Mientras en todos los medios de difusión del país se debate a toda hora el novelón entre ALBERTO “PITO DURO” y la INGENUA FABIOLA, apenas si se le prestó atención a “UN CRIMEN DE ODIO POLÍTICO”, cometido el uno de agosto pasado por “PATOTAS FASCISTAS/NEGACIONISTAS”. Esto al decir en coro por los organismos de derechos humanos, para unos sí y para otros no, y cuanta organización izquierdosa existe en este territorio llamado Argentina. En él fue víctima SUSANA MONTOYA (74 años) viuda de RICARDO ALBAREDA, subcomisario de la policía de Córdoba y miembro de la organización terrorista ERP, quien fuera secuestrado y muerto el 26 de septiembre de 1979, en un operativo antiterrorista. SUSANA, apareció sin vida en su casa del barrio Ampliación Poeta Lugones, de la provincia de Córdoba. Presentaba traumatismo de cráneo, asfixia mecánica por estrangulamiento y apuñalamiento en el cuello (3 mecanismos causales de muerte violenta). En el lugar se encontraron inscripciones con lápiz labial en las paredes que rezaban: “LOS VAMOS A MATAR A TODOS. AHORA VAMOS POR TUS HIJOS”. Realizadas las averiguaciones del caso, resultó que nada tenía que ver el “odio político” ni “las patotas fascistas/negacionistas”. El autor de este horrible asesinato fue su propio hijo FERNANDO ALBAREDA (53 años) MILITANTE DE LA AGRUPACIÓN H.I.J.O.S, y como no podía ser de otra manera, EMPLEADO DE LA SECRETARÍA DE DERECHOS HUMANOS DE LA NACIÓN, cuyo sueldo pagamos durante añares, entre todos. El homicida en diciembre de 2023 había denunciado amenazas mediante letreros pegados en la puerta de entrada a su vivienda que decían: “SOS HIJO DE TERRORISTA. SE TERMINARON LOS AMIGOS DE LA POLICÍA”; “NO VAYAS MÁS A LA ESCUELA NI A JEFATURA”, “VA A MORIR”; “TE VAMOS A JUNTAR CON TU PAPITO”. Por el contrario, resultó que el móvil del matricidio fue una disputa por el resarcimiento de 76 millones de pesos (aproximadamente 76.000 dólares) que recibiría la familia en los próximos días por la desaparición y muerte de su padre RICARDO. Establecida su autoría todos los vociferantes organismos radicalizados se llamaron a silencio omitiendo cualquier tipo de condena al autor de tan cruel crimen. Por supuesto falacias de este tipo, de las que los medios, ni el gobierno se ocupan, no son excepcionales y a modo de ejemplo traigo a colación un doble homicidio en el que las organizaciones radicalizadas mintieron descaradamente.
ENTRE EL 24 Y EL 26 DE ABRIL DE 1976
En Bahía Blanca, entre el 24 y 26 de Abril de 1976 aparecieron 2 mujeres veterinarias (madre e hija) SILA EMER PERALTA BERGNA DE SOLANA y ALICIA LÍA SOLANA asesinadas mediante disparos de arma de fuego, puñaladas y golpes de martillo, (también 3 mecanismos para la muerte violenta). en su domicilio de la calle Irigoyen 314. Eran esposa (separada) e hija de un ex gobernador de una provincia del sur argentino, de apellido Solana. En una pared de la sala de la casa habían pintado con aerosol un “grafiti” haciendo referencia a una venganza política, rubricado por un grupo extremista de derecha, cuyas siglas no recuerdo. Como tantas veces me constituí en el lugar y al retirarme observé que, sobre un escritorio, las víctimas habían depositado alguna pulsera, cadenitas y anillos de oro. En esa época casi no existiendo los arrebatos se usaban joyas hasta para ir a hacer las compras, las que se quitaban y dejaban sobre algún mueble al regreso. Era un detalle realmente discordante, los grupos que participaban en esa guerra fratricida, asesinaban y robaban.
