Que el gobierno de Macri no respete sus promesas electorales ya no es novedad, pero que los problemas se agraven eso si es preocupante: Inseguridad, corrupción, pobreza, violación de derechos humanos, políticas públicas sin objetivos claros y precisos….son situaciones cotidianas que vive la sociedad argentina.
El gobierno de Macri no quiere resolver la violación de los derechos humanos cometidas por la justicia federal contra un sector de la sociedad, lo que él llamo: “terminar con el curro de los derechos humanos”, al contrario aumentaron. Escucha solamente las posiciones cercanas a una política de venganza del místico secretario de DDHH de la Nación. Obligaciones positivas, Estado de Derecho, Convención de Viena de 1969, son palabras, objetivos, inexistentes, o voluntariamente mal interpretados en el vocabulario de los miembros de los tres poderes, la praxis lo demuestra.
La otra promesa inconclusa por el gobierno de Macri es “prometoterminar con la corrupción, erradicar la corrupción”. ¿Cómo es posible que aún hoy día se acepte que los miembros del poder judicial no paguen sus impuestos a las ganancias? No existe la transparencia en los bienes de los agentes del Estado, ni una real aplicación de la ley de ética en el ejercicio de la función pública. Los funcionarios de diversos poderes, parlamentarios, magistrados, ostentan bienes y un ritmo de vida en desequilibrio con sus ingresos mensuales declarados.
Argentina incumplió con las disposiciones objeto de estudio de la 5ta ronda de estudio, como también con las recomendaciones del Mesicic de 2006 y con los principios previstos en la Convención Interamericana contra la Corrupción. Muchas promesas de Cambios en la lucha contra la corrupción pero sin modificación del statu quo.
La simultaneidad corrupción-justicia, es una constante preocupación de los organismos internacionales especializados, que regularmente emiten recomendaciones y observaciones a la Argentina, pero que no tienen impacto mayor en el gobierno nacional porque sin efectuar cambio alguno, los ministros, altos funcionarios, realizaran solamente grandes discursos de principios y de buena voluntad.
¿Cuál será el impacto de la próxima visita del grupo de trabajo sobre la corrupción de la OCDE?, dado que Argentina dificulta poner en práctica las recomendaciones realizadas en junio 2014.
Es urgente y necesario realizar una operación manos limpias comenzando por la justicia federal [U4] quien lleva los grandes casos de corrupción. Es inaceptable la parálisis del gobierno porque, de continuar, significaría que está de acuerdo con que nada cambie. El silencio del Presidente Macri es sinónimo de complicidad.
Que el gobierno de Macri no respete sus promesas electorales ya no es novedad, pero que los problemas se agraven eso si es preocupante: Inseguridad, corrupción, pobreza, violación de derechos humanos, políticas públicas sin objetivos claros y precisos….son situaciones cotidianas que vive la sociedad argentina.
El gobierno de Macri no quiere resolver la violación de los derechos humanos cometidas por la justicia federal contra un sector de la sociedad, lo que él llamo: “terminar con el curro de los derechos humanos”, al contrario aumentaron. Escucha solamente las posiciones cercanas a una política de venganza del místico secretario de DDHH de la Nación. Obligaciones positivas, Estado de Derecho, Convención de Viena de 1969, son palabras, objetivos, inexistentes, o voluntariamente mal interpretados en el vocabulario de los miembros de los tres poderes, la praxis lo demuestra.
La otra promesa inconclusa por el gobierno de Macri es “prometo terminar con la corrupción, erradicar la corrupción”. ¿Cómo es posible que aún hoy día se acepte que los miembros del poder judicial no paguen sus impuestos a las ganancias? No existe la transparencia en los bienes de los agentes del Estado, ni una real aplicación de la ley de ética en el ejercicio de la función pública. Los funcionarios de diversos poderes, parlamentarios, magistrados, ostentan bienes y un ritmo de vida en desequilibrio con sus ingresos mensuales declarados.
En la reciente visita que realizaron los expertos del Mecanismo de Seguimiento de la Implementación de la Convención Interamericana contra la Corrupción (MESICIC)[U1] , observaron fallas en la lucha contra la corrupción (artículo de La Nación 18 oct 2016) [U2] , las cuales habían sido mencionadas en el “Cuestionario, enviado al gobierno nacional, del 23 marzo 2016 en relación con el seguimiento de la implementación de las recomendaciones formuladas y las disposiciones analizadas en la segunda ronda, así como con respecto a las disposiciones de la convención seleccionadas para la quinta ronda”, [U3] que Argentina respondió el 23 junio 2016.
Argentina incumplió con las disposiciones objeto de estudio de la 5ta ronda de estudio, como también con las recomendaciones del Mesicic de 2006 y con los principios previstos en la Convención Interamericana contra la Corrupción. Muchas promesas de Cambios en la lucha contra la corrupción pero sin modificación del statu quo.
La simultaneidad corrupción-justicia, es una constante preocupación de los organismos internacionales especializados, que regularmente emiten recomendaciones y observaciones a la Argentina, pero que no tienen impacto mayor en el gobierno nacional porque sin efectuar cambio alguno, los ministros, altos funcionarios, realizaran solamente grandes discursos de principios y de buena voluntad.
¿Cuál será el impacto de la próxima visita del grupo de trabajo sobre la corrupción de la OCDE?, dado que Argentina dificulta poner en práctica las recomendaciones realizadas en junio 2014.
Es urgente y necesario realizar una operación manos limpias comenzando por la justicia federal [U4] quien lleva los grandes casos de corrupción. Es inaceptable la parálisis del gobierno porque, de continuar, significaría que está de acuerdo con que nada cambie. El silencio del Presidente Macri es sinónimo de complicidad.