Alcanzar la paz interior es el objetivo, es el camino a seguir; y si ese el camino, es seguro que llegará el momento, la hora, en que determinemos que lo que importa es alimentar nuestra alma todos los días.
El pan, además de ser un alimento que, desde tiempos antiguos, es parte de la dieta humana. Todos sabemos lo que significa y su larga trayectoria. El pan, entre otras facetas, implica bienestar y nos trae placer. El sabor a pan nos recuerda y marca el esfuerzo, el trabajo y, con ello, nos procura lo que cada día más necesitamos para avanzar y seguir adelante: “el pan de cada día”… Podemos vivir gozando de las delicias de una vida abundante, llena de paz y alegría, con una consciencia limpia y en paz, con nuestro ser perfumado con la presencia de fe y esperanza.
Según la RAE, la esperanza es el “estado del ánimo en el cual se nos presenta como posible lo que deseamos”; la esperanza nos convoca a que accionemos para la búsqueda de llegar a realizar un sueño; es la proyección humana de la acción.
Evocando a la esperanza se escriben poesías, y muchos son los poemas que pudo haber servido como inspiración; invocando a la esperanza se canta como una forma de manifestarse y se la utiliza para expresar emociones; porque la música tiene el poder transmitir sentimientos de optimismo, confianza, alegría; inherentes todos estos a la esperanza.
En tal sentido, y siendo una de las canciones más importantes del cancionero argentino, esta la “Zamba de mi esperanza“, escrita por Luis Profili que utilizara el seudónimo de Luis H. Morales. Esta emblemática Zamba del folclore argentino, es un emotivo canto a la esperanza nos alienta a que, a pesar de las dificultades, se debe seguir adelante y, con resiliencia, trabajar en la construcción de un mundo mejor en el que estar… Compartir la esperanza que sea lo que nos motiva.
Básicamente la canción trata, quizás, sobre un deseo que no se concreta, sobre amor que no es correspondido; y es aquí donde la zamba se utiliza como un refugio emocional, o una metáfora y una forma de expresar sentimientos; expresión esta que, en el período que va desde 1976 a 1983, se prohibió; pareciera que la palabra “esperanza” era considerada subversiva por la dictadura militar argentina de ese entonces; a la canción se la prohibió por ser y contraria a la ideología del régimen. A esta canción se la incluyó en la lista temas interpretados por Los Chalchaleros; pero con quien ganó mucha popularidad fue con Jorge Cafrune quien la presentó y cantó en pleno “proceso” y por ésa interpretación aún hoy se la considera como un himno de esperanza para esos momentos especialmente difíciles.
Si bien esta es una frase muy usada, podría serlo también en este momento: “He aquí mi tributo a la Zamba de mi esperanza” cantada por un grande entre los grandes; Jorge Cafrune. Sirva esto de reconocimiento al intérprete y al autor de esta canción.
La esperanza se multiplica si es compartida. Por esto el canto puede ser un acto de solidaridad, de unión, y puede llegar a tener un efecto revitalizador ya sea para el que la expresa como para quien la escucha… “Celebremos la esperanza a través de la música”
Desde la ciudad de Campana (Buenos Aires, Argentina), recibe un cálido abrazo, junto a mi deseo de que dios te Bendiga y prospere en todo lo que emprendas, y derrame sobre ti Salud, Paz, Amor, y mucha prosperidad.
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Alcanzar la paz interior es el objetivo, es el camino a seguir; y si ese el camino, es seguro que llegará el momento, la hora, en que determinemos que lo que importa es alimentar nuestra alma todos los días.
El pan, además de ser un alimento que, desde tiempos antiguos, es parte de la dieta humana. Todos sabemos lo que significa y su larga trayectoria. El pan, entre otras facetas, implica bienestar y nos trae placer. El sabor a pan nos recuerda y marca el esfuerzo, el trabajo y, con ello, nos procura lo que cada día más necesitamos para avanzar y seguir adelante: “el pan de cada día”… Podemos vivir gozando de las delicias de una vida abundante, llena de paz y alegría, con una consciencia limpia y en paz, con nuestro ser perfumado con la presencia de fe y esperanza.
Según la RAE, la esperanza es el “estado del ánimo en el cual se nos presenta como posible lo que deseamos”; la esperanza nos convoca a que accionemos para la búsqueda de llegar a realizar un sueño; es la proyección humana de la acción.
Evocando a la esperanza se escriben poesías, y muchos son los poemas que pudo haber servido como inspiración; invocando a la esperanza se canta como una forma de manifestarse y se la utiliza para expresar emociones; porque la música tiene el poder transmitir sentimientos de optimismo, confianza, alegría; inherentes todos estos a la esperanza.
En tal sentido, y siendo una de las canciones más importantes del cancionero argentino, esta la “Zamba de mi esperanza“, escrita por Luis Profili que utilizara el seudónimo de Luis H. Morales. Esta emblemática Zamba del folclore argentino, es un emotivo canto a la esperanza nos alienta a que, a pesar de las dificultades, se debe seguir adelante y, con resiliencia, trabajar en la construcción de un mundo mejor en el que estar… Compartir la esperanza que sea lo que nos motiva.
Básicamente la canción trata, quizás, sobre un deseo que no se concreta, sobre amor que no es correspondido; y es aquí donde la zamba se utiliza como un refugio emocional, o una metáfora y una forma de expresar sentimientos; expresión esta que, en el período que va desde 1976 a 1983, se prohibió; pareciera que la palabra “esperanza” era considerada subversiva por la dictadura militar argentina de ese entonces; a la canción se la prohibió por ser y contraria a la ideología del régimen. A esta canción se la incluyó en la lista temas interpretados por Los Chalchaleros; pero con quien ganó mucha popularidad fue con Jorge Cafrune quien la presentó y cantó en pleno “proceso” y por ésa interpretación aún hoy se la considera como un himno de esperanza para esos momentos especialmente difíciles.
Si bien esta es una frase muy usada, podría serlo también en este momento: “He aquí mi tributo a la Zamba de mi esperanza” cantada por un grande entre los grandes; Jorge Cafrune. Sirva esto de reconocimiento al intérprete y al autor de esta canción.
La esperanza se multiplica si es compartida. Por esto el canto puede ser un acto de solidaridad, de unión, y puede llegar a tener un efecto revitalizador ya sea para el que la expresa como para quien la escucha… “Celebremos la esperanza a través de la música”
Desde la ciudad de Campana (Buenos Aires, Argentina), recibe un cálido abrazo, junto a mi deseo de que dios te Bendiga y prospere en todo lo que emprendas, y derrame sobre ti Salud, Paz, Amor, y mucha prosperidad.
Claudio Valerio (©Valerius)
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 29, 2025