El PIB per cápita se considera un método importante para comparar qué tan pobres o ricos son los países entre sí. Decidí actualizar una de nuestras publicaciones de blog más populares y echar un vistazo a nuestros pronósticos del PIB per cápita en 2025 para los más de 130 países que cubrimos para ver cuáles se proyectan como los cinco países más pobres del mundo en el final de nuestro horizonte de previsión. Las proyecciones utilizadas en este artículo son Consensus Forecasts basadas en los pronósticos individuales de más de 1000 bancos de inversión de renombre mundial, think tanks económicos y empresas profesionales de pronósticos económicos.
Los cinco países más pobres son todos del África subsahariana, una región que sigue estando rezagada por problemas como la debilidad institucional, la corrupción, las infraestructuras deficientes y la falta de capital humano. Dicho esto, el África subsahariana también es increíblemente diversa: si bien es el hogar de los países más pobres del mundo, también cuenta con algunas de las economías más dinámicas del mundo. Por ejemplo, pronosticamos que Ruanda estará entre las cinco principales economías de más rápido crecimiento en nuestro horizonte de pronóstico. También se prevé que otros países, como Etiopía, Kenia, Senegal y Uganda, crezcan con fuerza en los próximos años. Dicho esto, echemos un vistazo a los países más pobres del mundo según el FocusEconomics Consensus Forecast para el PIB nominal per cápita de 2025.
República Democrática del Congo: USD 558 PIB per cápita en 2025
La República Democrática del Congo, el país más grande del África subsahariana, ha tenido un viaje tumultuoso desde que logró la independencia de Bélgica en 1960, con años de conflicto violento que paralizó el desarrollo económico, a pesar de la gran riqueza mineral. Además, la crisis de Covid-19 probablemente causó una contracción en la actividad económica el año pasado en medio de la reducción de la demanda mundial de productos básicos. Se prevé que la economía se recupere a una trayectoria de crecimiento bastante modesta en los próximos años, pero el potencial económico del país se verá frenado por una infraestructura débil, un entorno empresarial difícil y un suministro de energía inestable. Se prevé que el sector minero experimente una modesta recuperación en 2021, antes de acelerar en 2022. El proyecto de cobre Kamoa-Kakula (de la canadiense Ivanhoe Mines) está en camino de comenzar la producción en el tercer trimestre de 2021, mientras que la producción de minerales en las minas existentes comenzarán a recuperarse más rápidamente en ese momento en medio de un aumento más firme en los precios y la demanda global. El crecimiento constante de la minería, a su vez, impulsará ligeramente la capacidad de gasto del gobierno y, como resultado, apoyará indirectamente la actividad económica.
Mozambique: USD 607 PIB per cápita en 2025
Mozambique ha experimentado un crecimiento rápido en general en las últimas décadas, aunque el impulso se ha relajado notablemente en los últimos años, y en 2020 la economía probablemente se contrajo debido al impacto de la crisis de Covid-19. Se prevé que el crecimiento se acelere en nuestro horizonte de pronóstico a medida que entren en funcionamiento nuevos proyectos de energía, elevando el PIB per cápita de Mozambique por encima del de la República Democrática del Congo para 2025. Sin embargo, la deuda externa altísima, los precios volátiles de la energía y la insurgencia islamista en el norte del país plantean riesgos. La agricultura sigue siendo extremadamente importante para la economía […]. Sin embargo, esto cambiará a medida que el sector del carbón continúe creciendo y comiencen los megaproyectos de GNL. El sector de los servicios está ganando importancia, con un sólido crecimiento observado en las telecomunicaciones y la banca durante los últimos años, mientras que el país también exporta electricidad a los países vecinos, incluida Sudáfrica. Mozambique es reconocido como un paraíso de recursos. Con reservas de carbón y gas natural estimadas en 1.800 millones de toneladas métricas y 100 billones de pies cúbicos (tcf), respectivamente, el país podría muy bien convertirse en un jugador importante en ambas industrias a escala mundial.
