Por supuesto que no soy médico ni nada que se parezca, pero cuando comenzó la cuarentena por el COVID 19, inmediatamente lo primero que me pregunté: ¿por qué yo, estando completamente sano, tengo que permanecer encerrado, cuando históricamente, siempre fueron aisladas las personas infectadas?
Como esto me pareció una razón, sin razón alguna, comencé a interiorizarme sobre todos los hechos que ocurrían en el mundo, sean estos positivos o negativos, llegando a la triste conclusión de que se trata de una conspiración a nivel mundial para aniquilar a la gente. Especialmente a los niños y a los viejos, y en lo posible, esterilizar la mayor cantidad de personas, destruir las economías, privarnos de movernos libremente en forma obligatoria mediante decretos totalmente inconstitucionales. Tratar de imponer vacunas que no son tales y que se encuentra en estudio y causarnos terror para poder manejar más fácilmente a la población, como es el caso de la provincia de Buenos Aires, Jujuy y otras.
De todas las verdaderas vacunas que he recibido en mi vida: tétanos, rubéola, sarampión, paperas, polio, tuberculosis, etc. nunca antes había visto tanta confusión sobre una vacuna. Se me dice que tengo que usar una máscara y distanciarme socialmente, incluso cuando estoy vacunado.
Antes de continuar quiero que se entienda perfectamente, que cada vez que menciona vacuna sin ninguna otra aclaración me estoy refiriendo a estas del COVID 19 que en realidad NO SON VACUNAS. Son pruebas experimentales faltándoles al menos dos etapas para ser consideradas como tales y que a estas etapas le faltan por lo menos 5 o más años de estudios y es por ello que menciono lo siguiente:
Nunca vi que se negara en forma sistemática todos los tratamientos y remedios alternativos eficaces para erradicar este mal llamado virus.
Nunca vi ni supe cómo y con qué elementos están fabricadas.
Nunca vi que podría contraer o propagar el virus incluso estando completamente vacunado.
Nunca vi que a través de los medios de comunicación me amenazaran si no me vacunaba, que si no lo hacía era un peligro porque transportaba el virus que indefectiblemente trasmitiría a mis semejantes.
Nunca antes había estado disponible una vacuna en todos los centros posibles o sociales en que se pudiera vacunar.
Nunca vi a un gobierno tan desesperado por vacunar con todas las vacunas que, dicen tenían adquiridas a los viejos y a los niños.
Nunca vi cómo se perseguía y se aterrorizaba a los integrantes de una nación.
Nunca vi una vacuna de emergencia ante una real pandemia
Nunca tuve que preocuparme por problemas cardíacos o coágulos de sangre y de la MUERTE como efecto secundario si recibía una vacuna.
Nunca fui juzgado ni perseguido si no aceptaba una vacuna, como lo soy con esta.
Nunca vi como una vacuna era usada políticamente en beneficio de poderes foráneos.
Nunca vi en la historia de la humanidad que se pusiera una cuarentena de un año o más a las personas no infectadas.
Nunca vi la desesperación por entubar a los supuestos enfermos sabiendo que eso les produciría la muerte (98,09% de muertes).
Nunca vi a un gobierno que pagara a los medios de salud por internar, por terapia intensiva y por entubar a la gente.
Nunca vi tantos médicos que firmaran el deceso de una persona con certificados falsos por muerte por COVID.
Nunca vi médicos que fueran detenidos por simplemente querer debatir sobre la vacuna. (Ciudad de Rosario).
Nunca vi a los policías tan inhumanos cumpliendo órdenes ilegales que atentan contra todo lo que dice la Constitución.
Nunca vi gobernadores que sacaran decretos ilegales que obligan a la gente a vacunarse.
Nunca vi una vacuna que, en vez de inmunizar, produjera la muerte, parálisis parciales en el cuerpo y serias secuelas de todo tipo.
Nunca vi que fuéramos discriminados para viajes u otros servicios regulares si no nos vacunábamos.
