EN CUALQUIER PAÍS NORMAL SE HOMENAJEA Y CONDECORA A QUIENES COMBATEN AL TERRORISMO,
ACA SE LOS ENCARCELA, JUZGA Y CONDENA.
Como si Argentina fuera un isla paradisiaca en el planeta, lejos de la pandemia que lo azota y de la pandemia de pobreza que sacude a los país subdesarrollados -como nosotros-, dedicamos todo nuestro ahínco y voluntad en encolumnarnos detrás del terrorismo internacional, dando definitivamente la espalda al mundo.
En la semana nos enteramos que el gobierno nacional retiró su apoyo a la demanda por delitos de lesa humanidad que el Grupo de Lima interpuso contra el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela, ante la Corte Penal Internacional (CPI) en La Haya.
Eso no es nada.
También en la semana el gobierno nacional instruyó a la Cancillería para que en la reunión de las Naciones Unidas votáramos contra Israel solicitando la creación de una comisión para investigar las presuntas violaciones a los derechos humanos cometidas cuando enfrentó los múltiples ataques terroristas ejecutados por Hamas desde la Franja de Gaza.
Pero hay mas y todo en la misma semana.
En su vista a Cuba, en busca de una supuesta vacuna que estaría fabricando ese país, la Ministra de Salud de la Nación Carla Vizzotti aprovechó el viaje y fue a visitar el Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau, que está coordinado por la argentina María Santucho que reside en la isla desde sus quince años -sobrina de Mario Roberto Santucho, líder del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP)- y homenajear al líder terrorista.
Todo ello demuestra que, tras un año de realizar un delicado equilibrio entre lo que cree interiormente y lo que dice públicamente, el gobierno nacional decidió mostrar su “verdadero rostro” y blanquear lo que era un secreto a voces, que los mismos que empuñaron las armas en los años 70 en organizaciones terroristas, son los mismos que hoy nos gobiernan.
Así queda al descubierto la obscena doble moral que tiene el gobierno nacional y los grupos de derechos humanos, que lo apoyan incondicionalmente, aun a costa de saber que está hambreando a su pueblo. Mientras que en nuestro país blanden la bandera de los 30.000 desaparecidos (que todos sabemos que fueron 6.415), en Venezuela se sabe que hubo mas de 330.000 muertes violentas, 6.800 ejecuciones extrajudiciales y un numero desconocido de desaparecidos y nada dicen, al contrario veneran a sus sanguinarios lideres como Chávez y Maduro. Sin mencionar que el salario promedio de un venezolano es de un (1) dólar y la inflación llega al 3700 % anual.
¿Como el gobierno nacional no va a apoyar a los terroristas de Hamas en el Líbano, cuando todos sabemos que los terroristas argentinos de Montoneros se entrenaron en los campos del Líbano de la OLP y Al Fatah, en los años 70? Basta con mirar en cualquier buscador de internet y encontraran las fotos de Eduardo Firmenich y Fernando Vaca Narvaja abrazados a Yasser Arafat.
Esta claro que desde el gobierno nacional y los grupos de derechos humanos reivindican a todos los grupos terroristas que actuaron en el país, sea Ejercito Revolucionario del Pueblo (ERP), sea Montoneros.
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No olvidemos la foto de amplia difusión mundial en el año 2014, cuando en las calles de la franja de Gaza una manifestación que apoyaba al grupo terrorista Hamas, las Brigadas de Abu Ali Mustafa, uno de los tantos brazos armados de la resistencia terrorista palestina, mostraban orgullosos tres fotografías juntas: la del líder de Hezbollah en el Líbano, Hassan Nasrallah, una de la entonces presidente Cristina Kirchner y otra del fallecido mandatario venezolano Hugo Chávez.
Para esta gente, la conducta es delito según quien ejecute tal conducta. Si lo hacen ellos esta bien y deben ser reivindicados. Si lo hacen los otros es delito y hay que encerrarlos y condenarlos de por vida.
De esta forma se entenderá porque desde hace dieciocho (18) años se vienen juzgando militares, policías y civiles, una y otra vez, en las denominadas causas de lesa humanidad. Puesellos no perdonan que le hayan ganado la guerra en el campo militar, aniquilándolos, como fuera ordenado por el gobierno constitucional de Isabel Martínez de Perón, impidiendo que llevaran a cabo su delirante plan de instalar una Cuba en nuestro país. No se lo perdonan y por ello seguirán juzgando y condenando, ante una sociedad indiferente y un Poder Judicial al que supieron doblegar con billetera y látigo.
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En cualquier país normal se homenajea y condecora a quienes combaten al terrorismo, aca se los encierra, juzga y condena, convirtiéndonos en el hazme reír del mundo. Quizás en un algún tiempo, cuando ya no tengan a quien mas juzgar en estas tierras, emigren a los Estados Unidos para juzgar allí militares por asesinar y desaparecer a Bin Laden y su gente, previa reivindicación del mismo y su grupo Al Qaeda.
Por eso jamás se investigaran seriamente en nuestro país, ni el atentado a la Embajada de Israel, la AMIA y el asesinato del Fiscal Nisman. No sea cosa que se descubra la conexión argentina de ex terroristas, con dichos hechos. Como nada dicen de los 75.000 muertos por la falta de vacunación, siendo que las pocas vacunas que trajeron se las robaron y las pusieron ellos mismos. Eso si es delito de lesa humanidad.
