Una de las principales consignas libradas al viento cuando se supo que la peligrosidad de huracán Matthew amenazaría el estado de la Florida, fue la de la totalidad de los Sheriffs de los condados que se verían afectados. Estos señalaron que aquellos que decidirían no evacuar las zonas que serían afectadas más violentamente, no serían asistidos por los efectivos policiales ya que “Por una actitud tal, no arriesgarían las vidas de sus hombres”
En Daytona Beach -por ejemplo- los puentes para acceder a la zona continental se cerraron a las 6 de la tarde del día jueves y a nadie se le permitió cruzar los mismos, sea desde o hacia la ciudad de Daytona, fuera de las playas.
La posición de los jefes policiales fue saludada tanto por sus subalternos como la población en general. Muchos de estos altos efectivos no se doblaron ante algunas críticas. La vida de un policía es tan importante como la de cualquiera. “Una cosa es la actuación de las fuerzas de seguridad en un accidente o un hecho delictivo en medio de la tormenta en las zonas de refugio. Otra muy distinta es comprometer la supervivencia de un miembro de la familia policial por gente que se negó a usar el sentido común” -afirmó Ben Johnson, sheriff del condado de Volusia.
En Orlando, las autoridades anunciaron un toque de queda, efectivo desde las 6 de la tarde del día jueves próximo pasado hasta el sábado 11 de octubre, a las 7 AM. Esto obedece -pese a que promediando la tarde del viernes los vientos y la lluvia menguaron- a los cables eléctricos que pudieran estar en las calles, desprendidos, o grandes ramas de árboles a punto de desplomarse.
La actividad policial recibió una importante suma de voluntarios para atender los teléfonos. Estos recibían llamados y colaboraban indicando cuales y que comodidades tenían los albergues más cercanos para guarecerse del clima hostil.
Una de las principales consignas libradas al viento cuando se supo que la peligrosidad de huracán Matthew amenazaría el estado de la Florida, fue la de la totalidad de los Sheriffs de los condados que se verían afectados. Estos señalaron que aquellos que decidirían no evacuar las zonas que serían afectadas más violentamente, no serían asistidos por los efectivos policiales ya que “Por una actitud tal, no arriesgarían las vidas de sus hombres”
En Daytona Beach -por ejemplo- los puentes para acceder a la zona continental se cerraron a las 6 de la tarde del día jueves y a nadie se le permitió cruzar los mismos, sea desde o hacia la ciudad de Daytona, fuera de las playas.
La posición de los jefes policiales fue saludada tanto por sus subalternos como la población en general. Muchos de estos altos efectivos no se doblaron ante algunas críticas. La vida de un policía es tan importante como la de cualquiera. “Una cosa es la actuación de las fuerzas de seguridad en un accidente o un hecho delictivo en medio de la tormenta en las zonas de refugio. Otra muy distinta es comprometer la supervivencia de un miembro de la familia policial por gente que se negó a usar el sentido común” -afirmó Ben Johnson, sheriff del condado de Volusia.
En Orlando, las autoridades anunciaron un toque de queda, efectivo desde las 6 de la tarde del día jueves próximo pasado hasta el sábado 11 de octubre, a las 7 AM. Esto obedece -pese a que promediando la tarde del viernes los vientos y la lluvia menguaron- a los cables eléctricos que pudieran estar en las calles, desprendidos, o grandes ramas de árboles a punto de desplomarse.
La actividad policial recibió una importante suma de voluntarios para atender los teléfonos. Estos recibían llamados y colaboraban indicando cuales y que comodidades tenían los albergues más cercanos para guarecerse del clima hostil.
Fabian Kussman
PrisioneroEnArgentina.com
Octubre 7, 2016