podía decir una línea, y vi que si te pones frente a la cámara y hablas, la gente te presta atención”, le dijo Blake a Rivers. “Y dije: ‘¡Hombre, puedo decir eso! ¡Puedo decir eso!’ “

Blake adoptó el nombre artístico de Bobby Blake y continuó actuando en películas y series de televisión, incluidos westerns como “Have Gun – Will Travel” (1960 a 1962), “Wagon Train” (1961) y “Rawhide” (1965).

Su gran papel llegó en 1967 con “A sangre fría”, nominada al Oscar, basada en el libro de Truman Capote. Blake interpretó a Perry Smith, quien con Richard Hickock mató a una pareja y a sus dos hijos durante un robo en 1959.

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Blake pasó de criminal a policía en “Baretta”, que se estrenó en 1975 y duró cuatro temporadas, como el detective Tony Baretta, pero le dijo a “20/20” en 2019 que su perfeccionismo le impedía disfrutar el papel. “Me volví loco”, dijo. “Cada guión tenía que ser mejor. Cada dirección tenía que ser mejor. Cada casting tenía que ser mejor”.

Blake se alejó de la serie, pero siguió apareciendo en la televisión, como panelista frecuente en “Hollywood Squares” a principios y mediados de los 70 y como invitado de “The Tonight Show”, haciendo docenas de apariciones.

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En 1985, Blake protagonizó la breve serie de NBC “Hell Town”, centrada en un sacerdote que dirige una iglesia en el lado este de Los Ángeles. Blake le dijo a “20/20” que la carga de trabajo de la serie que creó resultó ser demasiado. “Pensé que estaba haciendo el trabajo de Dios. Estaba loco”, dijo. “Tuve un ataque de nervios frente a la cámara, salí del set y salí del programa”.

Blake también dijo durante la misma entrevista que sus padres lo odiaron desde la concepción. Blake afirmó que fue el resultado de la aventura de su madre con el hermano de Giacomo, Tony, quien se separó cuando Elizabeth quedó embarazada.

“Odiaba lo que tenía en el estómago porque pertenecía a Tony, y Tony la había abandonado”, alegó Blake. “Jimmy (Giacomo) odiaba lo que había aquí (señala el estómago) porque sabía que era de Tony, y yo sabía que ambos me odiaban”.

En la entrevista, Blake recordó que su “padre lunático” se mudó con la familia a Los Ángeles cuando tenía cuatro años. El éxito de Blake en el mundo del espectáculo solo intensificó el odio de su padre, el actor le dijo a Rivers: “Cuanto más éxito tenía, más quería matarme”.

“Mi padre era un hombre psicótico. Trató de matarme”, dijo Blake. “Mi madre no estaba mejor… Me encerraron en armarios. Me golpearon. Me hicieron comer como un perro en el suelo”. Blake dijo durante la entrevista que su madre no mostró afecto y que la primera vez que recordó haber sido tocado fue en el set de “Mokey” de 1942 cuando su madre en pantalla, Donna Reed, lo abrazó. “Casi muero”, dijo Blake sobre la conmoción. “Me sentí tan bien que ni siquiera podía respirar”.

La carrera de actor de Robert Blake abarcó décadas. Comenzó a trabajar cuando era niño en 1939. Su último crédito como actor, según IMDb, es la película de David Lynch de 1997 “Lost Highway”. Su autoimagen problemática continuó hasta la edad adulta. Blake dijo en “20/20” que perdía parte de su cordura cada vez que no tenía trabajo. “Siempre fui al menos un 50% autodestructivo, pero cuando no estaba trabajando, no podía soportar cómo me sentía”, dijo. “¿Bipolar? Era tripolar. Era cuádruple. ¿Quién diablos sabe qué tipo de polar era? Tuve 35 sentimientos diferentes en cinco minutos. Estaba loco cuando estaba lejos de la cámara”.

Blake apareció por última vez en la película de 1997 de David Lynch “Lost Highway”, protagonizada por Bill Pullman y Patricia Arquette.

