Científicos militares chinos están desarrollando una nueva tecnología defensiva para sus armas, similar en su concepción a los escudos de energía invisible mostrados en filmes de ciencia ficción como ‘Star Trek’ o ‘Star Wars’,. El escudo protegería drones, misiles y otras armas con componentes electrónicos de China contra la radiación de microondas de alta potencia emitida por sistemas de guerra electrónica enemigos.
Este escudo de energía, basado en un plasma de iones eléctricamente cargados, sigue un concepto similar al de los principios del taichí, que pretende convertir la energía del atacante en una fuerza defensiva. De esta manera, la protección del plasma se activaría con la llegada de las microondas enemigas y se alimentaría de energía incidente. Su poder de protección se incrementaría en la medida en la que la energía del atacante fuera superior y el escudo funcionara como un espejo reflejando la mayor parte de la energía incidental.
Al cesar el ataque enemigo, el plasma volvería a su estado original por la ausencia de una energía externa que lo sostuviera. La viabilidad de esta novedosa tecnología se ha demostrado a nivel de laboratorio. Este nuevo concepto de protección de dispositivos electrónicos supera incluso a la protección de estado sólido de última generación, la cual tiene dificultades para manejar simultáneamente problemas de calentamiento e interferencias electrónicas.
El equipo de investigación señaló, en un artículo publicado recientemente por Journal of National University of Defense Technology, que el “escudo de plasma de baja temperatura” podría proteger circuitos sensibles de bombardeos perpetrados con armas electromagnéticas de hasta 170 kW a una distancia de solo 3 metros. “Estamos en proceso de desarrollar dispositivos miniaturizados para darle vida a esta tecnología”, escribieron.
Los científicos indicaron que su investigación había sido impulsada en respuesta a la presión por el desarrollo de nuevas armas ofensivas y defensivas por parte del Ejército de EE.UU., que ha duplicado sus inversiones en este ámbito. “EE.UU. ya ha puesto en funcionamiento equipos […] de microondas de alta potencia para el bloqueo del espacio aéreo”, señalaron en su artículo.
Los investigadores llamaron la atención sobre el hecho de que si el sistema de información electrónica del Ejército Popular de Liberación “fuera diezmado, incluso las armas y equipos más poderosos quedarían ‘ciegos’ o reducidos a nada más que un montón de chatarra, alterando potencialmente la naturaleza misma de la guerra futura”.
Según SCMP, el Ejército chino exige que estos sistemas de protección no interfieran el paso de ondas electromagnéticas de baja potencia, que son necesarias para el guiado de los drones o misiles. También solicita que la frecuencia de respuesta efectiva del escudo de energía sea lo más amplia posible para evitar que el enemigo cambie la frecuencia de las microondas de ataque y pueda penetrar el plasma. Otra exigencia tiene que ver con la necesidad de que el dispositivo generador de energía, aun cuando sea miniaturizado, resista ataques de microondas de alta potencia. El equipo ya trabaja con esas demandas.
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Este escudo de energía, basado en un plasma de iones eléctricamente cargados, sigue un concepto similar al de los principios del taichí, que pretende convertir la energía del atacante en una fuerza defensiva. De esta manera, la protección del plasma se activaría con la llegada de las microondas enemigas y se alimentaría de energía incidente. Su poder de protección se incrementaría en la medida en la que la energía del atacante fuera superior y el escudo funcionara como un espejo reflejando la mayor parte de la energía incidental.
El equipo de investigación señaló, en un artículo publicado recientemente por Journal of National University of Defense Technology, que el “escudo de plasma de baja temperatura” podría proteger circuitos sensibles de bombardeos perpetrados con armas electromagnéticas de hasta 170 kW a una distancia de solo 3 metros. “Estamos en proceso de desarrollar dispositivos miniaturizados para darle vida a esta tecnología”, escribieron.
Los científicos indicaron que su investigación había sido impulsada en respuesta a la presión por el desarrollo de nuevas armas ofensivas y defensivas por parte del Ejército de EE.UU., que ha duplicado sus inversiones en este ámbito. “EE.UU. ya ha puesto en funcionamiento equipos […] de microondas de alta potencia para el bloqueo del espacio aéreo”, señalaron en su artículo.
Los investigadores llamaron la atención sobre el hecho de que si el sistema de información electrónica del Ejército Popular de Liberación “fuera diezmado, incluso las armas y equipos más poderosos quedarían ‘ciegos’ o reducidos a nada más que un montón de chatarra, alterando potencialmente la naturaleza misma de la guerra futura”.
Según SCMP, el Ejército chino exige que estos sistemas de protección no interfieran el paso de ondas electromagnéticas de baja potencia, que son necesarias para el guiado de los drones o misiles. También solicita que la frecuencia de respuesta efectiva del escudo de energía sea lo más amplia posible para evitar que el enemigo cambie la frecuencia de las microondas de ataque y pueda penetrar el plasma. Otra exigencia tiene que ver con la necesidad de que el dispositivo generador de energía, aun cuando sea miniaturizado, resista ataques de microondas de alta potencia. El equipo ya trabaja con esas demandas.
PrisioneroEnArgentina.com
Enero 14, 2024