EL PAÍS PAGA A LOS BANCOS INTERESES DE $4.400.000.000 POR DÍA : ¿UN “CURRO” DE MACRI Y SU BANDA PARA ROBAR SIN QUE SE NOTE?

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EL PAÍS PAGA A LOS BANCOS INTERESES DE $4.400.000.000 POR DÍA : ¿UN “CURRO” DE MACRI Y SU BANDA PARA ROBAR SIN QUE SE NOTE?

 

 Por COSME BECCAR VARELA

Los economistas, los políticos, los diarios, los Obispos, los empresarios lo saben. Sin embargo, guardan silencio. Pero la realidad que he conocido gracias a los artículos del Licenciado Héctor Giuliano, de los cuales el último, fechado el 20/7/2019 titulado “DEUDA Y POLÍTICA FINANCIERA MACRI” publico en la Sección Correo del Lector de hoy (antes publiqué otros, por ejemplo el del 17/3/2019, en el nro. 5992 de Correo del Lector) es escandalosa y creo que hasta puede ser delictiva. Si “vaciar” una empresa mediante operaciones dolosas es delito, ¿cómo no será delito el vaciar el país de sus recursos y dejar su sistema productivo sin crédito por el cobro de tasas siderales a plazos de siete días (LELIQ) o de un día (pases pasivos)? Eso es lo mismo que matar las empresas y dejar en la calle a los asalariados, empleados y obreros,sin esperanza de que puedan encontrar trabajo en una economía dedicada exclusivamente a proveer ganancias indebidas al sistema financiero.

Macri

Dice el Licenciado Giuliano en su artículo del 9/2/2019: “Paralelamente el Tesoro Nacional tiene Intereses a Pagar en el 2019 por 746.000 M$ (2.000 M$ promedio por Día, más de 61.000 M$ por Mes), de modo que el total actualizado conjunto de intereses a pagar devengados del Gobierno Central y del BCRA resulta así de 1.6 B$ por año: 4.400 M$/Día o 133.000 M$/Mes.” 

Nada más lógico si se piensa que, como informa el mismo autor “al 30.9.2018 – que es la última información oficial disponible – el stock de la Deuda del Estado Central era de 321.000 MD (sin contar Deuda Flotante) y esta deuda ha venido aumentando durante la administración Macri al ritmo de unos 40.000 MD por año.” (MD=millones de dólares). Es mucho más de lo que se debía el 10/12/2015, cuando Macri asaltó el poder). 

He ahí el dato desnudo y concreto que me obliga a escribir este artículo-denuncia. He ahí la realidad que el gobierno y sus panfletos oficiales como “La Nación”, “Clarin” y otros, ocultan. He ahí lo que debería interesar a los Fiscales y a los jueces mucho más que los procesos por las coimas de los “cuadernos” (sin dejar una cosa por la otra), y sin embargo, no es así. 

¿Qué es esto? ¿Cómo se concibe que un país de 44.000.000 de habitantes, de los cuales por lo menos debe haber 5.000.000 que son capaces de entender lo que es una estafa, aunque se encubra con oropeles de papel, ignore o finja ignorar esta realidad asombrosa: el país paga DIARIAMENTE $4.400.000.000 de intereses al sistema financiero cuando hay un 32% de la población que está en la pobreza y muchos más que luchan con desventaja para no caer en ella? 

Lagarde

¿Cómo puede Macri presentarse como el “político del año”, apoyado por el FMI, Trump y la Comunidad Europea y toda la clase culta local, cuando este solo dato bastaría para descalificarlo y hasta para iniciarle un proceso por violación al art.173, inc.7 (administración fraudulenta) y 248 (incumplimiento de los deberes del funcionario público)?

