Creer o reventar, pero hay un grupo de personas todavía muy enojadas con Walt Disney, quién murió hace 55 años. Cómo una disputa apasionada, Biden o Trump, Microsoft o Apple, Frazier o Ali, ciertas personas tratan de dividir las aguas entre los que aman y los que odian a Walt. Los primeros, por brindar sus maravillosos parques temáticos. Los segundos, por una promesa incumplida.
Epcot era originalmente un acrónimo que significa “Comunidad de prototipos experimentales del mañana”, y en realidad fue la razón inicial para venir a Florida Central. Walt no solo quería construir un Disneyland más grande sin limitaciones de espacio, sino que también quería intentar usar parte de la tecnología que su equipo había desarrollado en una ciudad. Se le cita diciendo: “No creo que exista un desafío en ningún lugar del mundo que sea más importante para las personas en todas partes que encontrar soluciones a los problemas de nuestras ciudades”.
Walt imaginó unos 20.000 residentes en Epcot y que las empresas (como General Electric GE) podrían utilizarlo como campo de pruebas para sus últimos inventos y tecnologías.
La idea original de Walt para EPCOT incluía un centro de la localidad llamado “Ciudad Progreso”. En ese lugar habría pabellones donde los residentes y visitantes podrían aprender sobre tecnología, océanos, comunicación, energía, espacio y más. Además, habría un mercado mundial, donde podría viajar alrededor del planeta en un día.
También en el eje central estarían los distritos de negocios y comercio, así como la vida urbana en rascacielos. En el mismo centro, residiría un centro de convenciones de 30 pisos y un hotel elegante.
Walt tuvo la idea de que rodeando el eje central estarían los barrios residenciales, disparándose como los rayos de una rueda. Los residentes viajarían al centro de la ciudad a través de monorriel o transporte de personas, eliminando la necesidad de automóviles dentro de EPCOT. Solo los necesitaría si estuviera viajando dentro o fuera de la ciudad. De hecho, la mayoría de las entregas y los viajes en automóvil se realizarían en carreteras especiales debajo de la ciudad.
Walt incluso pensó en la basura en su ciudad del futuro. Los residentes lo sacarían a la calle, pero lo succionarían bajo tierra y lo llevarían rápidamente para ser procesado.
Además, toda la ciudad estaría bajo una burbuja de clima controlado. De hecho, se puede ver este enorme modelo de Progress City cuando se monta en el Peoplemover de Tomorrowland Transit Authority en Magic Kingdom.
Lamentablemente, cuando Walt falleció en 1966, la idea de Epcot como ciudad lo acompañó. Nadie más sintió que podría llevar a cabo su idea de una comunidad real sin él. Pero las ideas y la inspiración de Epcot quedaron y fueron la base del parque temático tal como lo conocemos hoy.
Muchas de las ideas y conceptos que Walt quería enseñar en su plan original para Epcot se pueden encontrar en el parque. Por ejemplo, se aprende sobre comunicación en Spaceship Earth, los océanos en The Seas y el espacio en Mission: Space.
Además, el mercado internacional ha cobrado vida en World Showcase. También hay una razón por la que el monorraíl se acerca a Epcot en lugar de simplemente detenerse fuera del parque: es un símbolo de innovación. E incluso la idea de la basura se hizo realidad: ¡en Magic Kingdom, la basura se succiona a través de tubos debajo de tus pies a 35 mph!
Aunque Epcot es muy diferente de lo que se suponía originalmente, sigue siendo un centro de tecnología, innovación y viajes por el mundo.
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Creer o reventar, pero hay un grupo de personas todavía muy enojadas con Walt Disney, quién murió hace 55 años. Cómo una disputa apasionada, Biden o Trump, Microsoft o Apple, Frazier o Ali, ciertas personas tratan de dividir las aguas entre los que aman y los que odian a Walt. Los primeros, por brindar sus maravillosos parques temáticos. Los segundos, por una promesa incumplida.
Walt imaginó unos 20.000 residentes en Epcot y que las empresas (como General Electric GE) podrían utilizarlo como campo de pruebas para sus últimos inventos y tecnologías.
La idea original de Walt para EPCOT incluía un centro de la localidad llamado “Ciudad Progreso”. En ese lugar habría pabellones donde los residentes y visitantes podrían aprender sobre tecnología, océanos, comunicación, energía, espacio y más. Además, habría un mercado mundial, donde podría viajar alrededor del planeta en un día.
Walt tuvo la idea de que rodeando el eje central estarían los barrios residenciales, disparándose como los rayos de una rueda. Los residentes viajarían al centro de la ciudad a través de monorriel o transporte de personas, eliminando la necesidad de automóviles dentro de EPCOT. Solo los necesitaría si estuviera viajando dentro o fuera de la ciudad. De hecho, la mayoría de las entregas y los viajes en automóvil se realizarían en carreteras especiales debajo de la ciudad.
Walt incluso pensó en la basura en su ciudad del futuro. Los residentes lo sacarían a la calle, pero lo succionarían bajo tierra y lo llevarían rápidamente para ser procesado.
Además, toda la ciudad estaría bajo una burbuja de clima controlado. De hecho, se puede ver este enorme modelo de Progress City cuando se monta en el Peoplemover de Tomorrowland Transit Authority en Magic Kingdom.
Muchas de las ideas y conceptos que Walt quería enseñar en su plan original para Epcot se pueden encontrar en el parque. Por ejemplo, se aprende sobre comunicación en Spaceship Earth, los océanos en The Seas y el espacio en Mission: Space.
Además, el mercado internacional ha cobrado vida en World Showcase. También hay una razón por la que el monorraíl se acerca a Epcot en lugar de simplemente detenerse fuera del parque: es un símbolo de innovación. E incluso la idea de la basura se hizo realidad: ¡en Magic Kingdom, la basura se succiona a través de tubos debajo de tus pies a 35 mph!
Aunque Epcot es muy diferente de lo que se suponía originalmente, sigue siendo un centro de tecnología, innovación y viajes por el mundo.
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 20, 2021