Un defensor de las mariposas monarcas fue encontrado muerto dos semanas después de su desaparición.
Homero Gómez González, de 55 años, había estado desaparecido desde el 13 de enero, dijo la policía. Fue encontrado en Ocampo, estado de Michoacán, dijo el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante una conferencia de prensa el jueves. López Obrador calificó la muerte de Gómez de “lamentable y dolorosa” y prometió continuar luchando contra los grupos criminales que se cree están detrás de su desaparición y muerte. Se propiciará una autopsia oficial en una fecha posterior, pero un funcionario estatal dijo que el cuerpo de Gómez mostró signos de asfixia.
Se desconoce el motivo de su asesinato, pero algunos activistas especularon que podría haber estado relacionado con disputas sobre la tala ilegal. La semana pasada, las autoridades llamaron a 53 oficiales de policía de los municipios aledaños para interrogarlos. Más de 300 activistas de derechos humanos fueron asesinados en 2019, revela un informe. La muerte de Gómez González se produce cuando la tasa de homicidios continúa aumentando en un país donde los defensores del medio ambiente, los trabajadores de derechos humanos y los activistas de la comunidad son objeto de ataques rutinarios.
Gómez González creció en El Rosario, una aldea en las colinas del oeste de Michoacán, donde las mariposas monarca pasan el invierno en medio de densos bosques de abetos y pinos.
Millones de mariposas hacen un viaje de 3.000 millas (3.220 km) cada año desde Canadá para pasar el invierno en el clima más cálido del centro de México. Pero los bosques y las monarcas están amenazados por el cambio climático y la incursión de madereros ilegales y productores de aguacate.
Gómez González, un hombre gentil con el pelo de color sal y pimienta y bigote grueso, nació en una familia maderera.
“Teníamos miedo de que si tuviéramos que detener la tala, nos enviaría a todos a la pobreza”
Homero Gómez González
Pero finalmente convenció a otros para que abandonaran la tala y protegieran los hábitats de mariposas, pensando que el turismo reemplazaría la pérdida de ingresos. El santuario ahora es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
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Un defensor de las mariposas monarcas fue encontrado muerto dos semanas después de su desaparición.
Homero Gómez González, de 55 años, había estado desaparecido desde el 13 de enero, dijo la policía. Fue encontrado en Ocampo, estado de Michoacán, dijo el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante una conferencia de prensa el jueves.
Se propiciará una autopsia oficial en una fecha posterior, pero un funcionario estatal dijo que el cuerpo de Gómez mostró signos de asfixia.
López Obrador calificó la muerte de Gómez de “lamentable y dolorosa” y prometió continuar luchando contra los grupos criminales que se cree están detrás de su desaparición y muerte.
Se desconoce el motivo de su asesinato, pero algunos activistas especularon que podría haber estado relacionado con disputas sobre la tala ilegal. La semana pasada, las autoridades llamaron a 53 oficiales de policía de los municipios aledaños para interrogarlos. Más de 300 activistas de derechos humanos fueron asesinados en 2019, revela un informe. La muerte de Gómez González se produce cuando la tasa de homicidios continúa aumentando en un país donde los defensores del medio ambiente, los trabajadores de derechos humanos y los activistas de la comunidad son objeto de ataques rutinarios.
Gómez González creció en El Rosario, una aldea en las colinas del oeste de Michoacán, donde las mariposas monarca pasan el invierno en medio de densos bosques de abetos y pinos.
Millones de mariposas hacen un viaje de 3.000 millas (3.220 km) cada año desde Canadá para pasar el invierno en el clima más cálido del centro de México. Pero los bosques y las monarcas están amenazados por el cambio climático y la incursión de madereros ilegales y productores de aguacate.
Gómez González, un hombre gentil con el pelo de color sal y pimienta y bigote grueso, nació en una familia maderera.
Pero finalmente convenció a otros para que abandonaran la tala y protegieran los hábitats de mariposas, pensando que el turismo reemplazaría la pérdida de ingresos. El santuario ahora es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
PrisioneroEnArgentina.com
Enero 31, 2020