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Funcionarios policiales informaron que el tirador que abrió fuego el miércoles en el campus de la Universidad de Nevada, Las Vegas, matando a tres personas e hiriendo a una cuarta, había solicitado un trabajo en la escuela pero no fue contratado. El pistolero en el tiroteo del miércoles era un profesor que había buscado sin éxito un trabajo en la escuela, dijo un funcionario encargado de hacer cumplir la ley con conocimiento directo de la investigación.

El hombre, que fue identificado por otro oficial como Anthony Polito, de 67 años, anteriormente trabajó en la Universidad de Carolina del Este en Carolina del Norte. Ambos agentes hablaron con AP bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados para discutir detalles de la investigación. Los investigadores registraron un apartamento en Henderson, Nevada, el miércoles por la noche como parte de la investigación y recuperaron varios dispositivos electrónicos, incluido el teléfono celular de Polito, dijo uno de los funcionarios, que aclaró que hasta los momentos no está claro el motivo específico del tiroteo.

El tiroteo comenzó en el cuarto piso de Beam Hall y luego continuó hacía otros pisos antes de que el sospechoso fuera “neutralizado”, dijo el sheriff de la policía de Las Vegas, Kevin McMahill, en una rueda de prensa el miércoles. Las víctimas no han sido identificadas. Tampoco se ha informado qué tipo de arma se utilizó el atacante, aunque algunos testigos informaron haber escuchado hasta 20 disparos.

“Lo que ocurrió hoy es un crimen atroz e imperdonable… Si no hubiera sido por las acciones heroicas de uno de los agentes de policía que respondieron, se podrían haber perdido innumerables vidas más”, dijo McMahill.

La policía universitaria fue llamada alrededor de las 11:45 am hora local por informes de un tirador activo. Dos detectives de la policía universitaria “inmediatamente se enfrentaron al sospechoso en un tiroteo” que resultó en la muerte del pistolero, según el jefe de la policía universitaria, Adam García. Además de las cuatro víctimas que recibieron disparos, otras cuatro personas fueron trasladadas a hospitales debido a síntomas de ataques de pánico, dijo el sheriff. Dos agentes del orden fueron atendidos por heridas leves sufridas durante la búsqueda de las víctimas. No quedó claro de inmediato cuántos de los 30.000 estudiantes de la escuela estaban en el campus en ese momento, pero McMahill dijo que los estudiantes se habían reunido afuera del edificio para comer y jugar. Este último tiroteo masivo se produce cuando los estudiantes se encuentran en medio de una semana de estudio antes de tomar los exámenes finales y tomar las vacaciones de invierno.

El presidente de la universidad, Keith. E. Whitfield, dijo que la comunidad universitaria está en shock.

“Miembros de nuestra comunidad perdieron la vida y otros resultaron heridos. Me duele el corazón por nuestra familia de la UNLV. Sé que todos estamos enviando nuestro amor y apoyo a las víctimas, sus familias y amigos durante este momento difícil”, dijo Whitfield en una declaración.

La Universidad de Nevada, abreviada como UNLV, es una institución pública fundada en 1957 que cuenta con alrededor de 31.000 estudiantes. El tiroteo se produce seis años después de que el tiroteo masivo más mortífero en la historia moderna de Estados Unidos tuviera lugar en Las Vegas, en un festival de música country en octubre de 2017. Cincuenta y ocho personas murieron y cientos más resultaron heridas.