El mundo literario de Argentina se sumió en una conmoción luego de que se descubriera que la traductora María Kodama, viuda y albacea del escritor Jorge Luis Borges, murió sin dejar un testamento, lo que dejaba en la incertidumbre la herencia del autor más importante que ha tenido este país.
La incógnita sobre qué pasaría con los bienes materiales, la Fundación Borges y los codiciados derechos de autor quedó abierta durante varias horas, luego de que Fernando Soto, el abogado de Kodama, anunciara que no encontraba ningún testamento y que estaba en la búsqueda de herederos.
Y, repentinamente, aparecieron. Este martes por la tarde reclamaron judicialmente la herencia Mariana del Socorro, Martín, Nicolás y María Belén Kodama, hijos de Jorge Kodama, el único hermano de la escritora, también ya fallecido, y con quien ella había roto toda relación.
Kodama se casó con Borges el 26 de abril de 1986, cuatro meses antes de que el autor falleciera y la designara como su única heredera. Desde entonces, la también escritora se dedicó a custodiar con firmeza la obra del autor, lo que la llevó a protagonizar diversos escándalos judiciales.
El pasado 26 de marzo, Kodama murió a los 86 años. Desde ese momento, estallaron las especulaciones sobre lo que pasaría con la herencia, ya que la pareja no tuvo hijos.
La traductora había asegurado en entrevistas que ya tenía resueltas las cuestiones legales para cuando ella muriera, por lo que se especuló con la posibilidad de que hubiera designado un nuevo albacea, tanto para resguardar el acervo como los millonarios derechos de autor que sigue generando la obra de Borges, un autor traducido en todo el mundo.
Pero no fue así. Soto reveló que no ha encontrado ningún testamento —ni en la casa de Kodama, ni en ninguna notaría, ni con ningún amigo o familiar— y que ya había iniciado un juicio de sucesión para saber si existían o no herederos.
“Su interés era que la obra de Borges fuera debidamente custodiada y difundida por universidades extranjeras, dado que en la Argentina, por cuestiones políticas e ideológicas, no se le daba esa seguridad”, aseguró el abogado en la conferencia de prensa que ofreció el lunes y en la que reveló la incertidumbre que rodeaba a la herencia.
También explicó que Kodama le había dicho que quería designar a una amiga como albacea y repartir su herencia personal, pero cuando su enfermedad empeoró, ya no tuvo tiempo de dejar plasmados esos deseos en un testamento.
De acuerdo con la ley argentina, si una persona muere sin dejar herederos, los bienes pasan al Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, que es donde radicaba Kodama.
El abogado quería evitar que ello ocurriera. “Busco que haya herederos y, si lo necesitan, ofrecerles mi asesoramiento. Desde que murió María no puedo dormir pensando en cómo resolver esta cuestión”, reconoció.
Ahora que ya aparecieron los herederos, resta realizar un inventario de bienes inmuebles en Argentina y el extranjero, obras literarias, premios, condecoraciones, manuscritos, fotos, material periodístico y títulos de propiedad de valor literario e histórico.
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El mundo literario de Argentina se sumió en una conmoción luego de que se descubriera que la traductora María Kodama, viuda y albacea del escritor Jorge Luis Borges, murió sin dejar un testamento, lo que dejaba en la incertidumbre la herencia del autor más importante que ha tenido este país.
La incógnita sobre qué pasaría con los bienes materiales, la Fundación Borges y los codiciados derechos de autor quedó abierta durante varias horas, luego de que Fernando Soto, el abogado de Kodama, anunciara que no encontraba ningún testamento y que estaba en la búsqueda de herederos.
Y, repentinamente, aparecieron. Este martes por la tarde reclamaron judicialmente la herencia Mariana del Socorro, Martín, Nicolás y María Belén Kodama, hijos de Jorge Kodama, el único hermano de la escritora, también ya fallecido, y con quien ella había roto toda relación.
Kodama se casó con Borges el 26 de abril de 1986, cuatro meses antes de que el autor falleciera y la designara como su única heredera. Desde entonces, la también escritora se dedicó a custodiar con firmeza la obra del autor, lo que la llevó a protagonizar diversos escándalos judiciales.
El pasado 26 de marzo, Kodama murió a los 86 años. Desde ese momento, estallaron las especulaciones sobre lo que pasaría con la herencia, ya que la pareja no tuvo hijos.
La traductora había asegurado en entrevistas que ya tenía resueltas las cuestiones legales para cuando ella muriera, por lo que se especuló con la posibilidad de que hubiera designado un nuevo albacea, tanto para resguardar el acervo como los millonarios derechos de autor que sigue generando la obra de Borges, un autor traducido en todo el mundo.
Pero no fue así. Soto reveló que no ha encontrado ningún testamento —ni en la casa de Kodama, ni en ninguna notaría, ni con ningún amigo o familiar— y que ya había iniciado un juicio de sucesión para saber si existían o no herederos.
“Su interés era que la obra de Borges fuera debidamente custodiada y difundida por universidades extranjeras, dado que en la Argentina, por cuestiones políticas e ideológicas, no se le daba esa seguridad”, aseguró el abogado en la conferencia de prensa que ofreció el lunes y en la que reveló la incertidumbre que rodeaba a la herencia.
También explicó que Kodama le había dicho que quería designar a una amiga como albacea y repartir su herencia personal, pero cuando su enfermedad empeoró, ya no tuvo tiempo de dejar plasmados esos deseos en un testamento.
De acuerdo con la ley argentina, si una persona muere sin dejar herederos, los bienes pasan al Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, que es donde radicaba Kodama.
El abogado quería evitar que ello ocurriera. “Busco que haya herederos y, si lo necesitan, ofrecerles mi asesoramiento. Desde que murió María no puedo dormir pensando en cómo resolver esta cuestión”, reconoció.
Ahora que ya aparecieron los herederos, resta realizar un inventario de bienes inmuebles en Argentina y el extranjero, obras literarias, premios, condecoraciones, manuscritos, fotos, material periodístico y títulos de propiedad de valor literario e histórico.
PrisioneroenArgentina.com
Abril 5, 2023