Terminaron los festejos, los fuegos artificiales dejaron de iluminar la noche y ya tenemos el “nuevo” gobierno de los que regresaron, no por todo, sino “para ser mejores”. Recientemente, CATALINA NORTON, quien se domicilia en Hallandale FL. Estados Unidos, de quien nosotros no tenemos más referencias, había iniciado a través de la organización CHANGE.ORG una petición que estaba dirigida a MAURICIO MACRI, mientras era Presidente de la Nación y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. En la misma, a través de las redes, reunía firmas solicitando la puesta en libertad mediante un indulto, de quienes a como dé lugar estamos imputados por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad. Más allá de los encuadres legales o consideraciones de cualquier tipo que se quiera hacer sobre esta solicitud, o de la respuesta que obtendría de quien NUNCA QUISO OIR, solo logró reunir NOVECIENTAS TREINTA Y CUATRO firmas. En el mismo sitio, LU LLENADESOLES, en una petición de justicia para RUBIO, el perrito de Mar del Tuyu, a quien un salvaje llamado ADRIAN GUILLERMO RODRIGUEZ lo atara al paragolpes de su camioneta y lo arrastrara hasta provocarle una muy cruel muerte, obtenía DOSCIENTOS CUARENTA Y TRES MIL QUINIENTAS CUARENTA Y NUEVE firmas. En este caso el éxito por la cifra alcanzada, fue aire fresco que alienta las acciones positivas de la vida frente a los crueles. Ahora bien, si los adultos mayores en prisión, o ya fallecidos, en esas condiciones somos DOS MIL QUINIENTOS O MÁS y cada uno de nosotros tenemos familiares y también amigos, ¿cómo es posible que no se reuniera ni un millar de firmas? ¿Tenemos que creer que todo lo que publicamos en este sitio, sobre los abusos judiciales, sufrimientos y muertes de prisioneros son solo ficción? ¿Acaso hay que pensar que vivir y morir en una indigna prisión es placentero para “los guerreros” allí alojados y sus familiares que deben visitarlos y asistirlos a través de años? Algo está muy mal y no concuerda lo que se dice, con lo que realmente ocurre. Quizás lo que yo creo que está sucediendo no es así y todo se trata solo un mal sueño del que pronto despertaré, o simplemente todos ya estamos muertos.
DOS MIL QUINIENTOS PRISIONEROS ADULTOS MAYORES
Terminaron los festejos, los fuegos artificiales dejaron de iluminar la noche y ya tenemos el “nuevo” gobierno de los que regresaron, no por todo, sino “para ser mejores”. Recientemente, CATALINA NORTON, quien se domicilia en Hallandale FL. Estados Unidos, de quien nosotros no tenemos más referencias, había iniciado a través de la organización CHANGE.ORG una petición que estaba dirigida a MAURICIO MACRI, mientras era Presidente de la Nación y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. En la misma, a través de las redes, reunía firmas solicitando la puesta en libertad mediante un indulto, de quienes a como dé lugar estamos imputados por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad. Más allá de los encuadres legales o consideraciones de cualquier tipo que se quiera hacer sobre esta solicitud, o de la respuesta que obtendría de quien NUNCA QUISO OIR, solo logró reunir NOVECIENTAS TREINTA Y CUATRO firmas. En el mismo sitio, LU LLENADESOLES, en una petición de justicia para RUBIO, el perrito de Mar del Tuyu, a quien un salvaje llamado ADRIAN GUILLERMO RODRIGUEZ lo atara al paragolpes de su camioneta y lo arrastrara hasta provocarle una muy cruel muerte, obtenía DOSCIENTOS CUARENTA Y TRES MIL QUINIENTAS CUARENTA Y NUEVE firmas. En este caso el éxito por la cifra alcanzada, fue aire fresco que alienta las acciones positivas de la vida frente a los crueles. Ahora bien, si los adultos mayores en prisión, o ya fallecidos, en esas condiciones somos DOS MIL QUINIENTOS O MÁS y cada uno de nosotros tenemos familiares y también amigos, ¿cómo es posible que no se reuniera ni un millar de firmas? ¿Tenemos que creer que todo lo que publicamos en este sitio, sobre los abusos judiciales, sufrimientos y muertes de prisioneros son solo ficción? ¿Acaso hay que pensar que vivir y morir en una indigna prisión es placentero para “los guerreros” allí alojados y sus familiares que deben visitarlos y asistirlos a través de años? Algo está muy mal y no concuerda lo que se dice, con lo que realmente ocurre. Quizás lo que yo creo que está sucediendo no es así y todo se trata solo un mal sueño del que pronto despertaré, o simplemente todos ya estamos muertos.
Claudio Kussman
Comisario Mayor (R)
Policía Pcia. Buenos Aires
Diciembre 12, 2019
claudio@PrisioneroEnArgentina.com
POSDATA: Mucho agradezco a Catalina Norton por su preocupación y ocupación, también a mi familia, amigos y no amigos que firmaron la petición.
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 12, 2019