Es frecuente en el lóbrego mundo paralelo de quienes estamos imputados por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad escuchar propuestas de unión y paz entre los argentinos, como así también para rezar por quienes son nuestros enemigos y entre ellos los que nos juzgan judicialmente y nos condenan a morir en prisión a como dé lugar a militares, fuerzas de seguridad, policiales, penitenciarias y civiles. Ahora bien, la convocatoria del 29 del corriente mes por la cual algunos nos reunimos, por primera vez en los mas de 20 años de detenciones, en la histórica Plaza de Mayo, la que algunos trasnochados pretende sea propiedad privada, QUEBRÓ ESA ILEGAL TERRITORIALIDAD. También dejó a la vista varias realidades que a mi parecer tienen importancia. Una por supuesto fueron los egos y diferencias existentes, de siempre, en nuestro medio que se utilizaron para justificar lamentables ausencias. ESTO CON MENTES DESAPASIONADAS Y UN POCO DE BUENA VOLUNTAD ES FACILMENTE CORREGIBLE.
Los rostros, las mentes y el odio de los años 70.
Ni hablar de los uniformados de todas las fuerzas o los representantes del gobierno “que hace temblar a los zurdos” (no sé de dónde) ya que no merecen consideración ni respeto de ningún tipo, si pensamos en quienes siguen muriendo en prisión semana a semana. La valla policial instalada, mas allá de cumplir su función evitando hechos de violencia, lamentablemente nos mostró 2 realidades INSALVABLES. De un lado, gente de la tercera edad reclamando, con una total ausencia de jóvenes, por lo cual en un plazo de tiempo bastante breve todo habrá desaparecido y quedará el espacio vacío. Ni tan siquiera llegaron al lugar hijos o nietos de los mismos prisioneros vivos o muertos por los cuales se reclamaban. ASÍ EL FUTURO NO EXISTE. Por el contrario del otro lado, casi en su totalidad los movilizados eran jóvenes, engañados y mentalizados por los odiadores de los años 70 que supieron formar nuevas generaciones, que a su vez hacen lo propio con sus descendientes. Desde ese lado de la valla llegaron “a nuestro sector” jóvenes con cámaras fotográficas haciendo tomas de nuestros rostros, acción imposible de llevar a cabo por nosotros “en su territorio” y salir indemnes y hasta quizás con vida. Entablé un corto “dialogo” con 2 de ellas y fue volver en el tiempo a los años 70, solo faltaba el tronar de las armas, la mente y el “razonamiento” eran los mismos. Mejor dicho, con una, la otra grababa en silencio. Cuando todo terminó y volvía a mi hogar las recordé y sentí pena, ya que en lugar de disfrutar de su juventud que pasa una sola vez en la vida, están dejando escapar el tiempo, motorizadas por el odio. Es evidente que la desunión, el dolor y la muerte que imperó en la confrontación fratricida del siglo pasado no dejó enseñanza positiva alguna. Ese es nuestro fracaso generacional, del cual no se habla.
NUESTRO AGRADECIMIENTO A LOS MIEMBROS DE LA POLICÍA FEDERAL, PREFECTURA Y POLICÍA DE LA CIUDAD POR EL PROLONGADO E IMPECABLE OPERATIVO REALIZADO, EVITANDO ASÍ LAMENTABLES HECHOS DE VIOLENCIA.
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Es frecuente en el lóbrego mundo paralelo de quienes estamos imputados por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad escuchar propuestas de unión y paz entre los argentinos, como así también para rezar por quienes son nuestros enemigos y entre ellos los que nos juzgan judicialmente y nos condenan a morir en prisión a como dé lugar a militares, fuerzas de seguridad, policiales, penitenciarias y civiles. Ahora bien, la convocatoria del 29 del corriente mes por la cual algunos nos reunimos, por primera vez en los mas de 20 años de detenciones, en la histórica Plaza de Mayo, la que algunos trasnochados pretende sea propiedad privada, QUEBRÓ ESA ILEGAL TERRITORIALIDAD. También dejó a la vista varias realidades que a mi parecer tienen importancia. Una por supuesto fueron los egos y diferencias existentes, de siempre, en nuestro medio que se utilizaron para justificar lamentables ausencias. ESTO CON MENTES DESAPASIONADAS Y UN POCO DE BUENA VOLUNTAD ES FACILMENTE CORREGIBLE.
Ni hablar de los uniformados de todas las fuerzas o los representantes del gobierno “que hace temblar a los zurdos” (no sé de dónde) ya que no merecen consideración ni respeto de ningún tipo, si pensamos en quienes siguen muriendo en prisión semana a semana. La valla policial instalada, mas allá de cumplir su función evitando hechos de violencia, lamentablemente nos mostró 2 realidades INSALVABLES. De un lado, gente de la tercera edad reclamando, con una total ausencia de jóvenes, por lo cual en un plazo de tiempo bastante breve todo habrá desaparecido y quedará el espacio vacío. Ni tan siquiera llegaron al lugar hijos o nietos de los mismos prisioneros vivos o muertos por los cuales se reclamaban. ASÍ EL FUTURO NO EXISTE. Por el contrario del otro lado, casi en su totalidad los movilizados eran jóvenes, engañados y mentalizados por los odiadores de los años 70 que supieron formar nuevas generaciones, que a su vez hacen lo propio con sus descendientes. Desde ese lado de la valla llegaron “a nuestro sector” jóvenes con cámaras fotográficas haciendo tomas de nuestros rostros, acción imposible de llevar a cabo por nosotros “en su territorio” y salir indemnes y hasta quizás con vida. Entablé un corto “dialogo” con 2 de ellas y fue volver en el tiempo a los años 70, solo faltaba el tronar de las armas, la mente y el “razonamiento” eran los mismos. Mejor dicho, con una, la otra grababa en silencio. Cuando todo terminó y volvía a mi hogar las recordé y sentí pena, ya que en lugar de disfrutar de su juventud que pasa una sola vez en la vida, están dejando escapar el tiempo, motorizadas por el odio. Es evidente que la desunión, el dolor y la muerte que imperó en la confrontación fratricida del siglo pasado no dejó enseñanza positiva alguna. Ese es nuestro fracaso generacional, del cual no se habla.
Claudio Kussman
Comisario Mayor (R)
Policía Prov. Buenos Aires
claudio@PrisioneroEnArgentina.com
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NUESTRO AGRADECIMIENTO A LOS MIEMBROS DE LA POLICÍA FEDERAL, PREFECTURA Y POLICÍA DE LA CIUDAD POR EL PROLONGADO E IMPECABLE OPERATIVO REALIZADO, EVITANDO ASÍ LAMENTABLES HECHOS DE VIOLENCIA.
PrisioneroEnArgentina.com
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Dic 01, 2025