Uganda: USD 1100 PIB per cápita en 2025
Después de años de inseguridad y agitación política tras la independencia del Reino Unido en 1962, Uganda ha crecido con fuerza en las últimas décadas en medio de sectores industriales y de servicios florecientes. Sin embargo, sigue siendo un país extremadamente empobrecido. Después de sufrir severamente el año pasado debido al coronavirus, se prevé que Uganda sea uno de los mejores países del África subsahariana durante los próximos cinco años y debería cerrar parcialmente la brecha en términos de PIB per cápita con los países vecinos. La expansión debe estar impulsada por el desarrollo del sector petrolero, la construcción y los servicios. Con un enfoque renovado en el desarrollo de la industria petrolera upstream, esperamos un desarrollo gradual de la infraestructura de apoyo para el sector petrolero durante 2022-25, lo que también facilitará el crecimiento. No obstante, los proyectos emblemáticos, incluido el desarrollo de yacimientos petrolíferos y el oleoducto de exportación de petróleo crudo desde los yacimientos petrolíferos de Uganda hasta el puerto de Tanga en Tanzania, siguen en la etapa de planificación. Dados los repetidos retrasos, los beneficios potenciales de estos no se tendrán en cuenta en nuestros pronósticos de crecimiento económico hasta que las compañías petroleras privadas alcancen los FID. La posible finalización de los acuerdos en 2021-22 allanaría el camino para que comience la construcción del oleoducto y, por lo tanto, presenta un importante riesgo al alza para nuestras previsiones de crecimiento para 2022-25.
Ruanda: USD 1122 PIB per cápita en 2025
La economía de Ruanda ha recorrido un largo camino desde el genocidio de principios de la década de 1990, que desgarró el tejido económico, político y social del país. El PIB per cápita aumentó de USD 250 en 2000 a más de USD 800 en 2019. Si bien la crisis de Covid-19 ciertamente truncó el progreso en los últimos doce meses en medio de una menor IED y cierres de empresas, nuestros panelistas ven que la producción per cápita continúa aumentando rápidamente durante el horizonte de previsión, respaldado por el aumento de la inversión. Sin embargo, una posición fiscal frágil, el bajo ahorro interno y la energía costosa plantean riesgos a la baja. Además, el impresionante desarrollo del país en las últimas décadas se ha basado en gran medida en el liderazgo de Paul Kagame: un eventual final de su cargo de primer ministro podría significar una mayor incertidumbre. La estabilidad del régimen parece asegurada a corto y mediano plazo. Las interrupciones y el impacto económico de la pandemia de Covid-19 no parecen haber alterado significativamente el sentimiento público, pero los desafíos persisten. Los acontecimientos y las relaciones con los países vecinos siguen siendo un factor potencialmente desestabilizador. Las preguntas sobre la sucesión del presidente Paul Kagame siguen siendo importantes y podría surgir un faccionalismo dentro del Frente Popular de Ruanda (FPR) a largo plazo. Una transición controlada hacia una mayor democracia sigue siendo una prioridad si el país espera evitar cualquier conmoción.
Zimbabue: USD 1.185 PIB per cápita en 2025
En los primeros años posteriores a la independencia en 1980, Zimbabue parecía tener un inmenso potencial económico. El país era relativamente rico para los estándares del África subsahariana, con tierra fértil, infraestructura desarrollada, gran riqueza mineral y una población educada. Sin embargo, en las décadas que siguieron, la economía entró en un declive terminal bajo el liderazgo de Robert Mugabe, particularmente desde las controvertidas reformas agrarias de la década de 2000, con un aumento del desempleo y la economía atrapada por episodios de hiperinflación. Más recientemente, Covid-19 ha infligido más daños. De cara al futuro, se prevé que las condiciones económicas sigan siendo precarias durante el horizonte de previsión, y aún se pronostica que el PIB per cápita será más bajo en 2025 que en 2019. La economía se verá frenada por una inflación extremadamente alta, un entorno político incierto y escasez de bienes básicos. No se espera ver un repunte económico en el corto plazo. Es probable que las condiciones comerciales desfavorables persistan en el corto plazo. Por lo tanto, pronosticamos una expansión técnica del PIB de solo 2,5% el próximo año. No esperamos ver una mejora en la situación política a corto o mediano plazo, y los acontecimientos del último trimestre no han hecho nada para cambiar esta evaluación. La administración del presidente Emmerson Mnangagwa ha seguido atacando a los críticos del gobierno, cada vez más a través de procesamientos selectivos y largos períodos de detención preventiva.