Cabría además, un concienzuda investigación para averiguar si Macri y sus cómplices del gobierno en los más altos niveles, han participado de esa ganancia descomunal de los Bancos. Piense Ud. lo que son $4.000.000.000 POR DÍA de intereses. ¿Sería un exceso de suspición sospechar que a los Bancos que reciben ese regalo del Banco Central, les resultaría compensatorio  y poco desmedro el tener que participar, digamos, un 50% de ese regalo con los altos funcionarios que crearon la política de los LELIQ, de las “pases pasivos” con intereses estrambóticamente altos que les permiten haber realizado ganancias en el 2018 que están por encima de la nubes? ¿Sería malevolencia sospechar que los políticos profesionales, que viven de la política, hubieran creado un sistema para que $2.000.000.000 DIARIOS de ese beneficio obsceno de los Bancos fuera a parar a ciertas cuentas que pertenecen en último término a los políticos que están el poder?

Y eso, todos los días, desde hace por lo menos tres años. ¿Sería otro exceso de suspicacia suponer que semejante tonelada de dinero no hayan alcanzado para sobornar a periodistas, fiscales y jueces para que hagan “la vista gorda” ante semejante brutalidad?

La estafa no tendría nada que envidiar a las coimas que habrían cobrado los funcionarios kirchneristas, verdaderos principiantes en eso de robar desde el Estado, si se tiene en cuenta que un simple “remisero”, escribiendo unos cuadernos pudo ponerlos a todos en la picota y a la propia pareja santacruceña dejarla al desnudo por inversiones de primitiva astucia.  El sacar un 50% de esos intereses fabulosos que paga el Banco Central por día y repartirlos, es mucho más fácil, mucho más difícil de detectar y mucho más fácil de ocultar como una “política de Estado” para evitar que “suba el dólar” que el tirar bolsas de dinero por arriba de una tapia…

Porque esa es la explicación de esos gigantescos intereses: el Banco Central los paga para que los Bancos prefieran prestarle la plata al Estado antes que comprar dólares y eso mismo pueden ofrecerle a sus cómplices internacionales que traen dólares “golondrina” a precio bajo, los colocan en pesos a intereses enormes y después se llevan esos mismos dólares, también a a precio bajo, con una ganancia del 50% anual, por lo menos.  Un negocio que no se puede hacer en ninguna parte a no ser en la argentina, desde los tiempos de Martinez de Hoz.

Esta es la realidad. Esto es lo que nos espera si Macri es reelecto, además del aborto, la corrupción de la niñez y la adolescencia, la promoción de la “ideología de género”, la “política de derechos humanos” y sus correspondientes homicidios de Estado y el bochorno de tener a la cabeza del Estado a un adúltero que se ríe de Dios y tiene la insolencia de vivir en concubinato y otorgar a su “compañera” el título de “primera dama”. Además, una pobreza en aumento y una economía raquítica sin oportunidad de ofrecer trabajo productivo.

Mientras tanto, las clases cultas, empezando por las más altas, gozan de la buena vida (porque el “derrame” de este sistema llega a muchos bolsillos insospechados, pero no a la gente común). Sigan así, y verán cómo termina esta “novela”, porque gracias a nuestra desidia cobarde no tenemos otra opción que lo mismo, pero con un tinte rojo intenso, es decir, el kirchnerismo. El castigo de Dios nadie puede anunciarlo porque nadie conoce los misterios de Su sabiduría infinita, pero que estamos haciendo todo lo posible para merecerlo, de eso no hay duda… 

Cosme Beccar Varela

 

 


PrisioneroEnArgentina.com

Julio 25, 2019


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DEUDA Y POLÍTICA FINANCIERA MACRI
 Por Héctor GIULIANO 

El principal problema práctico de la Argentina – concreto e inmediato – es financiero y no económico, su causa es la trampa de endeudamiento perpetuo en que está metido el Estado y su detonante actual es el fracaso del gobierno Macri en el manejo del Sistema de la Deuda Pública. 
   
La administración macrista, por culpa de su Política de Gobernar con Deuda, llevó a la Crisis Financiera del 2018, depende desde entonces totalmente del sostenimiento artificial del Fondo Monetario Internacional (FMI) para poder llegar al fin de su mandato y está levando a cabo hoy un programa o Libreto que dejará como herencia al próximo gobierno electo, cualquiera sea su signo, para que los lineamientos de esta política contraria a los Intereses Nacionales se continúen en el futuro. 