Al no recibir las verdaderas vacunas que he enumerado anteriormente nunca vi que me dijeran que era una mala persona por no aceptarlas.
Nunca vi que una vacuna amenace la relación entre un miembro de la familia o un amigo cercano.
Nunca la vi usada con fines políticos y nunca la vi usada para persuadir a los niños a favor de un helado gratis.
Nunca he visto que por una vacuna amenazar el sustento, el trabajo, la escuela, el ingreso a lugares públicos, etc.
Nunca vi que médicos, políticos, sindicalistas, comerciantes, etc. manifestaran lo mismo: “Si no está vacunado no puede hacer tal o cual cosa”
Nunca vi que en un año solo hubiera muertos por COVID, desapareciendo las estadísticas de los decesos por otras causas, neumonía, enfermedades cardíacas, diabetes, dengue, alcohol, tabaquismo, etc. con todas sus secuelas.
Nunca vi que por una vacuna el pueblo sea usado como rata o cobayo de laboratorio.
Nunca vi un gobierno que firmara un acuerdo con los laboratorios donde se los eximia de toda responsabilidad.
Nunca vi un presidente de la Nación que amenazara a su pueblo buscando la inoculación de una vacuna, aun a sabiendas de los peligros que ellas encierran
Nunca vi una vacuna que permita que el consentimiento de un niño de doce años sustituya al consentimiento de sus padres.
Podrán decirme que soy conspirativo por el mero hecho de negarme a ponerme estas vacunas que sabemos NO SON VACUNAS, que matan y que traen serias consecuencias secundarias, y a pesar de estar vacunados lo mismo se infectan del virus.
¡No voy a vacunarme! Tengo dignidad de hombre no de rata de laboratorio, aspecto que esta refrendado por la Constitución Nacional y por todos los tratados internacionales a los cuales se ha suscripto el Estado Argentino.
Cuando se terminen todas las etapas de los ensayos clínicos que se requieren para la fabricación de una vacuna, quizás entonces podría vacunarme, y esto sería con mucha suerte al menos dentro de dos años a partir de ahora.
Nunca vi una vacuna que discrimina, divide y juzga a una sociedad. Nunca vi que toda información de verdaderas vacunas sea negada por los medios gubernamentales, que fuera censurada, borrada y eliminada de Internet.
Nunca vi a médicos y científicos sean perseguidos y detenidos por querer debatir públicamente, censurados judicialmente y se les prohibiera hablar o hacer preguntas legítimas sobre este tema.
[ezcol_3fifth]
Nunca vi a la gente perder su libertad que es su derecho legal y adquirido, en donde tal aspecto es culpa exclusiva de los medios de comunicación masiva.
Nunca vi a tantas personas recibir esta vacuna que conlleva en sí la misma muerte.
¡Nunca vi que esta vacuna previniese con total seguridad que una persona no pudiera contagiarse el virus y los que reciben doble dosis no lo están consiguiendo y todavía mueren por ello!
[/ezcol_3fifth]
[ezcol_2fifth_end]
Se Recuerda…
[/ezcol_2fifth_end]
Nunca vi que estas vacunas hagan lo que las otras verdaderas vacunas hacen y es atacar una verdadera pandemia, no así las que se fabrican para el COVID. Fueron para atacar una “plandemia” ya que su porcentaje en muertos es ínfimo y la recuperación natural de las personas es del 99% gracias a nuestro milagroso sistema inmunológico.
Nunca vi someter a las personas a vivir perseguidos y con terror quitándoles todo tipo de libertades, y quien permite que le quiten su libertad, le roban su futuro o y el de sus hijos.
Nunca vi que una vacuna divida tanto la opinión de las personas.
Compartir este escrito, ya que, si sirve para salvar una sola vida, puedo decir con orgullo, que pude evitar el asesinato de una persona de los tantos ya asesinados.
♦
Por ARIEL VALDIVIEZO.
¡NO VOY A VACUNARME!
