El conflicto origen de todos los demás es la desunión del pueblo argentino y el aprovechamiento que hacen los dirigentes politiqueros para mantener al pueblo desunido, ignorante, entregado y sumiso.
Comprobamos que quienes tratan de salvar esa zanja ideológica son menospreciados y silenciados porque es necesario mantener al pueblo en la situación enunciada y que siempre ha sido un mandato exterior.
Primero era España, luego Inglaterra, después Alemania y por último EEUU, que a su vez cumple las indicaciones de un poder oculto. Hacen 40 años era la Trilateral Comission, que proponía los cursos de acción y que a mediados de la década de 1960 intentó imponer un crecimiento demográfico contenido a la Argentina y el Gobierno Nacional de en esa oportunidad se negó y dispuso un subsidio por hijo, en contra de las disposiciones de ese organismo internacional.
Luego Inglaterra con la guerra de Malvinas, impuso una “desmalvinización intelectual” que a la fecha no ha logrado penetrar totalmente la coraza espiritual del pueblo argentino, que seguimos sintiendo como la única causa de unidad nacional, aunque haya otras que surgirán en el momento oportuno.
Nuestra querida Argentina a pesar de todos los esfuerzos de esos organismos y naciones supo mantenerse fiel al mandato de los Constituyentes de 1816 que establecieron en el Acta de la Independencia; LIBRES DE ESPAÑA Y DE TODO PODER INTERNACIONAL.
Comprobamos que hay grupos internos de politiqueros irresponsables que pretenden mantener a nuestro pueblo ignorante, hambreado, sumiso y dependiente de sus dádivas, para enriquecerse y entregar la Nación al mejor postor circunstancial, antes fueron los españoles, los ingleses, los alemanes, los yanquis y ahora es China o Rusia.
Ese es nuestro principal CONFLICTO y es la madre de todos los demás, porque en las relaciones exteriores vamos de una banda a la otra y nos convertimos en un País no confiable, moroso serial, impredecible y con alianzas con los países más conflictivos del planeta, Irán, Cuba, Venezuela, Nicaragua, China, Rusia, etc.
Es necesario que se exija responsabilidad a quienes pretenden dirigir los destinos de la Nación y los juicios de residencia deben ser para todos y con la máxima rigurosidad, incluyendo los asuntos políticos, para que ningún traidor pueda evadir la justicia en el futuro.
En síntesis, pensamos que, solucionado el problema de unidad nacional, lo demás resultará un mal recuerdo y volveremos a ser un País al que el mundo desee emigrar para vivir una vida mejor, sin necesidades y sin problemas y con un futuro para sus descendientes, como fue en el siglo XIX y principios del XX.
♦
Por Carlos Augusto Franceschi Carabajal.
El conflicto origen de todos los demás es la desunión del pueblo argentino y el aprovechamiento que hacen los dirigentes politiqueros para mantener al pueblo desunido, ignorante, entregado y sumiso.
Comprobamos que quienes tratan de salvar esa zanja ideológica son menospreciados y silenciados porque es necesario mantener al pueblo en la situación enunciada y que siempre ha sido un mandato exterior.
Primero era España, luego Inglaterra, después Alemania y por último EEUU, que a su vez cumple las indicaciones de un poder oculto. Hacen 40 años era la Trilateral Comission, que proponía los cursos de acción y que a mediados de la década de 1960 intentó imponer un crecimiento demográfico contenido a la Argentina y el Gobierno Nacional de en esa oportunidad se negó y dispuso un subsidio por hijo, en contra de las disposiciones de ese organismo internacional.
Luego Inglaterra con la guerra de Malvinas, impuso una “desmalvinización intelectual” que a la fecha no ha logrado penetrar totalmente la coraza espiritual del pueblo argentino, que seguimos sintiendo como la única causa de unidad nacional, aunque haya otras que surgirán en el momento oportuno.
Nuestra querida Argentina a pesar de todos los esfuerzos de esos organismos y naciones supo mantenerse fiel al mandato de los Constituyentes de 1816 que establecieron en el Acta de la Independencia; LIBRES DE ESPAÑA Y DE TODO PODER INTERNACIONAL.
Comprobamos que hay grupos internos de politiqueros irresponsables que pretenden mantener a nuestro pueblo ignorante, hambreado, sumiso y dependiente de sus dádivas, para enriquecerse y entregar la Nación al mejor postor circunstancial, antes fueron los españoles, los ingleses, los alemanes, los yanquis y ahora es China o Rusia.
Ese es nuestro principal CONFLICTO y es la madre de todos los demás, porque en las relaciones exteriores vamos de una banda a la otra y nos convertimos en un País no confiable, moroso serial, impredecible y con alianzas con los países más conflictivos del planeta, Irán, Cuba, Venezuela, Nicaragua, China, Rusia, etc.
Es necesario que se exija responsabilidad a quienes pretenden dirigir los destinos de la Nación y los juicios de residencia deben ser para todos y con la máxima rigurosidad, incluyendo los asuntos políticos, para que ningún traidor pueda evadir la justicia en el futuro.
En síntesis, pensamos que, solucionado el problema de unidad nacional, lo demás resultará un mal recuerdo y volveremos a ser un País al que el mundo desee emigrar para vivir una vida mejor, sin necesidades y sin problemas y con un futuro para sus descendientes, como fue en el siglo XIX y principios del XX.
Hasta la próxima.
Carlos Augusto Franceschi Carabajal
PrisioneroEnArgenina.com
Agosto 28, 2021