LUCIANA BERTOIA, DE PÁGINA 12… LA VOCERA DEL FISCAL PALAZZANI

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Por Claudio Kussman.

Todo imputado por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad, culpable o inocente, debe enfrentar una poderosa maquinaria, organización o como se la quiera llamar, ideológicamente radicalizada, que exitosamente y a la vista de todos, todas y “todes” lo lleva a morir en prisión, previa agonía que durante décadas lo alcanza a él y a su familia. Su accionar no es nada sofisticado, diría que más bien es grosero pese a lo cual ha tenido éxitos, en gran parte por la indiferencia, la apatía y también el temor de los uniformados, que en amplia mayoría somos sus víctimas. En dicha estructura sobresalen odiadores seriales como el iracundo jefe de Fiscales de Bahía Blanca, MIGUEL PALAZZANI. Las “querellantas”, en no pocos casos pagas por el gobierno de turno, y cuando digo gobierno de turno me refiero al kirchnerista socio de los terroristas, el macrista socio de la mentira” y ahora el de “Viva la Libertad Carajo” socio de ¿…? Un papel importante lo juega el aparato propagandístico que ha logrado imponer “el relato” e inclusive infundir miedo con sus escraches. Dentro del mismo podemos mencionar al Diario Página 12, el “De la otra mirada sobre Argentina y el mundo”, en el que desempeña un importante papel la periodista SUSANA BERTOIA, que ha demostrado ser ni más ni menos que… vocera de PALAZZANI. Así, el 12 de marzo pasado bajo el título “UN REPRESOR, CERCA DE SER DETENIDO”, (el “presunto” bien gracias se lo debo) entre mentiras y “mentiritas”, habló de la POSIBILIDAD DE FUGA O ENTORPECIMIENTO DE LA INVESTIGACIÓN, de mi parte. Argumentos como este, tan reiterada y burdamente sostenidos por magistrados y fiscales, nos lleva a permanecer sin condena en la cárcel por tiempo indeterminado. De nada vale que como en mi caso, cuando en el año 2011 me enteré de que arteramente me involucraban en este tipo de hechos, me presentara en Bahía Blanca, haciendo saber que no estaba muerto como creían, poniéndome a disposición del poder judicial. Luego esperé 3 años, donde dije que iba a estar, hasta que vinieron a detenerme. Tampoco que cumplí con toda condición legal cuando me excarcelaron en el año 2019. Siempre di la cara, no mentí y cumplí con la ley, porque esa es mi fortaleza para poder confrontar a quienes violan las normas legales, a pesar de su juramento sobre una Biblia.

El PALAZZANI igual siguió insistiendo con el peligro de fuga y el entorpecimiento de una investigación que terminó hace varios años, al extremo que en un escrito reciente habla de: “LAS MANIOBRAS EXISTENTES PARA OBSTRUIR SU JUZGAMIENTO Y QUE ESOS MECANISMOS SUBSISTEN EN LA ACTUALIDAD” (Sic). A esta altura, debo decir que añoro la palabra y la integridad de muchos delincuentes con los que tuve que lidiar en el pasado, porque a pesar de su marginalidad tenían códigos impuestos por su masculinidad y la aspereza de la calle. Eran mejores que estos “funcionarios” que tienen la obligación de respetar y hacer respetar la Ley. Afortunadamente ante las gestiones de mi defensor el DR. GONZALO MIÑO, el Tribunal Oral en un arrebato de justicia zanjó la controversia, no haciendo lugar a la solicitud del ministerio fiscal, dictaminando:

“Además, debemos ponderar positivamente su comportamiento durante el desarrollo de las audiencias de debate oral, que se han extendido por más de dos años y continúan a la fecha. Ha participado activamente de las audiencias desarrolladas, tanto de forma virtual como presencial cuando su asistencia fue necesaria, como así también durante la inspección ocular desarrollada en la sede de la Jefatura de la Policía de la Provincia de Buenos Aires el 8 de noviembre de 2023, todo ello sin que se verifique entorpecimiento alguno durante su desarrollo. Entonces, advertimos que durante alrededor de cinco años desde que se le concedió la excarcelación el Sr. Kussman ha cumplido satisfactoriamente no sólo con las pautas impuestas por el Tribunal sino también tuvo un comportamiento adecuado durante el desarrollo del debate y especialmente durante la etapa de producción probatoria, la cual ha concluido. Ello demuestra que, lejos de ser una circunstancia accidental, se trata de una conducta sostenida en el tiempo”

“Por los argumentos expuestos, el Tribunal RESUELVE: I) MANTENER LA EXCARCELACIÓN de Claudio Alejandro Kussman y la caución real oportunamente fijada e integrada a los fines de asegurar la sujeción al proceso (arts. 320 y 324 CPPN)”