Por supuesto que no soy médico ni nada que se parezca, pero cuando comenzó la cuarentena por el COVID 19, inmediatamente lo primero que me pregunté: ¿por qué yo, estando completamente sano, tengo que permanecer encerrado, cuando históricamente, siempre fueron aisladas las personas infectadas?
Como esto me pareció una razón, sin razón alguna, comencé a interiorizarme sobre todos los hechos que ocurrían en el mundo, sean estos positivos o negativos, llegando a la triste conclusión de que se trata de una conspiración a nivel mundial para aniquilar a la gente. Especialmente a los niños y a los viejos, y en lo posible, esterilizar la mayor cantidad de personas, destruir las economías, privarnos de movernos libremente en forma obligatoria mediante decretos totalmente inconstitucionales. Tratar de imponer vacunas que no son tales y que se encuentra en estudio y causarnos terror para poder manejar más fácilmente a la población, como es el caso de la provincia de Buenos Aires, Jujuy y otras.
De todas las verdaderas vacunas que he recibido en mi vida: tétanos, rubéola, sarampión, paperas, polio, tuberculosis, etc. nunca antes había visto tanta confusión sobre una vacuna. Se me dice que tengo que usar una máscara y distanciarme socialmente, incluso cuando estoy vacunado.
Antes de continuar quiero que se entienda perfectamente, que cada vez que menciona vacuna sin ninguna otra aclaración me estoy refiriendo a estas del COVID 19 que en realidad NO SON VACUNAS. Son pruebas experimentales faltándoles al menos dos etapas para ser consideradas como tales y que a estas etapas le faltan por lo menos 5 o más años de estudios y es por ello que menciono lo siguiente:
Nunca vi que se negara en forma sistemática todos los tratamientos y remedios alternativos eficaces para erradicar este mal llamado virus.
Nunca vi ni supe cómo y con qué elementos están fabricadas.
Nunca vi que podría contraer o propagar el virus incluso estando completamente vacunado.
Nunca vi que a través de los medios de comunicación me amenazaran si no me vacunaba, que si no lo hacía era un peligro porque transportaba el virus que indefectiblemente trasmitiría a mis semejantes.
Nunca antes había estado disponible una vacuna en todos los centros posibles o sociales en que se pudiera vacunar.
Nunca vi a un gobierno tan desesperado por vacunar con todas las vacunas que, dicen tenían adquiridas a los viejos y a los niños.
Nunca vi cómo se perseguía y se aterrorizaba a los integrantes de una nación.
Nunca vi una vacuna de emergencia ante una real pandemia
Nunca tuve que preocuparme por problemas cardíacos o coágulos de sangre y de la MUERTE como efecto secundario si recibía una vacuna.
Nunca fui juzgado ni perseguido si no aceptaba una vacuna, como lo soy con esta.
Nunca vi como una vacuna era usada políticamente en beneficio de poderes foráneos.
Nunca vi en la historia de la humanidad que se pusiera una cuarentena de un año o más a las personas no infectadas.
Nunca vi la desesperación por entubar a los supuestos enfermos sabiendo que eso les produciría la muerte (98,09% de muertes).
Nunca vi a un gobierno que pagara a los medios de salud por internar, por terapia intensiva y por entubar a la gente.
Nunca vi tantos médicos que firmaran el deceso de una persona con certificados falsos por muerte por COVID.
Nunca vi médicos que fueran detenidos por simplemente querer debatir sobre la vacuna. (Ciudad de Rosario).
Nunca vi a los policías tan inhumanos cumpliendo órdenes ilegales que atentan contra todo lo que dice la Constitución.
Nunca vi gobernadores que sacaran decretos ilegales que obligan a la gente a vacunarse.
Nunca vi una vacuna que, en vez de inmunizar, produjera la muerte, parálisis parciales en el cuerpo y serias secuelas de todo tipo.
Nunca vi que fuéramos discriminados para viajes u otros servicios regulares si no nos vacunábamos.