La clave para comprender cuáles son estos condicionamientos centrales del Libreto – un libreto que ya está escrito y del que los candidatos políticos son simplemente los actores que se pelean para ser sus protagonistas y no para cambiarlo – reside en entender la lógica de la Política Financiera del BCRA (Política Monetaria, Cambiaria y Bancaria). 

EL MITO DEL VERANITO FINANCIERO 

Los voceros del establishment dieron a llamar Veranito Financiero la estabilidad relativa o pax cambiaria que significa la cotización del dólar sin variaciones relevantes durante las últimas semanas. 

Más aún, el precio del dólar mayorista BCRA, que había llegado a 45.15 $/US$ a mediados de Mayo vino teniendo una tendencia levemente decreciente durante este período: 44.87 $ al 31.5, 42.45 $ al 30.6 y 41.86 $ al 15.7. 
Lo que supone incluso un atraso cambiario relativo frente al mayor ritmo de aumento de la Inflación interna 

Estos números del dólar son mostrados a la opinión pública como resultado de una renovada confianza de los Mercados (expresión críptica que se usa para referirse a los grandes operadores oligopólicos financieros, nacionales e internacionales, que controlan los mercados de Deuda y de Divisas), pero la realidad marca otra cosa. 

La mentada estabilidad cambiaria tiene una explicación muy diferente a la supuesta confianza de los Mercados que está explicada por tres factores básicos concurrentes: 

a)  El compromiso por parte de la administración Macri de mantener un elevado piso de las Tasas de Interés de Referencia – que son las tasas que paga por las letras de liquidez Leliq – lo que le garantiza a los acreedores, que son los bancos, un nivel de rentabilidad extraordinario en pesos. 
Es decir, que el freno al aumento del Dólar se logra manteniendo muy altas Tasas de Interés, que le son exigidas por los Bancos (bajo el eufemismo de la Tasa Endógena o del Mercado Local).   
b) El acuerdo del gobierno con una serie de grandes Fondos de Inversión (FI) internacionales de mantener la irrestricta volatilidad de entrada y salida de Capitales, bajo dólar estable, lo que le permite a éstos lograr ganancias récord por arbitraje entre tipo de cambio y tasas de interés domésticas. 
c) La auto-obligación paralela del BCRA de garantizar la cotización del dólar a corto y/o muy mediano plazo a través de Contratos de Dólar a Futuro en el Mercado ROFEX, de Rosario (con vencimientos hasta el 30.9, por un dólar a 47.25 $). 

Siendo que estas operaciones de Dólar Futuro están usualmente calzadas con las fechas de vencimiento de las obligaciones pactadas con el BCRA (antes por Lebac y hoy por renovaciones continuadas de Leliq y Pases Pasivos).   
La estabilidad cambiaria y el juego financiero que conlleva, por otra parte, no es sólo una decisión voluntaria del gobierno Macri sino una condición asumida a través del Arreglo Stand-By (SBA) con el FMI. 
     
Ergo, la relativa o transitoria estabilidad del dólar no es producto de una confianza subjetiva de los acreedores financieros del Estado ni de un convencimiento sobre supuestas bondades de la gestión del Gobierno sino consecuencia del cumplimiento de sus condicionamientos financieros por parte de la administración macrista. 

Es merced a este esquema de altas tasas de interés que el BCRA optimiza las ganancias de los capitales financieros con los que el presidente Macri confía en sostener el dólar pre-electoral.   
Y ello es así porque tal estabilidad cambiaria deviene conditio sine qua non para que la administración macrista pueda aspirar a un resultado favorable en las elecciones primarias PASO del 11.8. 

