Ya el miércoles por la noche, más de 33,000 personas buscaron refugio en aproximadamente 260 refugios de evacuación en toda Florida para escapar del huracán Ian. El número de personas que buscan refugio podría aumentar en los próximos días a medida que continúen los cortes de energía y las personas abandonen las casas que están demasiado dañadas para quedarse.

Pasarán días antes de que se revele todo el alcance del daño que Ian dejó atrás, y el peligro no ha terminado.  Ian sigue golpeando Florida con fuertes vientos y fuertes lluvias, y en los próximos días la tormenta amenazará a los estados del norte como North y South Carolina y Virginia con aún más inundaciones.  Ian tocará por segunda vez tierra el viernes y toda la costa de Carolina del Sur está bajo un aviso de huracán. 

Esta tormenta, junto con los primeros incendios forestales en el oeste y las tormentas en Puerto Rico y Alaska, son ejemplos claros de la creciente frecuencia e intensidad de los desastres climáticos. Año tras año.

Tormentas poderosas como el huracán Ian crean una devastación generalizada y más necesidades de las que cualquier organización puede satisfacer por sí misma. La gobernación está trabajando estrechamente con toda la comunidad de respuesta – agencias gubernamentales, otros grupos sin fines de lucro, organizaciones religiosas, empresas de la zona y otros – para asegurarse de que las personas reciban la ayuda que necesitan lo más rápido posible.

Para ayudar a los pacientes de Florida, se ha enviado varios cientos de productos sanguíneos para garantizar que la sangre permanezca disponible para los pacientes en áreas afectadas por la tormenta. Estamos listos para enviar apoyo adicional según sea necesario.

A medida que las condiciones mejoren lentamente en los próximos días, los esfuerzos de respuesta se ampliarán a medida que los centros de evacuación pasen a refugios de emergencia con servicios más robustos.

 A las personas de las zonas no afectadas se les insta a donar sangre para ayudar a garantizar que los pacientes de las zonas afectadas sigan teniendo acceso a sangre que salva vidas. 

A medida que la tormenta apunta a Georgia y las Carolinas, la Cruz Roja prevé un aumento de las cancelaciones de campañas de donación de sangre en el sureste a medida que más comunidades se enfrentan a condiciones meteorológicas peligrosas.