Al no recibir las verdaderas vacunas que he enumerado anteriormente nunca vi que me dijeran que era una mala persona por no aceptarlas.
Nunca vi que una vacuna amenace la relación entre un miembro de la familia o un amigo cercano.
Nunca la vi usada con fines políticos y nunca la vi usada para persuadir a los niños a favor de un helado gratis.
Nunca he visto que por una vacuna amenazar el sustento, el trabajo, la escuela, el ingreso a lugares públicos, etc.
Nunca vi que médicos, políticos, sindicalistas, comerciantes, etc. manifestaran lo mismo: “Si no está vacunado no puede hacer tal o cual cosa”
Nunca vi que en un año solo hubiera muertos por COVID, desapareciendo las estadísticas de los decesos por otras causas, neumonía, enfermedades cardíacas, diabetes, dengue, alcohol, tabaquismo, etc. con todas sus secuelas.
Nunca vi que por una vacuna el pueblo sea usado como rata o cobayo de laboratorio.
Nunca vi un gobierno que firmara un acuerdo con los laboratorios donde se los eximia de toda responsabilidad.
Nunca vi un presidente de la Nación que amenazara a su pueblo buscando la inoculación de una vacuna, aun a sabiendas de los peligros que ellas encierran
Nunca vi una vacuna que permita que el consentimiento de un niño de doce años sustituya al consentimiento de sus padres.
Podrán decirme que soy conspirativo por el mero hecho de negarme a ponerme estas vacunas que sabemos NO SON VACUNAS, que matan y que traen serias consecuencias secundarias, y a pesar de estar vacunados lo mismo se infectan del virus.
¡No voy a vacunarme! Tengo dignidad de hombre no de rata de laboratorio, aspecto que esta refrendado por la Constitución Nacional y por todos los tratados internacionales a los cuales se ha suscripto el Estado Argentino.
Cuando se terminen todas las etapas de los ensayos clínicos que se requieren para la fabricación de una vacuna, quizás entonces podría vacunarme, y esto sería con mucha suerte al menos dentro de dos años a partir de ahora.
Nunca vi una vacuna que discrimina, divide y juzga a una sociedad. Nunca vi que toda información de verdaderas vacunas sea negada por los medios gubernamentales, que fuera censurada, borrada y eliminada de Internet.
Nunca vi a médicos y científicos sean perseguidos y detenidos por querer debatir públicamente, censurados judicialmente y se les prohibiera hablar o hacer preguntas legítimas sobre este tema.
[ezcol_3fifth]Nunca vi a la gente perder su libertad que es su derecho legal y adquirido, en donde tal aspecto es culpa exclusiva de los medios de comunicación masiva.
Nunca vi a tantas personas recibir esta vacuna que conlleva en sí la misma muerte.
¡Nunca vi que esta vacuna previniese con total seguridad que una persona no pudiera contagiarse el virus y los que reciben doble dosis no lo están consiguiendo y todavía mueren por ello!
[/ezcol_3fifth] [ezcol_2fifth_end]Se Recuerda…
[/ezcol_2fifth_end]Nunca vi que estas vacunas hagan lo que las otras verdaderas vacunas hacen y es atacar una verdadera pandemia, no así las que se fabrican para el COVID. Fueron para atacar una “plandemia” ya que su porcentaje en muertos es ínfimo y la recuperación natural de las personas es del 99% gracias a nuestro milagroso sistema inmunológico.
Nunca vi someter a las personas a vivir perseguidos y con terror quitándoles todo tipo de libertades, y quien permite que le quiten su libertad, le roban su futuro o y el de sus hijos.
Nunca vi que una vacuna divida tanto la opinión de las personas.
Compartir este escrito, ya que, si sirve para salvar una sola vida, puedo decir con orgullo, que pude evitar el asesinato de una persona de los tantos ya asesinados.
Ariel Valdiviezo
PP-VGMT (VETERANO DE GUERRA EN EL MONTE TUCUMANO)
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 20, 2021