La niña fue asesinada a golpes con un machete y un tronco de madera después de que reveló que estaba saliendo con alguien, en un caso que conmocionó a la nación. Si bien los asesinatos por honor son comunes en el Medio Oriente y el sur de Asia, hasta ahora no ha habido informes de este tipo en Indonesia.
Indonesia es conocida por su diversidad y su profesión moderada al Islam, pero a los activistas les preocupan los razonamientos patriarcales para con las mujeres. El primer asesinato de honor de una colegiala en Indonesia a principios del mes pasado conmocionó a la nación y llevó a los activistas de derechos humanos a advertir sobre un efecto de “contagio” en medio de una ola creciente de ultraconservadurismo religioso. Rosmini binte Darwis, de 16 años, comenzó su día el 9 de mayo como cualquier otro, y se quedó en casa mientras su escuela en Bantaeng, South Sulawesi estaba cerrada debido a la pandemia de coronavirus. La joven de 16 años no estaba en el mejor estado de salud: había estado vomitando y sufriendo desmayos durante semanas. Su familia decidió que había sido “poseída” y la envió a un chamán en lugar de a un médico, dijo la policía. Al enterarse de su enfermedad, el primo de Rosmini, Usman, vino a visitarla, una llegada que la marcó por la muerte.
Su hermano mayor, Rahman, de 30 años, acusó a Usman de usar magia negra en su hermana, dijo la policía.
La admisión de Rosmini de que estaba en una relación con Usman encendió aún más una situación ya cargada de emociones. Usman negó la acusación. Indignado por la revelación, Rahman comenzó a atacar a su primo con un tronco de madera.
Usman huyó, con Rahman y otro hermano, Surianto, de 20 años, pisándole los talones. Usman se las arregló para evadir la captura. Cuando los hermanos no lograron atrapar a Usman, volvieron, pero tomaron como rehén a un vecino joven que encontraron en el camino, en un intento por obligarlo a casarse con Rosmini. El joven se negó. Sin embargo, lo llevaron de regreso a su casa, donde lo reunieron a Rosmini y al resto de la familia, en una habitación, donde se desarrolló una escena brutal, dijo la policía.
Con un machete y un tronco de madera, Rahman y Surianto mataron a golpes a Rosmini mientras todos observaban, dijo la policía. Según la policía, Rosmini no luchó por su vida. “Se entregó a su destino”, dijo Wawan Sumantri, jefe de policía de la regencia de Bantaeng. Wawan dijo que se sabía que Rosmini era una buena hija que no le dio problemas a la familia y que en general fue bien tratada antes de ese fatídico día. Sus dos hermanos, ambos granjeros, fueron arrestados por su asesinato. “La investigación mostró que fue asesinada porque la familia se sintió avergonzada de no haberse recuperado de su enfermedad y de que había dicho que estaba en una relación con Usman”, dijo Wawan. “Este es un caso de asesinato por honor“. Wawan dijo que “no se pudo probar” Rosmini tuvo relaciones sexuales con Usman.
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La niña fue asesinada a golpes con un machete y un tronco de madera después de que reveló que estaba saliendo con alguien, en un caso que conmocionó a la nación. Si bien los asesinatos por honor son comunes en el Medio Oriente y el sur de Asia, hasta ahora no ha habido informes de este tipo en Indonesia.
Indonesia es conocida por su diversidad y su profesión moderada al Islam, pero a los activistas les preocupan los razonamientos patriarcales para con las mujeres.
activistas de derechos humanos a advertir sobre un efecto de “contagio” en medio de una ola creciente de ultraconservadurismo religioso.
El primer asesinato de honor de una colegiala en Indonesia a principios del mes pasado conmocionó a la nación y llevó a los
Rosmini binte Darwis, de 16 años, comenzó su día el 9 de mayo como cualquier otro, y se quedó en casa mientras su escuela en Bantaeng, South Sulawesi estaba cerrada debido a la pandemia de coronavirus.
La joven de 16 años no estaba en el mejor estado de salud: había estado vomitando y sufriendo desmayos durante semanas. Su familia decidió que había sido “poseída” y la envió a un chamán en lugar de a un médico, dijo la policía.
Al enterarse de su enfermedad, el primo de Rosmini, Usman, vino a visitarla, una llegada que la marcó por la muerte.
Su hermano mayor, Rahman, de 30 años, acusó a Usman de usar magia negra en su hermana, dijo la policía.
La admisión de Rosmini de que estaba en una relación con Usman encendió aún más una situación ya cargada de emociones. Usman negó la acusación.
Indignado por la revelación, Rahman comenzó a atacar a su primo con un tronco de madera.
Usman huyó, con Rahman y otro hermano, Surianto, de 20 años, pisándole los talones. Usman se las arregló para evadir la captura.
Cuando los hermanos no lograron atrapar a Usman, volvieron, pero tomaron como rehén a un vecino joven que encontraron en el camino, en un intento por obligarlo a casarse con Rosmini. El joven se negó.
Sin embargo, lo llevaron de regreso a su casa, donde lo reunieron a Rosmini y al resto de la familia, en una habitación, donde se desarrolló una escena brutal, dijo la policía.
Con un machete y un tronco de madera, Rahman y Surianto mataron a golpes a Rosmini mientras todos observaban, dijo la policía.
Según la policía, Rosmini no luchó por su vida. “Se entregó a su destino”, dijo Wawan Sumantri, jefe de policía de la regencia de Bantaeng.
Wawan dijo que se sabía que Rosmini era una buena hija que no le dio problemas a la familia y que en general fue bien tratada antes de ese fatídico día.
Sus dos hermanos, ambos granjeros, fueron arrestados por su asesinato.
“La investigación mostró que fue asesinada porque la familia se sintió avergonzada de no haberse recuperado de su enfermedad y de que había dicho que estaba en una relación con Usman”, dijo Wawan. “Este es un caso de asesinato por honor“.
Wawan dijo que “no se pudo probar” Rosmini tuvo relaciones sexuales con Usman.
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 1, 2020