Ni una cosa ni la otra. Hay ricos buenos, otros muy buenos, otros muy malos. Así también hay pobres buenos, otros muy buenos, otros muy malos. Es un tema que debe ser analizado con toda objetividad y no sujeto a un análisis ideológico desde la izquierda o de la derecha. Para la “gauche national” (izquierda nacional) argentina-los partidos de esa tendencia sostienen que, los ricos son malos y someten a su antojo al pueblo, a los pobres, eso refleja un sentimiento de bronca y no soportan al sector empresarial, sin los cuales el pueblo no tendría trabajo y no podrían sostener a sus hogares, ni alimentar a sus hijos. Están equivocados, no se dan cuenta que los empresarios deben existir en la economía de cualquier país del mundo. Con el pago de sus impuestos se generan las divisas suficientes para mantener el funcionamiento del Estado Nacional. ¿Qué pretende la Señora de Bonafini oponiéndose a que el gobierno de Alberto Fernández negocie con los empresarios? Es fundamental que lo haga, necesita del apoyo de estos para resolver el tema de los pobres que al decir del primer mandatario tanto le interesa. No hay que confrontar en una sociedad entre ricos y a pobres. Hay muchísimos ricos que ayudan a resolver el problema de los pobres, a paliar sus necesidades materiales. Muchos hacen beneficencia y muchos dejan dinero al morir para obras de interés nacional. Es lógico que exista ese dialogo, es absolutamente necesario que así sea. Muchos pobres trabajando para los ricos pueden cambiar de status social y llegar a ser parte de la clase media en cualquier país del mundo, ocurre en Argentina país de gran movilidad social. Pueden llegar también a ser empresarios chicos, medianos o grandes. En todo esto está muy metida la “ideología,” los izquierdistas se la pasan criticando, pero a la hora de la verdad ellos resultan ser los individuos más ricos del planeta, se convierten en empresarios buenos. Los empresarios malos son los otros, los vinculados a los partidos de derecha. ¿Se olvidaron de los pobres? Si. ¿Cristina, Bonafini, Báez, etc invierten “sus” dineros en la Matanza? No. Son ricos malos. Se olvidan de los más necesitados. Invierten en Puerto Madero, zona para privilegiados del país. No podemos generalizar, todo lo contrario. El rico debe mirar al pobre bien, de manera solidaria y cristiana, es su prójimo, se lo merece. No hay que buscar una confrontación porque es inútil y no conduce a nada positivo. Hay que buscar la estabilidad socio-económica-política lo que es por cierto difícil en los países subdesarrollados como el nuestro para no pensar que los ricos son malos y los pobres son los únicos buenos. No ocurre esto de forma tan profunda en los países desarrollados. ¿Es posible construir un país estable siempre enfrentando a los distintos sectores de la sociedad? DEFINITIVAMENTE NO.
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¿RICOS MALOS? Y ¿POBRES BUENOS?
Por FRANCISCO BÉNARD
Ni una cosa ni la otra. Hay ricos buenos, otros muy buenos, otros muy malos. Así también hay pobres buenos, otros muy buenos, otros muy malos. Es un tema que debe ser analizado con toda objetividad y no sujeto a un análisis ideológico desde la izquierda o de la derecha. Para la “gauche national” (izquierda nacional) argentina-los partidos de esa tendencia sostienen que, los ricos son malos y someten a su antojo al pueblo, a los pobres, eso refleja un sentimiento de bronca y no soportan al sector empresarial, sin los cuales el pueblo no tendría trabajo y no podrían sostener a sus hogares, ni alimentar a sus hijos. Están equivocados, no se dan cuenta que los empresarios deben existir en la economía de cualquier país del mundo. Con el pago de sus impuestos se generan las divisas suficientes para mantener el funcionamiento del Estado Nacional. ¿Qué pretende la Señora de Bonafini oponiéndose a que el gobierno de Alberto Fernández negocie con los empresarios? Es fundamental que lo haga, necesita del apoyo de estos para resolver el tema de los pobres que al decir del primer mandatario tanto le interesa. No hay que confrontar en una sociedad entre ricos y a pobres. Hay muchísimos ricos que ayudan a resolver el problema de los pobres, a paliar sus necesidades materiales. Muchos hacen beneficencia y muchos dejan dinero al morir para obras de interés nacional. Es lógico que exista ese dialogo, es absolutamente necesario que así sea. Muchos pobres trabajando para los ricos pueden cambiar de status social y llegar a ser parte de la clase media en cualquier país del mundo, ocurre en Argentina país de gran movilidad social. Pueden llegar también a ser empresarios chicos, medianos o grandes. En todo esto está muy metida la “ideología,” los izquierdistas se la pasan criticando, pero a la hora de la verdad ellos resultan ser los individuos más ricos del planeta, se convierten en empresarios buenos. Los empresarios malos son los otros, los vinculados a los partidos de derecha. ¿Se olvidaron de los pobres? Si. ¿Cristina, Bonafini, Báez, etc invierten “sus” dineros en la Matanza? No. Son ricos malos. Se olvidan de los más necesitados. Invierten en Puerto Madero, zona para privilegiados del país. No podemos generalizar, todo lo contrario. El rico debe mirar al pobre bien, de manera solidaria y cristiana, es su prójimo, se lo merece. No hay que buscar una confrontación porque es inútil y no conduce a nada positivo. Hay que buscar la estabilidad socio-económica-política lo que es por cierto difícil en los países subdesarrollados como el nuestro para no pensar que los ricos son malos y los pobres son los únicos buenos. No ocurre esto de forma tan profunda en los países desarrollados. ¿Es posible construir un país estable siempre enfrentando a los distintos sectores de la sociedad? DEFINITIVAMENTE NO.
Dr. Francisco Bénard
Abogado, Periodista, Escritor y Poeta
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 17, 2020