Analizando el pasado y viendo el presente, no hace falta tener poderes extrasensoriales para advertir como devendrá el futuro.
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EN CUALQUIER PAÍS NORMAL SE HOMENAJEA Y CONDECORA A QUIENES COMBATEN AL TERRORISMO,
ACA SE LOS ENCARCELA, JUZGA Y CONDENA.
Como si Argentina fuera un isla paradisiaca en el planeta, lejos de la pandemia que lo azota y de la pandemia de pobreza que sacude a los país subdesarrollados -como nosotros-, dedicamos todo nuestro ahínco y voluntad en encolumnarnos detrás del terrorismo internacional, dando definitivamente la espalda al mundo.
Eso no es nada.
También en la semana el gobierno nacional instruyó a la Cancillería para que en la reunión de las Naciones Unidas votáramos contra Israel solicitando la creación de una comisión para investigar las presuntas violaciones a los derechos humanos cometidas cuando enfrentó los múltiples ataques terroristas ejecutados por Hamas desde la Franja de Gaza.
Pero hay mas y todo en la misma semana.
En su vista a Cuba, en busca de una supuesta vacuna que estaría fabricando ese país, la Ministra de Salud de la Nación Carla Vizzotti aprovechó el viaje y fue a visitar el Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau, que está coordinado por la argentina María Santucho que reside en la isla desde sus quince años -sobrina de Mario Roberto Santucho, líder del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP)- y homenajear al líder terrorista.
Todo ello demuestra que, tras un año de realizar un delicado equilibrio entre lo que cree interiormente y lo que dice públicamente, el gobierno nacional decidió mostrar su “verdadero rostro” y blanquear lo que era un secreto a voces, que los mismos que empuñaron las armas en los años 70 en organizaciones terroristas, son los mismos que hoy nos gobiernan.
Así queda al descubierto la obscena doble moral que tiene el gobierno nacional y los grupos de derechos humanos, que lo apoyan incondicionalmente, aun a costa de saber que está hambreando a su pueblo. Mientras que en nuestro país blanden la bandera de los 30.000 desaparecidos (que todos sabemos que fueron 6.415), en Venezuela se sabe que hubo mas de 330.000 muertes violentas, 6.800 ejecuciones extrajudiciales y un numero desconocido de desaparecidos y nada dicen, al contrario veneran a sus sanguinarios lideres como Chávez y Maduro. Sin mencionar que el salario promedio de un venezolano es de un (1) dólar y la inflación llega al 3700 % anual.
¿Como el gobierno nacional no va a apoyar a los terroristas de Hamas en el Líbano, cuando todos sabemos que los terroristas argentinos de Montoneros se entrenaron en los campos del Líbano de la OLP y Al Fatah, en los años 70? Basta con mirar en cualquier buscador de internet y encontraran las fotos de Eduardo Firmenich y Fernando Vaca Narvaja abrazados a Yasser Arafat.
Esta claro que desde el gobierno nacional y los grupos de derechos humanos reivindican a todos los grupos terroristas que actuaron en el país, sea Ejercito Revolucionario del Pueblo (ERP), sea Montoneros.
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No olvidemos la foto de amplia difusión mundial en el año 2014, cuando en las calles de la franja de Gaza una manifestación que apoyaba al grupo terrorista Hamas, las Brigadas de Abu Ali Mustafa, uno de los tantos brazos armados de la resistencia terrorista palestina, mostraban orgullosos tres fotografías juntas: la del líder de Hezbollah en el Líbano, Hassan Nasrallah, una de la entonces presidente Cristina Kirchner y otra del fallecido mandatario venezolano Hugo Chávez.
Para esta gente, la conducta es delito según quien ejecute tal conducta. Si lo hacen ellos esta bien y deben ser reivindicados. Si lo hacen los otros es delito y hay que encerrarlos y condenarlos de por vida.
De esta forma se entenderá porque desde hace dieciocho (18) años se vienen juzgando militares, policías y civiles, una y otra vez, en las denominadas causas de lesa humanidad. Pues ellos no perdonan que le hayan ganado la guerra en el campo militar, aniquilándolos, como fuera ordenado por el gobierno constitucional de Isabel Martínez de Perón, impidiendo que llevaran a cabo su delirante plan de instalar una Cuba en nuestro país. No se lo perdonan y por ello seguirán juzgando y condenando, ante una sociedad indiferente y un Poder Judicial al que supieron doblegar con billetera y látigo.
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Por eso jamás se investigaran seriamente en nuestro país, ni el atentado a la Embajada de Israel, la AMIA y el asesinato del Fiscal Nisman. No sea cosa que se descubra la conexión argentina de ex terroristas, con dichos hechos. Como nada dicen de los 75.000 muertos por la falta de vacunación, siendo que las pocas vacunas que trajeron se las robaron y las pusieron ellos mismos. Eso si es delito de lesa humanidad.
Analizando el pasado y viendo el presente, no hace falta tener poderes extrasensoriales para advertir como devendrá el futuro.
PrisioneroEnArgentina.com
Mayo 31, 2021
Tags: Alberto Fernández, Hamas, KirchnerismoRelated Posts
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