ACELERADOR Y FRENO MONETARIO 

Las garantías que explican esta transitoria estabilidad cambiaria pre-electoral, que el gobierno Macri necesita desesperadamente para tratar de lograr resultados favorables en las PASO, están signadas sin embargo por una contradicción que se relaciona con el problema de la real Emisión Monetaria del BCRA, que es lo que muestra la verdadera magnitud y alcance de la cuestión del endeudamiento cuasi-fiscal del Banco: 

a) La Base Monetaria (BM) tradicional o formal – Circulante más Encajes Bancarios – es de 1.375.800 M$ (1.38 B$) al 30.6 (≡ 32.400 MD) pero si a ello le agregamos el stock de Leliq de 1.127.000 M$ (1.1 B$ ≡ 26.600 MD) y el stock de Pases Pasivos de 880.600 M$ (0.88 B$ ≡ 20.700 MD) tenemos que la Base Monetaria Amplia es mucho mayor porque suma en realidad 3.383.400 M$ (≡ 79.700, casi 80.000 MD).   
Este punto es muy importante porque tendríamos así que el gobierno, al fijar su política de Crecimiento 0 de la BM (la BM simple o contable) está presentando cifras sub-estimadas de la verdadera cantidad de dinero emitido porque lo está haciendo sobre la BM simple y no sobre la BM Ampliada). 
Dicho con otras palabras: que se está omitiendo registrar como BM una suma que es en realidad tres veces mayor porque se toman las Leliq y los Pases Pasivos como Títulos de Deuda del BCRA y seudo-compensaciones  de Pases, cuando en la práctica se trata de BM retenida pagando intereses. 
b) Las principales fuentes de la Emisión Monetaria bajo la gestión Macri han sido y siguen siendo la entrada de dólares – mayoritariamente financieros o especulativos (que son de corto plazo y permanencia incierta) – los desembolsos del SBA del FMI y la liquidación de divisas de Exportaciones (fundamentalmente del Sector Agropecuario Cerealero y Oleaginoso), dado que el gobierno ya no emite para financiar al Tesoro Nacional. 
Dada la volatilidad de los capitales financieros y la posibilidad irrestricta de sacar divisas del país el stock de Reservas Internacionales (RI) y la magnitud de la BM (esencialmente la BM Amplia) devienen así variables totalmente expuestas a corridas cambiarias o golpes de Mercado. 
c) Las altas Tasas de Interés que paga el BCRA por el dinero que retira de circulación vía Leliq y Pases Pasivos agravan las extraordinarias sumas que el Banco abona por Intereses, que son el principal rubro de pérdida del Cuadro de Resultados. 

Hoy en día el BCRA afronta Intereses a Pagar por unos 3.400 M$ diarios, que corresponden fundamentalmente a una masa acumulada de Leliq y Pases Pasivos de 2.0 B$. Estos intereses anualizados dan 1.23 B$ (≡ 29, casi 30.000 MD). 
Como resultado de todo lo dicho hasta aquí, tenemos que cuanto más divisas ingresan – integrando las RI del BCRA – más aumenta la Emisión Monetaria y más aumenta consiguientemente el costo financiero de la absorción de estos pesos emitidos que se hace vía Leliq y Pases Pasivos – incremento del quantum de la BM Amplia – más aumenta la vulnerabilidad de las Reservas frente a los movimientos de entrada y salida de Capitales Financieros, y más aumenta también el riesgo de los desequilibrios cambiarios consecuentes.   
El ingreso de dólares por deudas financieras – Fondos de Inversión y FMI – provoca así un aumento de las Reservas Internacionales que es inestable y un paralelo aumento de la BM Amplia que es cada vez más costoso; y además agrava las presiones inflacionarias por emisión de dinero sin correlato en el crecimiento de la Economía. 