Eran verdaderos carroñeros. Formamos un pequeño equipo de trabajo y luego de varios días investigando en Bahía Blanca, Capital Federal y en la ciudad de La Plata, establecimos que resultaba autor del hecho el abogado GUSTAVO KRAISELBURD, residente en EE. UU. y familiar de los dueños del Diario El Día de la capital provincial. Ellos a su vez habían sido víctimas del terrorismo que asolaba el país, y 2 de sus miembros asesinados. El más cruento fue el secuestro y muerte de David, un bebé de 2 meses de edad, ocurrido en julio de 1974 a manos de quienes hoy dicen haber sido “una juventud maravillosa”. Kraiselburd hábilmente eludió la justicia durante 10 años hasta que finalmente en 1986, fue detenido, extraditado desde EE. UU, juzgado y condenado. Yo no lo conocí personalmente, ya que en 1979 continué prestando servicio en el Gran Buenos Aires. Sé que luego de cumplir varios años de prisión, en la cárcel de Marcos Paz, ejerció su profesión de abogado en la ciudad de La Plata. Esta historia tendría que terminar en este punto, pero habiendo sido un hecho con características fuera de lo común y ocurrido en fecha próxima a la de alguna imputación que se me hizo por “lesa”, mi hijo rastreó antecedentes en EE. UU. Así en febrero de 2015, nos encontramos a 39 años de ocurrido el doble homicidio que las mentiras continuaban. En la página http://www.desaparecidos.org/arg/victimas/, (Izquierda en BAHIA BLANCA) organismo de apoyo entre otros del Centro de Estudios Legales (CELS) en el cual el asesino terrorista HORACIO VERBITSKY es dueño de la “memoria, verdad y justicia”, el hecho era atribuido a la represión de estado y no a una locura pasional. Publicada la falacia en este portal el 28 de febrero de 2015 con el título: “LA METODOLOGIA DEL RELATO. DESCUBRIENDO MENTIRAS DE LA MENTIRA”
todo fue borrado de Internet, quedando solo las tomas de pantalla que se hicieran en la oportunidad. Hoy, ya adulto mayor al ver nuestro presente de muertes en prisión, como así los agravios de los que somos objeto en los medios y compararlos con el de los terroristas asesinos de hombres mujeres y niños, siendo indemnizados, y encumbrados ex miembros, o miembros del poder gubernamental hace que me pregunte: ¿LA DOLOROSA LUCHA CONTRA EL TERRORISMO OCURRIDA EN LOS 70, QUE CARAJO SALVÓ EN LA ARGENTINA?
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Mientras en todos los medios de difusión del país se debate a toda hora el novelón entre ALBERTO “PITO DURO” y la INGENUA FABIOLA, apenas si se le prestó atención a “UN CRIMEN DE ODIO POLÍTICO”, cometido el uno de agosto pasado por “PATOTAS FASCISTAS/NEGACIONISTAS”. Esto al decir en coro por los organismos de derechos humanos, para unos sí y
para otros no, y cuanta organización izquierdosa existe en este territorio llamado Argentina. En él fue víctima SUSANA MONTOYA (74 años) viuda de RICARDO ALBAREDA, subcomisario de la policía de Córdoba y miembro de la organización terrorista ERP, quien fuera secuestrado y muerto el 26 de septiembre de 1979, en un operativo antiterrorista. SUSANA, apareció sin vida en su casa del barrio Ampliación Poeta Lugones, de la provincia de Córdoba. Presentaba traumatismo de cráneo, asfixia mecánica por estrangulamiento y apuñalamiento en el cuello (3 mecanismos causales de muerte violenta). En el lugar se encontraron inscripciones con lápiz labial en las paredes que rezaban: “LOS VAMOS A MATAR A TODOS. AHORA VAMOS POR TUS HIJOS”. Realizadas las averiguaciones del caso, resultó que nada tenía que ver el “odio político” ni “las patotas fascistas/negacionistas”. El autor de este horrible asesinato fue su propio hijo FERNANDO ALBAREDA (53 años) MILITANTE DE LA AGRUPACIÓN H.I.J.O.S, y como no podía ser de otra manera, EMPLEADO DE LA SECRETARÍA DE DERECHOS HUMANOS DE LA NACIÓN, cuyo sueldo pagamos durante añares, entre todos. El homicida en diciembre de 2023 había denunciado amenazas mediante letreros pegados en la puerta de entrada a su vivienda que decían: “SOS HIJO DE TERRORISTA. SE TERMINARON LOS AMIGOS DE LA POLICÍA”; “NO VAYAS MÁS A LA ESCUELA NI A JEFATURA”, “VA A MORIR”; “TE VAMOS A JUNTAR CON TU PAPITO”. Por el contrario, resultó que el móvil del matricidio fue una disputa por el resarcimiento de 76 millones de pesos (aproximadamente 76.000 dólares) que recibiría la familia en los próximos días por la desaparición y muerte de su padre RICARDO. Establecida su autoría todos los vociferantes organismos radicalizados se llamaron a silencio omitiendo cualquier tipo de condena al autor de tan cruel crimen. Por supuesto falacias de este tipo, de las 
que los medios, ni el gobierno se ocupan, no son excepcionales y a modo de ejemplo traigo a colación un doble homicidio en el que las organizaciones radicalizadas mintieron descaradamente.