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El PIB per cápita se considera un método importante para comparar qué tan pobres o ricos son los países entre sí. Decidí actualizar una de nuestras publicaciones de blog más populares y echar un vistazo a nuestros pronósticos del PIB per cápita en 2025 para los más de 130 países que cubrimos para ver cuáles se proyectan como los cinco países más pobres del mundo en el final de nuestro horizonte de previsión. Las proyecciones utilizadas en este artículo son Consensus Forecasts basadas en los pronósticos individuales de más de 1000 bancos de inversión de renombre mundial, think tanks económicos y empresas profesionales de pronósticos económicos.
Los cinco países más pobres son todos del África subsahariana, una región que sigue estando rezagada por problemas como la debilidad institucional, la corrupción, las infraestructuras deficientes y la falta de capital humano. Dicho esto, el África subsahariana también es increíblemente diversa: si bien es el hogar de los países más pobres del mundo, también cuenta con algunas de las economías más dinámicas del mundo. Por ejemplo, pronosticamos que Ruanda estará entre las cinco principales economías de más rápido crecimiento en nuestro horizonte de pronóstico. También se prevé que otros países, como Etiopía, Kenia, Senegal y Uganda, crezcan con fuerza en los próximos años. Dicho esto, echemos un vistazo a los países más pobres del mundo según el FocusEconomics Consensus Forecast para el PIB nominal per cápita de 2025.
República Democrática del Congo: USD 558 PIB per cápita en 2025
La República Democrática del Congo, el país más grande del África subsahariana, ha tenido un viaje tumultuoso desde que logró la independencia de Bélgica en 1960, con años de conflicto violento que paralizó el desarrollo económico, a pesar de la gran riqueza mineral. Además, la crisis de Covid-19 probablemente causó una contracción en la actividad económica el año pasado en medio de la reducción de la demanda mundial de productos básicos. Se prevé que la economía se recupere a una trayectoria de crecimiento bastante modesta en los próximos años, pero el potencial económico del país se verá frenado por una infraestructura débil, un entorno empresarial difícil y un suministro de energía inestable. Se prevé que el sector minero experimente una modesta recuperación en 2021, antes de acelerar en 2022. El proyecto de cobre Kamoa-Kakula (de la canadiense Ivanhoe Mines) está en camino de comenzar la producción en el tercer trimestre de 2021, mientras que la producción de minerales en las minas existentes comenzarán a recuperarse más rápidamente en ese momento en medio de un aumento más firme en los precios y la demanda global. El crecimiento constante de la minería, a su vez, impulsará ligeramente la capacidad de gasto del gobierno y, como resultado, apoyará indirectamente la actividad económica.
Mozambique: USD 607 PIB per cápita en 2025
Mozambique ha experimentado un crecimiento rápido en general en las últimas décadas, aunque el impulso se ha relajado notablemente en los
últimos años, y en 2020 la economía probablemente se contrajo debido al impacto de la crisis de Covid-19. Se prevé que el crecimiento se acelere en nuestro horizonte de pronóstico a medida que entren en funcionamiento nuevos proyectos de energía, elevando el PIB per cápita de Mozambique por encima del de la República Democrática del Congo para 2025. Sin embargo, la deuda externa altísima, los precios volátiles de la energía y la insurgencia islamista en el norte del país plantean riesgos. La agricultura sigue siendo extremadamente importante para la economía […]. Sin embargo, esto cambiará a medida que el sector del carbón continúe creciendo y comiencen los megaproyectos de GNL. El sector de los servicios está ganando importancia, con un sólido crecimiento observado en las telecomunicaciones y la banca durante los últimos años, mientras que el país también exporta electricidad a los países vecinos, incluida Sudáfrica. Mozambique es reconocido como un paraíso de recursos. Con reservas de carbón y gas natural estimadas en 1.800 millones de toneladas métricas y 100 billones de pies cúbicos (tcf), respectivamente, el país podría muy bien convertirse en un jugador importante en ambas industrias a escala mundial.
