Aproximadamente 7,000 enfermeras en la ciudad de Nueva York se sumaron a los piquetes, exigiendo mejores condiciones de trabajo, políticas de personal y salarios más altos.
Las enfermeras quieren aumentos salariales más altos para contrarrestar la inflación del año pasado y están pidiendo a los hospitales que contraten a más enfermeras y trabajadores de la salud para reforzar las filas que se han reducido en los últimos tres años, en gran parte debido a la pandemia. “Las enfermeras no quieren hacer huelga”, dijo en un comunicado el domingo por la noche la Asociación de Enfermeras del Estado de Nueva York (NYSNA), que representa a más de 42,000 enfermeras en el estado. “Los jefes nos han empujado a la huelga al negarse a considerar seriamente nuestras propuestas para abordar la desesperada crisis de personal inseguro que perjudica a nuestros pacientes”.
El paro, que comenzó la madrugada del lunes, pone en un aprieto a los centros de salud y hospitales, que se ven obligados a combatir la falta de personal recortando servicios y enviando pacientes a otras instalaciones. Es el resultado de la imposibilidad de llegar a un acuerdo entre la NYSNA y dos hospitales de la ciudad de Nueva York: Mount Sinai en el Upper East Side de Manhattan y Montefiore Medical Center en el Bronx. Las dos partes negociaron durante el fin de semana pero no pudieron llegar a un acuerdo, incluso después de llegar a un acuerdo tentativo que finalmente fracasó. La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, en un esfuerzo por desviar la huelga, sugirió que los dos entraran en un acuerdo de arbitraje vinculante, que la NYSNA no aceptó.
El acuerdo tentativo, que no duró, incluía un aumento salarial del 19% para las enfermeras de Montefiore, que tiene 760 vacantes de enfermería. En última instancia, no fue suficiente, ya que el personal de enfermería abandonó el trabajo el lunes por la mañana. La huelga provocará interrupciones y retrasos en los dos hospitales, tal como fueron diseñados. Algunos procedimientos quirúrgicos se están reprogramando, las ambulancias se están desviando a otros hospitales y, como resultado, algunos pacientes pueden ser transferidos a otras instalaciones, informa Gothamist.
A pesar de los trastornos causados por la huelga, las enfermeras cuentan con el respaldo de otros sindicatos y funcionarios públicos.
“Estas enfermeras son profesionales dedicadas que brindan atención de calidad al paciente en condiciones inimaginables, incluida la escasez de personal, que solo se vio agravada por la pandemia. El trato del hospital a estas enfermeras es una prueba de que todas sus palabras de adulación para sus héroes de la salud durante la pandemia fueron huecas”, dijo Mario Cilento, presidente de la AFL-CIO del estado de Nueva York, en un comunicado.
Asimismo, Jamaal Bowman, un congresista estadounidense que representa partes de la ciudad de Nueva York, incluido el Bronx, dijo que “las enfermeras han pasado por un infierno y han vuelto por sus pacientes” y que “no deberían tener que seguir luchando. “Las proporciones seguras de personal y las condiciones saludables [deberían ser] comunes en todos los hospitales. Estoy con las enfermeras de NYSNA mientras luchan por condiciones justas en el lugar de trabajo”, dijo.
Aunque están en huelga, las enfermeras tienen un mensaje para los neoyorquinos que necesitan atención médica: vengan al hospital si están enfermos o lesionados. “Agradecemos la solidaridad de nuestros pacientes, pero ir al hospital para recibir la atención que necesita no es cruzar nuestra línea de huelga”, dijo NYSNA. “Por favor, no se demore en recibir atención médica, independientemente de si estamos en huelga. Los pacientes deben buscar atención hospitalaria de inmediato si la necesitan”.
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Aproximadamente 7,000 enfermeras en la ciudad de Nueva York se sumaron a los piquetes, exigiendo mejores condiciones de trabajo, políticas de personal y salarios más altos.
Las enfermeras quieren aumentos salariales más altos para contrarrestar la inflación del año pasado y están pidiendo a los hospitales que contraten a más enfermeras y trabajadores de la salud para reforzar las filas que se han reducido en los últimos tres años, en gran parte debido a la pandemia. “Las enfermeras no quieren hacer huelga”, dijo en un comunicado el domingo por la noche la Asociación de Enfermeras del Estado de Nueva York (NYSNA), que representa a más de 42,000 enfermeras en el estado. “Los jefes nos han empujado a la huelga al negarse a considerar seriamente nuestras propuestas para abordar la desesperada crisis
de personal inseguro que perjudica a nuestros pacientes”.
El paro, que comenzó la madrugada del lunes, pone en un aprieto a los centros de salud y hospitales, que se ven obligados a combatir la falta de personal recortando servicios y enviando pacientes a otras instalaciones. Es el resultado de la imposibilidad de llegar a un acuerdo entre la NYSNA y dos hospitales de la ciudad de Nueva York: Mount Sinai en el Upper East Side de Manhattan y Montefiore Medical Center en el Bronx. Las dos partes negociaron durante el fin de semana pero no pudieron llegar a un acuerdo, incluso después de llegar a un acuerdo tentativo que finalmente fracasó. La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, en un esfuerzo por desviar la huelga, sugirió que los dos entraran en un acuerdo de arbitraje vinculante, que la NYSNA no aceptó.
El acuerdo tentativo, que no duró, incluía un aumento salarial del 19% para las enfermeras de Montefiore, que tiene 760 vacantes de enfermería. En última instancia, no fue suficiente, ya que el personal de enfermería abandonó el trabajo el lunes por la mañana. La huelga provocará interrupciones y retrasos en los dos hospitales, tal como fueron diseñados. Algunos procedimientos quirúrgicos se están reprogramando, las ambulancias se están desviando a otros hospitales y, como resultado, algunos pacientes pueden ser transferidos a otras instalaciones, informa Gothamist.
A pesar de los trastornos causados por la huelga, las enfermeras cuentan con el respaldo de otros sindicatos y funcionarios públicos.
“Estas enfermeras son profesionales dedicadas que brindan atención de calidad al paciente en condiciones inimaginables, incluida la escasez de personal, que solo se vio agravada por la pandemia. El trato del hospital a estas enfermeras es una prueba de que todas sus palabras de adulación para sus héroes de la salud durante la pandemia fueron huecas”, dijo Mario Cilento, presidente de la AFL-CIO del estado de Nueva York, en un comunicado.
Asimismo, Jamaal Bowman, un congresista estadounidense que representa partes de la ciudad de Nueva York, incluido el Bronx, dijo que “las enfermeras han pasado por un infierno y han vuelto por sus pacientes” y que “no deberían tener que seguir luchando. “Las proporciones seguras de personal y las condiciones saludables [deberían ser] comunes en todos los hospitales. Estoy con las enfermeras de NYSNA mientras luchan por condiciones justas en el lugar de trabajo”, dijo.
Aunque están en huelga, las enfermeras tienen un mensaje para los neoyorquinos que necesitan atención médica: vengan al hospital si están enfermos o lesionados. “Agradecemos la solidaridad de nuestros pacientes, pero ir al hospital para recibir la atención que necesita no es cruzar nuestra línea de huelga”, dijo NYSNA. “Por favor, no se demore en recibir atención médica, independientemente de si estamos en huelga. Los pacientes deben buscar atención hospitalaria de inmediato si la necesitan”.
PrisioneroEnArgentina.com
Enero 10, 2023