ENTRE EL 24 Y EL 26 DE ABRIL DE 1976
En Bahía Blanca, entre el 24 y 26 de Abril de 1976 aparecieron 2 mujeres veterinarias (madre e hija) SILA EMER PERALTA BERGNA DE SOLANA y ALICIA LÍA SOLANA asesinadas mediante disparos de arma de fuego, puñaladas y golpes de martillo, (también 3 mecanismos para la muerte violenta). en su domicilio de la calle Irigoyen 314. Eran esposa (separada) e hija de un ex gobernador de una provincia del sur argentino, de apellido Solana. En una pared de la sala de la casa habían pintado con aerosol un “grafiti” haciendo referencia a una venganza política, rubricado por un grupo extremista de derecha, cuyas siglas no recuerdo. Como tantas veces me constituí en el lugar y al retirarme observé que, sobre un escritorio, las víctimas habían depositado alguna pulsera, cadenitas y anillos de oro. En esa época casi no existiendo los arrebatos se usaban joyas hasta para ir a hacer las compras, las que se quitaban y dejaban sobre algún mueble al regreso. Era un detalle realmente discordante, los grupos que participaban en esa guerra fratricida, asesinaban y robaban.
Eran verdaderos carroñeros. Formamos un pequeño equipo de trabajo y luego de varios días investigando en Bahía Blanca, Capital Federal y en la ciudad de La Plata, establecimos que resultaba autor del hecho el abogado GUSTAVO KRAISELBURD, residente en EE. UU. y familiar de los dueños del Diario El Día de la capital provincial. Ellos a su vez habían sido víctimas del terrorismo que asolaba el país, y 2 de sus miembros asesinados. El más cruento fue el secuestro y muerte de David, un bebé de 2 meses de edad, ocurrido en julio de 1974 a manos de quienes hoy dicen haber sido “una juventud maravillosa”. Kraiselburd hábilmente eludió la justicia durante 10 años hasta que finalmente en 1986, fue detenido, extraditado desde EE. UU, juzgado y condenado. Yo no lo conocí personalmente, ya que en 1979 continué prestando servicio en el Gran Buenos Aires. Sé que luego de cumplir varios años de prisión, en la cárcel de Marcos Paz, ejerció su profesión de abogado en la ciudad de La Plata. Esta historia tendría que terminar en este punto, pero habiendo sido un hecho con características fuera de lo común y ocurrido en fecha próxima a la de alguna imputación que se me hizo por “lesa”, mi hijo rastreó antecedentes en EE. UU. Así en febrero de 2015, nos encontramos a 39 años de ocurrido el doble homicidio que las mentiras continuaban. En la página http://www.desaparecidos.org/arg/victimas/, (Izquierda en BAHIA BLANCA) organismo de apoyo entre otros del Centro de Estudios Legales (CELS) en el cual el asesino terrorista HORACIO VERBITSKY es dueño de la “memoria, verdad y justicia”, el hecho era atribuido a la represión de estado y no a una locura pasional. Publicada la falacia en este portal el 28 de febrero de 2015 con el título: “LA METODOLOGIA DEL RELATO. DESCUBRIENDO MENTIRAS DE LA MENTIRA”
https://www.ar.prisioneroenargentina.com/la-metodologa-del-relato
CLAUDIO KUSSMAN
Comisario Mayor (R)
Policía Prov. Buenos Aires
claudio@PrisioneroEnArgentina.com
www.PrisioneroEnArgentina.com
“Manchada deja su vida el que procura muerte”
Séneca (4 a.C.- 65 d.C.)
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 19, 2024
Tags: FERNANDO ALBAREDA, GUSTAVO KRAISELBURD, SUSANA MONTOYA