Blake estuvo casado tres veces, pero reiteró su insuficiencia con Rivers al reflexionar sobre su primera unión con la actriz Sondra Kerr (1961 a 1983), con quien tuvo dos hijos: Noah, ahora actor, en 1965, y Delinah Blake Hurwitz, una profesor de psicología, un año después.

“Soportó mucho”, dijo Blake a Rivers. “Nunca fui un buen esposo. Nunca fui un buen padre. Nunca fui un buen amigo. Nunca fui bueno en nada. Nunca aprendí a ser nada. No era nada hasta que me paré frente a la caja cuando tenía 2 años, y eso es todo lo que he sido”.

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Blake se cruzó con Bonny Lee Bakley en 1999 en un club de jazz. Bakley anhelaba ser conocida, dijo su amiga Christina Scheier a CBS News en 2002, con la esperanza de casarse con la fama y la fortuna. “Ella fue a ver a Tom Jones, Frankie Valli, y realmente acosó a Frankie”, dijo Scheier. Bakley tuvo una relación con Christian, el hijo de Marlon Brando. Bakley le dijo a Christian que la embarazó, pero el niño resultó ser de Blake. Rose nació el 2 de junio de 2000. Blake y Bakley estuvieron casados desde noviembre de 2000 hasta su muerte el 4 de mayo de 2001.

Esa noche, la pareja cenó en Vitello’s, un restaurante italiano en Studio City, California. Después de comer, Bakley esperó en el auto mientras Blake regresaba al restaurante para recuperar un arma que había olvidado. Cuando regresó al auto, dijo que encontró a Bakley baleado. Aunque Blake no pudo estar relacionado con el arma homicida, un par de ex dobles dijeron que el actor intentó contratarlos para asesinar a Bakley. Blake enfrentó cargos de asesinato en circunstancias especiales y dos cargos de solicitud de asesinato.

Blake pasó casi un año bajo custodia en la cárcel del condado de Los Ángeles antes de ser liberado bajo fianza en marzo de 2003.

Blake fue absuelto en marzo de 2005, pero fue declarado responsable de la muerte de Bakley meses después en una demanda civil presentada por los cuatro hijos de la víctima. A Blake se le ordenó pagar $30 millones, pero ese juicio se redujo a $15 millones en 2008.

Blake se enfureció cuando Piers Morgan mencionó a Bakle durante una entrevista de 2012 para promocionar sus memorias “Tales of a Rascal: What I Did for Love”. “¿Por qué me casaría con ella si iba a matarla?” preguntó Blake. “Podría haber contratado a alguien para que la matara cuando estaba en el Tíbet o en algún otro lugar. Manejó por todo el país. Podría haber contratado a alguien para que la siguiera durante 10 meses y la hiciera desaparecer para que nadie la encontrara, por Por el amor de Dios. ¿Saldría a cenar con ella para matarla?

Blake se casó por tercera vez en 2017 con Pamela Hudak, una organizadora de eventos que subió al estrado en nombre de Blake durante su juicio por asesinato. Su unión terminó al año siguiente.

La hermana de Blake, Joan, murió en 1985 a los 52 años. Su hermano James murió en 1995 a los 64 años.

En septiembre de 2019, Blake comenzó a subir una serie de videos titulada “Robert Blake: aún no estoy muerto, así que estad atentos…” a su canal de YouTube. En el Episodio 33, lanzado el 13 de enero de 2022, Blake dijo que se sentía a gusto pensando en el final de su vida.

“Cuando voy, no me importa ir”, dijo. “Dios me dio 88 años, y debería haber estado muerto 80 de esos años. O debería haberle disparado a mi padre. Tal vez hubiera vivido una vida mejor”.

Blake solo tenía un deseo: que su muerte fuera rápida.

“Cuando croo, espero hacerlo rápido, limpiar y terminar de una vez”, dijo. “Lo único que no quiero hacer es pasar mucho tiempo en un hospital en algún lugar, con gente que viene a visitarme y trata de animarme, cuando prefiero que trajeran un arma y me dispararan en la cabeza”. cuando no los miraba”.

Y agregó: “Casi prefiero estar en prisión que estar en el hospital”.

 


PrisioneroEnArgentina.com

Marzo 10, 2023


 

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