Share

 

 

 

Como bien saben los presentes, El dos de abril de 1982 es una fecha cara al sentimiento de los argentinos. Ese día, producto de una decisión apresurada o no (no viene al caso dilucidarlo ahora) las Fuerzas Armadas de la Nación recuperaron el territorio patrio de las Islas Malvinas; ello sin derramar una gota de sangre del usurpador inglés y ofrendando la vida del capitán Pedro Edgardo Giachino. El hecho, por su osadía, desencadenó acontecimientos que tuvieron en vilo al mundo. El Reino Unido de Gran Bretaña respondió enviando a la Royal Navy, la tercera flota más poderosa del mundo, al Atlántico Sur. La guerra comenzó, de hecho, con el hundimiento del Crucero Belgrano el 2 de mayo de 1982 por parte del submarino nuclear HMS Conqueror submarino británico. 323 soldados argentinos quedaron para siempre en las gélidas y profundas aguas de nuestro mar austral. La aviación de la marina argentina devolvió el golpe echando a pique al buque destructor HMS Sheffield. La guerra era una realidad. Pronto llegaron los nombres de las bajas argentinas. Nacido en Cerrillos, el cabo 1º Patricio Guanca fue el primer salteño en caer por el fuego enemigo. Aquí le rendimos un modesto pero sentido homenaje. También y sin discriminar si soldados, suboficiales u oficiales, quisiera dejar en claro lo siguiente: la inmensa mayoría de los que pelearon estuvieron a la altura de los aguerridos granaderos José de San Martín y los bravos lanceros de Martín Güemes. Es pertinente la aclaración porque no faltan algunos que, al mismo tiempo que evocan el 2 de Abril de 1982 como gesta heroica, llaman “genocidas” a los que los que lo hicieron poniendo el cuerpo.

Vale también en este día especial desmentir el relato infame construido por propios y extraños que exhibe a los soldados como “los chicos de la guerra”; pusilánimes y aterrados argentinos que rehuían el combate. Enfatizo que de ninguna manera fue así sino todo lo contrario. Es más, el entonces enemigo inglés (fuerza militar que se vanagloria de nunca haber perdido una guerra) reconoció la bravura y el profesionalismo del soldado argentino. El almirante “Sandy” Woodward, jefe de la flota británica, admitió que estuvieron a un tris de perder la guerra de Malvinas. Por su parte, la BBC de Londres, el prestigioso servicio público de radio, televisión del Reino Unido editó un documental en el que políticos y militares ingleses ponderan la sobresaliente actuación de los argentinos. Es que le hundimos la mitad de la flota.

De los aviadores argentinos y con esto termino, vayan estas palabras de Pierre Clostermann, piloto de la aviación militar francesa y más grande as de la Segunda Guerra Mundial, quien en una carta a nuestros pilotos, así dice:

Nunca en la historia de las guerras desde 1914, tuvieron aviadores que afrontar una conjunción tan terrorífica de obstáculos mortales, ni aun los de la RAF sobre Londres en 1940 o los de la Luftwaffe en 1945.

Vuestro valor ha deslumbrado no sólo al pueblo argentino sino que somos muchos los que en el mundo estamos orgullosos que seáis nuestros hermanos pilotos.

A los padres y a las madres, a los hermanos y a las hermanas, a las esposas y a los hijos de los pilotos argentinos que fueron a la muerte con el coraje más fantástico y más asombroso, les digo que ellos honran a la Argentina y al mundo latino.”

Señores padres, profesores y alumnos ¡VIVA LA PATRIA!

 

 


Fuente y colaboración: Mauricio Ortín


 

 


PrisioneroEnArgentina.com

Abril 2, 2017