Uganda: USD 1100 PIB per cápita en 2025
Después de años de inseguridad y agitación política tras la independencia del Reino Unido en 1962, Uganda ha crecido con fuerza en las últimas décadas en medio de sectores industriales y de servicios florecientes. Sin embargo, sigue siendo un país extremadamente empobrecido. Después de sufrir severamente el año pasado debido al coronavirus, se prevé que Uganda sea uno de los mejores países del África subsahariana durante los próximos cinco años y debería cerrar parcialmente la brecha en términos de PIB per cápita con los países vecinos. La expansión debe estar impulsada por el desarrollo del sector petrolero, la construcción y los servicios. Con un enfoque renovado en el desarrollo de la industria petrolera upstream, esperamos un desarrollo gradual de la infraestructura de apoyo para el sector petrolero durante 2022-25, lo que también facilitará el crecimiento. No obstante, los proyectos emblemáticos, incluido el desarrollo de yacimientos petrolíferos y el oleoducto de exportación de petróleo crudo desde los yacimientos petrolíferos de Uganda hasta el puerto de Tanga en Tanzania, siguen en la etapa de planificación. Dados los repetidos retrasos, los beneficios potenciales de estos no se tendrán en cuenta en nuestros pronósticos de crecimiento económico hasta que las compañías petroleras privadas alcancen los FID. La posible finalización de los acuerdos en 2021-22 allanaría el camino para que comience la construcción del oleoducto y, por lo tanto, presenta un importante riesgo al alza para nuestras previsiones de crecimiento para 2022-25.
Ruanda: USD 1122 PIB per cápita en 2025
La economía de Ruanda ha recorrido un largo camino desde el genocidio de principios de la década de 1990, que desgarró el tejido económico, político y social del país. El PIB per cápita aumentó de USD 250 en 2000 a más de USD 800 en 2019. Si bien la crisis de Covid-19 ciertamente truncó el progreso en los últimos doce meses en medio de una menor IED y cierres de empresas, nuestros panelistas ven que la producción per cápita continúa aumentando rápidamente durante el horizonte de previsión, respaldado por el aumento de la inversión. Sin embargo, una posición fiscal frágil, el bajo ahorro interno y la energía costosa plantean riesgos a la baja. Además, el impresionante desarrollo del país en las últimas décadas se ha basado en gran medida en el liderazgo de Paul Kagame: un eventual final de su cargo de primer ministro podría significar una mayor incertidumbre. La estabilidad del régimen parece asegurada a corto y mediano plazo. Las interrupciones y el impacto económico de la pandemia de Covid-19 no parecen haber alterado significativamente el sentimiento público, pero los desafíos persisten. Los acontecimientos y las relaciones con los países vecinos siguen siendo un factor potencialmente desestabilizador. Las preguntas sobre la sucesión del presidente Paul Kagame siguen siendo importantes y podría surgir un faccionalismo dentro del Frente Popular de Ruanda (FPR) a largo plazo. Una transición controlada hacia una mayor democracia sigue siendo una prioridad si el país espera evitar cualquier conmoción.
Zimbabue: USD 1.185 PIB per cápita en 2025
En los primeros años posteriores a la independencia en 1980, Zimbabue parecía tener un inmenso potencial económico. El país era relativamente rico para los estándares del África subsahariana, con tierra fértil, infraestructura desarrollada, gran riqueza mineral y una población educada. Sin embargo, en las décadas que siguieron, la economía entró en un declive terminal bajo el liderazgo de Robert Mugabe, particularmente desde las controvertidas reformas agrarias de la década de 2000, con un aumento del desempleo y la economía atrapada por episodios de hiperinflación. Más recientemente, Covid-19 ha infligido más daños. De cara al futuro, se prevé que las condiciones económicas sigan siendo precarias durante el horizonte de previsión, y aún se pronostica que el PIB per cápita será más bajo en 2025 que en 2019. La economía se verá frenada por una inflación extremadamente alta, un entorno político incierto y escasez de bienes básicos. No se espera ver un repunte económico en el corto plazo. Es probable que las condiciones comerciales desfavorables persistan en el corto plazo. Por lo tanto, pronosticamos una expansión técnica del PIB de solo 2,5% el próximo año. No esperamos ver una mejora en la situación política a corto o mediano plazo, y los acontecimientos del último trimestre no han hecho nada para cambiar esta evaluación. La administración del presidente Emmerson Mnangagwa ha seguido atacando a los críticos del gobierno, cada vez más a través de procesamientos selectivos y largos períodos de detención preventiva.
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 26, 2022