LA VICEPRESIDENTA, FIN DE AÑO Y LA CRUDA REALIDAD.

LA Argentina EN MODO “piloto automático”, LOS POLITICOS Siguen mirándose el ombligo, arriesgándose peligrosamente a que la realidad les pegue un sonoro cachetazo.
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✈️

  Por Dr. Gonzalo P. Miño.

Hemos entrado en el mes de diciembre, mes de las Navidad y Fin de Año, mes donde tradicionalmente el humor social se exaspera, pues es uno de los meses donde más se nota que la plata no alcanza y se toma real conciencia de los devastadores efectos de la inflación, que el gobierno no logra controlar.

Para ponerle más condimento a este ya complicado fin de año, este martes se conocerá el fallo en la denominada causa “Vialidad”, en la cual está siendo juzgada la actual Vicepresidenta de la Nación entre otros.

Ya nadie duda que su única preocupación hoy es su suerte judicial, importándole muy poco lo que suceda en el país. La velocidad de los acotamientos jurídicos la hizo delegar en el ex Presidente de la Cámara de Diputados de la Nación el destino político y económico del país, aunque lo hiciera a regañadientes, pues ello implicó un tácito reconocimiento del rotundo fracaso que fue la designación del actual Presidente de la Nación.    

Todos sus esfuerzos hoy están focalizados en intentar restarle legitimidad a lo que cree será un fallo condenatorio para ella. Por ello, en sus últimas palabras, apeló a “reminiscencias setentistas”, que hasta ahora le han venido dando resultado, equiparando al Tribunal Oral a un “verdadero pelotón de fusilamiento”. Posicionándose en un claro papel de víctima, al sostener que el Poder Judicial es el “nuevo poder golpista” que intenta “proscribir” a una incansable luchadora de los más humildes. Hasta adujo que esta “persecución penal” generó el intento de asesinato de su persona. 

En la misma sintonía y agitados por este confrontativo discurso, los sectores kirchneristas se preparan para lo peor. Desde una marcha a Comodoro Py para el día de la lectura del veredicto, a cortes de rutas por tiempo indeterminado, una concentración en Uruguay y Juncal para acompañar a la líder, un paro de actividades de la administración pública y hasta una verdadera pueblada. Sus líderes no ahorran inquietantes arengas desde sus redes sociales, llamando a casi una confrontación total con el Poder Judicial.

Nadie sabe a ciencia cierta hasta donde podrá escalar esta exasperación de ánimos.

 Como si esto no fuera suficiente para inquietar el clima político, que cada vez se enrarece más, los grupos piqueteros más exaltados y alejados del gobierno siguen exigiendo un bono para fin de año, más planes sociales, que se detenga la auditoria  dispuesta sobre las irregularidades en el otorgamiento de los planes sociales y que los mismos se sigan percibiendo (aunque hayan servido para comprar dólares o han sido cobrados por personas fallecidas). Las marchas se multiplican por semana y amenazan con acciones más contundentes en caso de que no se satisfagan sus reclamos. 

El gobierno sigue  “como si nada”. El Presidente de la Nación aislado en su propio mundo preocupado más por la suerte de la selección que la realidad de su país o por la compra de un nuevo avión presidencial. Mientras  el Súper Ministro de Economía no se mueve un milímetro del curso que trazó cual es cumplir con las metas acordadas con el FMI, que obviamente incluye menos recursos en planes sociales, salud, educación, vivienda, medio ambiente y transporte y obviamente aumentos de tarifas y servicios. De bajar los obscenos gastos y prebendas de la clase política, ni hablar.   

Del otro lado, la principal oposición sigue enfrascada en sus peleas palaciegas, yendo atrás de la agenda que les marca el oficialismo, sin ofrecer a la ciudadanía una alternativa potable para las próximas elecciones presidenciales. Solo el peluca liberal y la izquierda se presentan como opciones superadoras con sus definidas propuestas. Se pondrán compartir o no, pero convengamos, son los únicos que ofrecen algo. Lo demás por ahora, es más de lo mismo.  

Tato Bores

Para colmo este verano será largo y ello hace que las próximas elecciones presidenciales hoy aparecen más lejanas que nunca. Y es que la gente no puede esperar más, necesita soluciones ya. Como dijo alguien alguna vez: “en el largo plazo todos estaremos muertos”

Argentina parece estar en modo “piloto automático”, la gran mayoría de la clase dirigente no toma conciencia de lo que puede pasar y por defecto siguen mirándose el ombligo sin que se les mueva un pelo, preocupados únicamente en sus propios intereses; arriesgándose peligrosamente a que la realidad les pegue un sonoro cachetazo. Tan solo algunas voces aisladas se animan a augurar lo que podría venir.   

Como dijimos en nuestra columna de la semana pasada, ni aunque ganemos el Mundial de Futbol, aplastando futbolísticamente a nuestros rivales, se podrá tapar la cruda realidad de nuestro país, que parece acelerarse día a día con preocupantes perspectivas. La irresponsabilidad con que se venido manejando los destinos de este país, nos ha llevado a un callejón sin salida, del cual ni un campeonato del mundo nos salva.

Hoy más que nunca como decía el genial Tato Bores: “Por eso, mis queridos orejones del tarro, a seguir laburando, la neurona atenta, vermouth con papas fritas y ¡Good Show!”

 


PrisioneroEnArgentina.com

Diciembre 5, 2022


 

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