A la hora de crear los mitos y las leyendas los seres humanos siempre han usado su entorno, relacionando a sus deidades con los diferentes hechos que le rodean, y buscando una explicación para aquellas cosas que no entendían. Hace siglos el mundo era muy diferente a la actualidad, siendo mucho más salvaje, y por lo tanto existiendo una mayor cercanía entre el mundo animal y el de los seres humanos, haciendo que los pobladores antiguos relacionaron a esas criaturas que poblaban sus bosques y selvas con las importantes deidades a quienes atribuían las grandes hazañas.

La gran relevancia de los animales es muy diferente dependiendo de la mitología de la que se debate, siendo esta la razón por la que se debe hablar sobre algunas de las características sobre animales y mitología que se encuentran en determinados mitos. Algunas de estas características son las siguientes:

En la gran mayoría de mitologías los creyentes sacrifican animales para conseguir beneficios de los dioses.

Muchos dioses tienen uno o dos animales representativos, siendo estas criaturas las que suelen aparecer junto a ellos en las representaciones artísticas.

Algunos dioses tienden a convertirse en animales en determinados mitos, siendo un claro ejemplo las transformaciones de Zeus en sus conocidos raptos.

En la culturas más unidas al mundo salvaje algunos animales llegan a ser considerados como dioses, siendo el ejemplo más claro el del jaguar en la cultura mesoamericana.

Algunas mitologías, como la egipcia, tienen dioses que son mitad animales y mitad dioses, teniendo su origen en la distintas criaturas que viven en el entorno de estas culturas.

El caso de las deidades relacionadas con los animales es muy diferente a otros casos como el amor o el hogar, siendo estos elementos que suelen ser representados por diosas.

Artemisa o Artemis era una de los 12 olímpicos, es decir, una de las principales diosas de la mitología griega que incluso vivía en el Monte Olimpo. Era la diosa de los animales, de los nacimientos y de la caza, siendo generalmente representada con un arco y unas flechas, ya que era la forma en la que cazaba a los animales mitológicos. El animal que más unido estaba a esta diosa era el ciervo, existiendo muchas representaciones de ella con este animal, y siendo la criatura más cazada en su honor. Era hija de Zeus, siendo la gemela de Apolo y formando con ella el caso de dioses hermanos más famoso de la Antigua Grecia.

Artume era la diosa etrusca basada en Artemisa, siendo la diosa de los amantes de los animales, de las asambleas políticas de los seres humanos y de la caza, aunque en este caso solo era la diosa de la caza de las versiones neolíticas de esta disciplina. Fue el punto intermedio entre Artemisa y Diana, poseyendo elementos de ambas.

En el hinduismo Aranyani es la diosa de los bosques y de los animales que viven en ellos. Se considera como una de las diosas más alejadas de la civilización, y tiene varios textos religiosos donde se busca la comprensión de su vida en el bosque, alejada de las personas. Se considera una diosa muy especial, ya que se dice que ayuda tanto a los seres humanos como a los animales, no haciendo distinción entre ellos.

Diana es la versión romana de las diosas Artume y Artemisa, siendo una diosa virgen que representa la caza, la Luna y todo lo que habita en la naturaleza, siendo una de estas cosas los animales. Se debe tener en cuenta la evolución de la diosa, comenzando siendo una deidad muy relacionada con los animales y poco a poco estando cada vez más unida a la Luna.

Neit o Neith era la antigua diosa egipcia de los animales, de la caza, de la guerra, de la sabiduría, de los inventos, de la vida más allá de la muerte y creadora de los seres humanos. Su relación con los animales es tan grande que ha sido representada por muchas formas, siendo algunos ejemplos el del escarabajo, vaca o león.

El caso del Jaguar en la mitología mesoamericana es un caso aparte respecto a resto de los elementos comentados en este apartado, ya que en determinadas culturas se pensaba que los jaguares eran dioses que podían convertirse en forma humana, pudiendo ser por lo tanto tanto deidades masculinas como femeninas. Estos dioses estaban relacionados tanto con los animales como con la naturaleza en general, por lo que pueden ser incluidas en este apartado.