Apenas dos semanas después de que un exalumno de una escuela presbiteriana en Nashville matara a tres niños y tres adultos, este lunes se produjo un tiroteo en un banco de Louisville, Kentucky, siendo la 15.ª matanza masiva en Estados Unidos en lo que va del año.
La Policía informó en rueda de prensa que el atacante, un exempleado del Old National Bank, actuó solo y utilizó un fusil. Los disparos en esa institución financiera dejaron nueve heridos y acabaron con la vida de cuatro empleados de entre 40 y 64 años.
Sturgeon
El agresor, identificado como Connor Sturgeon, de 23 años, también murió y transmitió el tiroteo en vivo. De acuerdo con su perfil en LinkedIn, Sturgeon trabajó aproximadamente por dos años en el banco e hizo tres pasantías de verano en la entidad entre 2018 y 2020.
Según una fuente policial el joven había recibido una notificación del Old National Bank de que lo iban a despedir y escribió un mensaje para sus padres y un amigo indicando que planeaba disparar en el banco.
Sturgeon estudió finanzas en la Universidad de Alabama y durante sus años escolares se destacó por su empeño en los deportes. Un examigo suyo lo describió como un atleta estrella que jugaba al fútbol americano y baloncesto y gozaba de popularidad en el colegio.
“Sé que todos siempre lo dicen sobre los tiradores, pero de verdad nunca habría sospechado que fuera él”, confesó. También añadió que Sturgeon solía llevar un casco durante los partidos de baloncesto por haber sufrido muchas conmociones cerebrales.
Uno de los fallecidos en el tiroteo, Tommy Elliott, de 63 años, se desempeñaba como vicepresidente senior del banco y era uno de los amigos cercanos del gobernador de Kentucky, Andrew Beshear. “Tommy Elliott me ayudó a construir mi carrera en derecho, me ayudó a llegar a ser gobernador, me dio consejos sobre cómo ser un buen padre”, señaló Beshear.
Entre los heridos se encuentran tres policías, uno de los cuales, Nicholas Wilt, permanece en estado crítico tras recibir un impacto de bala en la cabeza. Wilt, de 26 años, recién se graduó de la academia y era un agente nuevo en el Departamento de Policía de Louisville. “Corrió hacia los disparos para salvar vidas”, declararon sus colegas.
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Apenas dos semanas después de que un exalumno de una escuela presbiteriana en Nashville matara a tres niños y tres adultos, este lunes se produjo un tiroteo en un banco de Louisville, Kentucky, siendo la 15.ª matanza masiva en Estados Unidos en lo que va del año.
La Policía informó en rueda de prensa que el atacante, un exempleado del Old National Bank, actuó solo y utilizó un fusil. Los disparos en esa institución financiera dejaron nueve heridos y acabaron con la vida de cuatro empleados de entre 40 y 64 años.
El agresor, identificado como Connor Sturgeon, de 23 años, también murió y transmitió el tiroteo en vivo. De acuerdo con su perfil en LinkedIn, Sturgeon trabajó aproximadamente por dos años en el banco e hizo tres pasantías de verano en la entidad entre 2018 y 2020.
Según una fuente policial el joven había recibido una notificación del Old National Bank de que lo iban a despedir y escribió un mensaje para sus padres y un amigo indicando que planeaba disparar en el banco.
Sturgeon estudió finanzas en la Universidad de Alabama y durante sus años escolares se destacó por su empeño en los deportes. Un examigo suyo lo describió como un atleta estrella que jugaba al fútbol americano y baloncesto y gozaba de popularidad en el colegio.
“Sé que todos siempre lo dicen sobre los tiradores, pero de verdad nunca habría sospechado que fuera él”, confesó. También añadió que Sturgeon solía llevar un casco durante los partidos de baloncesto por haber sufrido muchas conmociones cerebrales.
Uno de los fallecidos en el tiroteo, Tommy Elliott, de 63 años, se desempeñaba como vicepresidente senior del banco y era uno de los amigos cercanos del gobernador de Kentucky, Andrew Beshear. “Tommy Elliott me ayudó a construir mi carrera en derecho, me ayudó a llegar a ser gobernador, me dio consejos sobre cómo ser un buen padre”, señaló Beshear.
Entre los heridos se encuentran tres policías, uno de los cuales, Nicholas Wilt, permanece en estado crítico tras recibir un impacto de bala en la cabeza. Wilt, de 26 años, recién se graduó de la academia y era un agente nuevo en el Departamento de Policía de Louisville. “Corrió hacia los disparos para salvar vidas”, declararon sus colegas.
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 11, 2023