El problema es que con este mecanismo de estímulo a la entrada de capitales especulativos – atraídos por las altas tasas de interés domésticas que paga el propio Estado a través del BCRA – se acelera la emisión de dinero (por conversión del ingreso de dólares) y, como agravante, al mismo tiempo el BCRA busca frenar esa mayor cantidad de dinero en circulación y para ello mantiene las altas tasas de interés que paga por Leliq y Pases Pasivos. 
Como dentro del juego de la Tríada Financiera Tipo de Cambio-Tasa de Interés-Inflación, la variable que manda es la primera (el dólar) – porque es la que más necesita el Gobierno para atender los servicios de la Deuda en Moneda Extranjera, que son la gran mayoría – la Tasa y los Intereses a Pagar devienen el principal instrumento de la Política Monetaria del BCRA que se usa como variable de ajuste tanto del Mercado de Cambios (tendencia al atraso cambiario para poder pagar cada vez más intereses de la Deuda Pública) como del Mercado Interno de Dinero (aumento de las inmovilizaciones por Inversiones Financieras Autónomas: Plazos Fijos, Títulos-Valores de Renta Fija o Bonos y de Renta Variable o Acciones, operaciones bursátiles en general y especulación por arbitraje clásico entre Tipo de Cambio y Tasa de Interés). Y ello deriva en contracción monetaria, mayores tasas de interés, menor oferta de Crédito y mayor Recesión Económica, con caída de la Producción y el Empleo. 

En suma, estamos frente a un gobierno que por un lado aprieta el acelerador de la emisión monetaria derivada del ingreso de dólares financieros y por otro retira esos pesos emitidos colocando deuda cuasi-fiscal (por Leliq y Pases Pasivos), pero lo hace a un costo altísimo por los Intereses que paga para esterilizar esa Deuda. 
Es un perfecto círculo vicioso o mecanismo recurrente que vincula, condiciona e institucionaliza la relación de arbitraje entre Tipo de Cambio y Tasas de Interés. 
   
Esto provoca que mientras el FMI recomienda un régimen de Libre Flotación Cambiaria (Tipo de Cambio Variable o Flexible) – que implica Emisión Monetaria por su tendencia a la suba – el gobierno Macri (con los dólares que el propio FMI le presta!) busca esterilizar la mayor parte posible del dinero emitido para mantener retrasado el tipo de cambio con respecto a la Inflación, esto es, tendiendo a la apreciación cambiaria. 

Así, mientras teóricamente el FMI pide un régimen de flotación cambiaria – que tiende a subir el tipo de cambio y a producir más expansión monetaria por devaluación del peso – el gobierno Macri se empeña en reprimir o contener dicha flotación; y para ello utiliza las divisas prestadas por el FMI y también, en forma creciente, los ingresos de capitales golondrina de FI externos mientras aumenta su deuda cuasi-fiscal por el incremento de la BM Ampliada. 

Es el costo extraordinario que el BCRA paga por mantener su Política de compra de Reservas con Deuda (Leliq y Pases), que le sale así muchísimo más caro al país que si emitiera directamente ese mismo dinero sin respaldo en dólares producto del endeudamiento. 
Notablemente, este mecanismo de expansión monetaria por aumento de la Deuda Externa – que es esterilizado a un costo financiero altísimo – lo hace un gobierno de línea neoliberal que dice perseguir el objetivo de bajar la Inflación sin emitir porque atribuye a la emisión de dinero ser la causa de la Inflación en la Economía. 

DEUDA CUASI-FISCAL Y CORRUPCIÓN FINANCIERA 

Este proceso de sobre-endeudamiento del BCRA lleva en la práctica a un mecanismo de corrupción institucional por deformación de las funciones básicas del Banco: 

a) El ingreso masivo de capitales especulativos y de divisas provenientes del endeudamiento del Estado aumenta artificial y transitoriamente el nivel de las Reservas Internacionales (RI) del BCRA y aumenta así paralelamente su vulnerabilidad frente a movimientos especulativos externos (la clásica Volatilidad de Capitales). 
b) Este aumento de las RI se traduce en mayor emisión monetaria interna – resultado de la entrada de divisas financieras – y la política de esterilización sistemática de esta masa de dinero emitida incrementa en forma inmanejable la Base Monetaria Amplia (BMA) y, dentro de la misma, los Pasivos Remunerados del BCRA (por Leliq y Pases Pasivos). 
c)  La cuenta de Intereses a Pagar del BCRA sube entonces astronómicamente y empeora el quantum de las pérdidas en el Cuadro de Resultados. 

