El 15 de noviembre de 2017 murió RICARDO LUIS VON KYAW, Capitán del Ejército Argentino, a la edad de 69 años de edad. Fue el prisionero número 425 que fallecía y el número 85 desde el 10 de diciembre de 2015, cuando gracias a nuestro voto, se hiciera cargo del gobierno nacional, MAURICIO MACRI. En el año 2015, compartimos durante varios meses espacio en el pabellón 19 de la unidad penitenciaria 31 de Ezeiza.
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Luego él fue trasladado al pabellón 8 donde ocupaba una celda individual, que hizo mejorar (goteras, y pintura) a sus costas. A mediados de enero de 2016 el Juez Federal LAUREANO DURÁN, sin oposición de los fiscales, le concedió el arresto domiciliario por razones humanitarias.
VON KYAW padecía cáncer cerebral y en la prisión no recibía el tratamiento apropiado, al punto que transcurrían los meses y no se le administraba la medicación recomendada.
Ya desalojada su celda y preparado para partir fue notificado de la negativa del traslado a su hogar, por resolución del militante y siniestro Juez Federal ERNESTO KREPLAK. Este togado carente de “imparcialidad, honestidad y transparencia”, siempre consideró que las razones humanitarias a nosotros los adultos mayores no nos corresponden, ilegalidad jamás detectada por otras autoridades gubernamentales.
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Juez Federal Ernesto Kreplak, militante de la Cámpora, ultra kirchnerista, envuelto en diferentes escándalos y denuncias judiciales. “No evidencia las características básicas que debe tener un juez: imparcialidad, honestidad y transparencia”, dijo de él Margarita Stolbizer, Diputada de la Nación.
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En este video recogido con una cámara espía, tenemos un dialogo a poco de recibir esa novedad tan adversa, mientras volvía a acomodar sus pertenencias en la celda. En él se documenta la ilegal negativa judicial, la falta de medicación, el descreimiento al nuevo gobierno, la merecida calificación de KREPLAK como persona, el esfuerzo y sacrificio que deben realizar nuestras esposas a raíz de nuestro cautiverio, la pérdida de derechos en las visitas familiares y por sobre todo la decepción de un hombre-soldado que sabe que su muerte ha sido firmada y sellada. Un mes más tarde, días antes de ser finalmente enviado a su domicilio, VON KYAW nos entregó un escrito que publicamos en este sitio, titulado: “Comiéndose al Caníbal”. Siendo un educado y serio hombre de pocas palabras, ese fue su grito de impotencia ante la iniquidad imperante en este territorio llamado Argentina.
Comiéndose al Canibal
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Por Ricardo L. von Kyaw
Febrero 12. 2016
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Él, es un buen policía que lucha eficazmente contra el crimen. Por eso, matan a su familia delante de él. Decide tomar venganza. Emprende la cacería, día tras día, obsesivamente hasta dar con el sicario. La pelea es salvaje. Finalmente, preso de una crisis que lo pone fuera de sí, tiene reducido, cara a cara y pistola en mano al objeto de su justificada furia de venganza personal. Todo su cuerpo tiembla descontrolado y su mente estalla en contradicción.
¿Hago Justicia? ¿Lo entrego a la Justicia?
La “platea” clama que el noble justiciero apriete el gatillo.
Luego de tensos momentos, se escucha:
– Tiene Ud. derecho a permanecer callado…
Hemos asistido en el cine a esta escena, en cien historias.
Nada puede estar por encima de la Ley. Si nuestro “héroe” hubiera apretado el gatillo, entonces, “se hubiera comido al caníbal”.
Sin embargo actuó y venció su convicción de hombre formado en la Ley.
Guerra antisubversiva de los 70. Si la ley “beneficia” al acusado, no puede mediar manipulación política alguna, para lograr una condena.
La militancia o la simpatía por la “La Resistencia” no da derecho a actuar por sobre la Ley. No se puede adecuar la Ley para lograr un objetivo político de venganza (como deseaba la “platea” de nuestra historia). La Ley es una y debe cumplirse, tal como era al momento de los hechos.
Quienes se asocian, promueven o justifican la modificación de la ley en este sentido, se “están comiendo al caníbal”, o sea, son caníbales, que degradan, denostan y destruyen los valores que dicen defender.
RICARDO von KYAW
Capitán PP
PrisioneroEnArgentina.com
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ADVERTENCIA: El material exhibido en esta nota está almacenado fuera del territorio argentino.
