EL EXQUISITO ARTE DE DISTRAER A LA OPINIÓN PUBLICA.
Mientras la semana pasada la Argentina lloraba los 100.000 muertos por COVID-19 y que seguramente serán muchos mas, se conocía la noticia de que el Ministerio de Salud comprara 10.000 penes de madera pulidos, con sus respetivos maletines de color turquesa y su dispensers de preservativos, en una operación comercial que rondara los 14 millones de pesos (140.000 dólares valor oficial).
La insólita respuesta del Ministerio de Salud es que se utilizarán para educación sexual, en especial para concientizar y evitar la propagación de enfermedades de transmisión sexual.
Mas allá de lo groseramente inoportuno de la compra, que racionalmente se debió destinar a la compra de vacunas o respiradores ante la pandemia de COVID-19 que arrasa al mundo, es evidente que se trata de una clara maniobra del gobierno para distraer la atención de la gente y lograr que se discuta este tipo de ridiculeces y no lo esencial, cual son la pésima política sanitaria que ha elaborado el gobierno y que ya ha costado 100.000 muertos sumado a la falta de política económica que ha generado 50% de pobres.
En eso, hay que reconocer que el gobierno sabe ejercer el exquisito arte de distraer a la opinión publica.
Cualquier cosa le viene bien para que la gente no hable de sus incapacidad para capear las pandemia de salud y la pandemia económica que azota al país.
Hasta se las han ingeniado para que desde la hermana Bolivina involucraran al ex presidente Macri en una supuesta complicidad de represión del gobierno de transición de ese país, al que dicen accedió por un golpe de estado y catalogan de delito de lesa humanidad. Y que según dicen en off en la Rosada, en semanas Bolivia ordenaria su detención y solicitarían su extradiccion para ser juzgado en el vecino país.
En el medio el dólar sobrepasa los $ 180, la inflación sigue su lento pero firme paso y se vienen aumentos de tarifas y servicios. Hasta nada se digo del cambio a ultima hora del Presidente Fernández de no ir a Ezeiza a saludar a la campeona selección argentina de futbol, por temor a un duro reproche de Messi por la inexplicable retención de los respiradores que había donado al país. Tal reproche del héroe Messi hubiese sido un knock out para el “grogui” Presidente.
Sin dejar de mencionar que la penosa y triste situación del pueblo cubano ha pasado casi como una noticia mas, incluso en los canales llamados opositores. Nadie se anina a decir que el Vaticano de izquierdas, progresistas y seudos revolucionarios, se cae pedazos y se mantiene gracias a una sangrienta represión.
Mas aun, gracias a Dios ya comienzo el torneo de primera división de fútbol, por lo que los medios tendrán mas para hablar de Boca, River, el bar, si siguen los directores técnicos que de la realidad del país. A lo que debemos sumarle que el gobierno, sin decirlo expresamente, habilito la temporada de invierno para que la gente viaje, dejando a los gobernadores que alienten a viajar a sus provincias sin decir nada. Total, si se desmadra nuevamente la cosa, le hecha la culpa a la negligencia e imprudencia de la gente.
Lo que el gobierno aun no se percató, es que el humor esta cambiando y la gente ya “no come vidrio” -como se suele decir vulgarmente- la triste realidad golpea cada vez con más fuerza y llegara un momento que no habrá distracción que valga…
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EL EXQUISITO ARTE DE DISTRAER A LA OPINIÓN PUBLICA.
Mientras la semana pasada la Argentina lloraba los 100.000 muertos por COVID-19 y que seguramente serán muchos mas, se conocía la noticia de que el Ministerio de Salud comprara 10.000 penes de madera pulidos, con sus respetivos maletines de color turquesa y su dispensers de preservativos, en una operación comercial que rondara los 14 millones de pesos (140.000 dólares valor oficial).
Mas allá de lo groseramente inoportuno de la compra, que racionalmente se debió destinar a la compra de vacunas o respiradores ante la pandemia de COVID-19 que arrasa al mundo, es evidente que se trata de una clara maniobra del gobierno para distraer la atención de la gente y lograr que se discuta este tipo de ridiculeces y no lo esencial, cual son la pésima política sanitaria que ha elaborado el gobierno y que ya ha costado 100.000 muertos sumado a la falta de política económica que ha generado 50% de pobres.
En eso, hay que reconocer que el gobierno sabe ejercer el exquisito arte de distraer a la opinión publica.
Cualquier cosa le viene bien para que la gente no hable de sus incapacidad para capear las pandemia de salud y la pandemia económica
que azota al país.
Hasta se las han ingeniado para que desde la hermana Bolivina involucraran al ex presidente Macri en una supuesta complicidad de represión del gobierno de transición de ese país, al que dicen accedió por un golpe de estado y catalogan de delito de lesa humanidad. Y que según dicen en off en la Rosada, en semanas Bolivia ordenaria su detención y solicitarían su extradiccion para ser juzgado en el vecino país.
En el medio el dólar sobrepasa los $ 180, la inflación sigue su lento pero firme paso y se vienen aumentos de tarifas y servicios. Hasta nada se digo del cambio a ultima hora del Presidente Fernández de no ir a Ezeiza a saludar a la campeona selección argentina de futbol, por temor a un duro reproche de Messi por la inexplicable retención de los respiradores que había donado al país. Tal reproche del héroe Messi hubiese sido un knock out
para el “grogui” Presidente.
Sin dejar de mencionar que la penosa y triste situación del pueblo cubano ha pasado casi como una noticia mas, incluso en los canales llamados opositores. Nadie se anina a decir que el Vaticano de izquierdas, progresistas y seudos revolucionarios, se cae pedazos y se mantiene gracias a una sangrienta represión.
Mas aun, gracias a Dios ya comienzo el torneo de primera división de fútbol, por lo que los medios tendrán mas para hablar de Boca, River, el bar, si siguen los directores técnicos que de la realidad del país. A lo que debemos sumarle que el gobierno, sin decirlo expresamente, habilito la temporada de invierno para que la gente viaje, dejando a los gobernadores que alienten a viajar a sus provincias sin decir nada. Total, si se desmadra nuevamente la cosa, le hecha la culpa a la negligencia e imprudencia de la gente.
Lo que el gobierno aun no se percató, es que el humor esta cambiando y la gente ya “no come vidrio” -como se suele decir vulgarmente- la triste realidad golpea cada vez con más fuerza y llegara un momento que no habrá distracción que valga…
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 19, 2021