Y este mecanismo se retro-alimenta: 

En la medida que el BCRA sube la Tasa de Interés de Referencia – por las Leliq – atrae más capitales especulativos externos y consecuentemente emite más dinero con el ingreso de los mismos. Dinero que luego esteriliza con el argumento de luchar contra la Inflación cuando lo que en realidad se busca es contener el tipo de cambio para evitar una devaluación y propender, en cambio, a un atraso cambiario. 

Y así se mantiene al Estado Argentino dentro de un círculo vicioso que se retro-alimenta continuamente y de modo cada vez más gravoso. 
Es la forma en que la Política institucional de compra de Reservas con Deuda ha llevado a la quiebra fáctica del BCRA y a la destrucción de toda Política Financiera del Estado. 

Un método de conducción de la gestión del BCRA que es tan negativo para las finanzas del Banco como positivo para los acreedores especulativos que lucran con el negocio sistemático de vivir prestándole al Estado. 
Uno de los estribillos tradicionales de los voceros del establishment liberal se queja siempre de los Empresarios que viven de la teta del Estado, pero paradójica o sintomáticamente esos mismos portavoces no dicen media palabra de los Capitales Financieros que no sólo viven mucho más de la teta del Estado que ciertos sectores contratistas o concesionarios sino que, peor aún, succionan sus recursos monetarios y además estrangulan la vida del Estado. 

El gobierno Macri debiera desclasificar la información secreta que impide conocer quiénes son estos nuevos grandes acreedores financieros del Estado – los del BCRA y los del Tesoro Nacional – con los que está dejando más endeudada en forma impagable a la Argentina. 

Pero eso es algo que desgraciadamente está muy lejos de lo que el Gobierno y la Clase Política en general se atrevan a plantear hoy como parte del problema de fondo de no querer instalar la Deuda como tema de debate en la Argentina. 

Lic. Héctor L. GIULIANO

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Caretas caídas

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 Por ENRIQUE GUILLERMO

AVOGADRO

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“En política son más atractivos los regímenes
demagógicos hábiles en crear relatos épicos
en tanto la legalidad democrática
parece fría y aburrida”.

 

Juan José Sebreli

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Para terminar de convencer a los descreídos, la fotografía del jueves de los candidatos de la fórmula Fernández² con los gremios que la apoyan hizo caer las caretas detrás de las cuales se escondían las motivaciones de las huelgas docentes en la Provincia de Buenos Aires, las marchas de los bancarios, las permanentes medidas de fuerza que paralizan los aeropuertos de todo el país, las acciones destituyentes de las dos CTA y, sobre todo, la habitual extorsión de Camioneros al Gobierno y a las empresas.

 

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Porque, más allá de las reales penurias que están sufriendo los asalariados, todas ellas, ahora, tienen nombre y apellido: Cristina Elisabet Fernández. O sea, no se hacen para defender a los trabajadores sino que tienen una clara intencionalidad política: atacar al Gobierno y fomentar el caos y, por supuesto, mantener en libertad a la líder del binomio electoral, a sus hijos y a los miembros de la familia Moyano.

 

A mi modo de ver, en coincidencia con varios analistas, la elección de Miguel Angel Pichetto fue una positiva sorpresa, tanto para los mercados internacionales cuanto para el peronismo en su conjunto. Resulta obvio que las apuestas internacionales han reconocido la enorme cuota de gobernabilidad que el jefe del bloque justicialista en el Senado aportará a un segundo mandato de Mauricio Macri, y lo han demostrado con la tranquilidad en la cotización de nuestro pobre moneda nacional y con la brusca caída en el riesgo país, en su evolución diaria, anual y quinquenal.

 

Si bien es cierto que los mercados no votan, no lo es menos que la suerte del Gobierno en las urnas dependerá, en gran medida, del comportamiento de la economía que aquí tiene la conducta del electrocardiograma de un infartado. Y allí es donde adquieren una importancia fundamental porque, si apostaran en contra de la reelección de Mauricio Macri, ese habitual infarto obligaría, entre agosto y octubre, a vivir en terapia intensiva.