Claudio Kussman
Interno L.P.U. 345.349
Servicio Penitenciario Federal
Febrero 25, 2019
“Los argentinos, nos dividimos en: aterrados, encerrados, enterrados y desterrados”
Por CLAUDIO KUSSMAN
EL SINIESTRO JUEZ ERNESTO KREPLAK
El 15 de noviembre de 2017 murió RICARDO LUIS VON KYAW, Capitán del Ejército Argentino, a la edad de 69 años de edad. Fue el prisionero número 425 que fallecía y el número 85 desde el 10 de diciembre de 2015, cuando gracias a nuestro voto, se hiciera cargo del gobierno nacional, MAURICIO MACRI. En el año 2015, compartimos durante varios meses espacio en el pabellón 19 de la unidad penitenciaria 31 de Ezeiza.
[ezcol_1half]Luego él fue trasladado al pabellón 8 donde ocupaba una celda individual, que hizo mejorar (goteras, y pintura) a sus costas. A mediados de enero de 2016 el Juez Federal LAUREANO DURÁN, sin oposición de los fiscales, le concedió el arresto domiciliario por razones humanitarias.
VON KYAW padecía cáncer cerebral y en la prisión no recibía el tratamiento apropiado, al punto que transcurrían los meses y no se le administraba la medicación recomendada.
Ya desalojada su celda y preparado para partir fue notificado de la negativa del traslado a su hogar, por resolución del militante y siniestro Juez Federal ERNESTO KREPLAK. Este togado carente de “imparcialidad, honestidad y transparencia”, siempre consideró que las razones humanitarias a nosotros los adultos mayores no nos corresponden, ilegalidad jamás detectada por otras autoridades gubernamentales.
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]Juez Federal Ernesto Kreplak, militante de la Cámpora, ultra kirchnerista, envuelto en diferentes escándalos y denuncias judiciales. “No evidencia las características básicas que debe tener un juez: imparcialidad, honestidad y transparencia”, dijo de él Margarita Stolbizer, Diputada de la Nación.
[/ezcol_1half_end]En este video recogido con una cámara espía, tenemos un dialogo a poco de recibir esa novedad tan adversa, mientras volvía a acomodar sus pertenencias en la celda. En él se documenta la ilegal negativa judicial, la falta de medicación, el descreimiento al nuevo gobierno, la merecida calificación de KREPLAK como persona, el esfuerzo y sacrificio que deben realizar nuestras esposas a raíz de nuestro cautiverio, la pérdida de derechos en las visitas familiares y por sobre todo la decepción de un hombre-soldado que sabe que su muerte ha sido firmada y sellada. Un mes más tarde, días antes de ser finalmente enviado a su domicilio, VON KYAW nos entregó un escrito que publicamos en este sitio, titulado: “Comiéndose al Caníbal”. Siendo un educado y serio hombre de pocas palabras, ese fue su grito de impotencia ante la iniquidad imperante en este territorio llamado Argentina.
Comiéndose al Canibal
[ezcol_1half]Por Ricardo L. von Kyaw
Febrero 12. 2016
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Él, es un buen policía que lucha eficazmente contra el crimen. Por eso, matan a su familia delante de él. Decide tomar venganza. Emprende la cacería, día tras día, obsesivamente hasta dar con el sicario. La pelea es salvaje. Finalmente, preso de una crisis que lo pone fuera de sí, tiene reducido, cara a cara y pistola en mano al objeto de su justificada furia de venganza personal. Todo su cuerpo tiembla descontrolado y su mente estalla en contradicción.
¿Hago Justicia? ¿Lo entrego a la Justicia?
La “platea” clama que el noble justiciero apriete el gatillo.
Luego de tensos momentos, se escucha:
– Tiene Ud. derecho a permanecer callado…
Hemos asistido en el cine a esta escena, en cien historias.
Nada puede estar por encima de la Ley. Si nuestro “héroe” hubiera apretado el gatillo, entonces, “se hubiera comido al caníbal”.
Sin embargo actuó y venció su convicción de hombre formado en la Ley.
Guerra antisubversiva de los 70. Si la ley “beneficia” al acusado, no puede mediar manipulación política alguna, para lograr una condena.
La militancia o la simpatía por la “La Resistencia” no da derecho a actuar por sobre la Ley. No se puede adecuar la Ley para lograr un objetivo político de venganza (como deseaba la “platea” de nuestra historia). La Ley es una y debe cumplirse, tal como era al momento de los hechos.
Quienes se asocian, promueven o justifican la modificación de la ley en este sentido, se “están comiendo al caníbal”, o sea, son caníbales, que degradan, denostan y destruyen los valores que dicen defender.
RICARDO von KYAW
Capitán PP
PrisioneroEnArgentina.com
[/ezcol_1half_end]ADVERTENCIA: El material exhibido en esta nota está almacenado fuera del territorio argentino.
Claudio Kussman
Interno L.P.U. 345.349
Servicio Penitenciario Federal
Febrero 25, 2019
“Los argentinos, nos dividimos en: aterrados, encerrados, enterrados y desterrados”
Eduardo Galeano (1940-2015)
PrisioneroEnArgentina.com
Febrero 25, 2019