 

También fue recibido el anuncio de la fórmula oficialista con optimismo en todo el amplio espectro de líderes que lo apoyan irrestrictamente: Donald Trump, Christine Lagarde, Felipe González, Jair Bolsonaro, Iván Duque Márquez y Sebastián Piñera -cada uno a su modo- lo expresaron así. No fue casual que, cuando la Argentina necesitó la conformidad del FMI para disponer de las reservas aportadas por el organismo para la eventual defensa de la cotización del peso ante un ataque masivo, el Senador teóricamente opositor se encontrara en Washington.

 

Por su parte, Fernández² intenta, infructuosamente, tratar de convencer al mundo que, si volviera al poder, todo será distinto esta vez; ya que respetará los tratados internacionales, pagará la deuda externa, garantizará la libertad y la democracia, etc., y no convertirá a nuestro país en un nuevo enclave ruso-cubano en América del Sur, como sucede ya innegablemente en la triste y ensangrentada Venezuela.

 

Y digo que no lo consigue porque, cada dos por tres, se le suelta el indio y vuelve a las andadas. No sólo Alberto Fernández amenaza a los jueces que juzgan y condenan a funcionarios y empresarios que saquearon sin misericordia el país durante doce largos años, sino que a su jurista de cabecera, Raúl Zaffaroni, otro delincuente, no le tiembla la voz cuando explica que la Constitución debe ser reformada al gusto de la “Señora”.

 

El claro apoyo que recibió de SS Francisco, que hasta se permitió utilizar en su discurso una palabreja reiterada en el léxico de Cristina (lawfare) mientras despotricaba contra la teórica utilización de la Justicia para hacer política, dejó claro de qué lado de la “grieta” se ubica el Pontífice. Pero esta actitud tiene una explicación: Jorge Bergoglio vivió los años kirchneristas en una probeta, aislado por completo de la realidad.

 

La demostración de esa alienación del Papa es sencilla: si hubiera estado en la Argentina, recordaría la persecución a Enrique Olivera (falsas cuentas en el exterior), a Francisco de Narváez (narcotráfico), a Ernestina Herrera de Noble (apropiación de sus hijos adoptivos) y hasta al último aliado de Fernández², el tan voluble Sergio Massa.

 

Como no creo en la seriedad de las encuestas, todas incapaces de ofrecer pronósticos acertados en un escenario con 40% de indecisos, los informes de opinión que bombardean mi casilla de mail cada semana no influyen en mi ánimo. En cambio, sí lo hace la conducta de los gobernadores; por eso soy optimista.

 

Es obvio que no confiaban en la capacidad de tracción de votos de Fernández² puesto que, de lo contrario, no habrían separado las elecciones locales de la nacional; una actitud totalmente distinta de la de aquéllos que gobiernan la Ciudad Autónoma y la Provincia de Buenos Aires. Ahora, varios de ellos, peronistas ya reelectos, irán con “lista corta” a los comicios en que se elegirá a los diputados y senadores nacionales, o sea, las listas de éstos no irán “colgadas” de ninguna fórmula presidencial.

 

Por su parte, por fin el Gobierno mejoró la comunicación de su gestión, y las obras que ha realizado –y sigue construyendo, pese a la recesión- impactan directamente en la vida cotidiana de sus beneficiarios; muchos habitantes del crucial Conurbano tienen ahora agua potable, gas, luz eléctrica, pavimentos y mejor transporte público.

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Fernández de Kirchner

Pichetto

Alberto Fernández

Lagarde

De Narváez

Herrera de Noble

Trump

Bolsonaro

 

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Pero los dados están en el aire, y así seguirán hasta octubre o noviembre. Nos jugamos nada menos que la República porque, si Fernández² triunfara finalmente, la Argentina que conocemos desaparecerá y volverán a reinar la corrupción y la impunidad.

 

Enrique Guillermo Avogadro
Abogado
Tel. (+5411) ò (011) 4807 4401/02
Cel. en Argentina (+54911) o (15) 4473 4003
Cel. en Brasil (+5521) 8128 7896

 


PrisioneroEnArgentina.com

Junio 14, 2019