El aumento del costo de vida en el Reino Unido está obligando a las mujeres a ejercer el trabajo sexual.
Según los testimonios, más mujeres están recurriendo a la prostitución por primera vez, mientras que otras que han logrado dejarlo atrás se ven obligadas a regresar para pagar sus facturas.
Con la inflación en un nivel récord, los salarios bajos y los altos costos de la energía, el número de llamadas al Colectivo Inglés de Prostitutas ha aumentado en un tercio este verano. La red asesora a las mujeres en todas las líneas de trabajo sexual sobre cómo mantenerse seguras y dentro de la ley cuando sea posible.
La portavoz del colectivo, Niki Adams, aseguró que la gente opta por esta fuente de ingresos debido a la desesperación. Como ejemplo, mencionó el caso de una de las mujeres que ha acudido a la red: una madre soltera de cuatro hijos, que perdió su trabajo y no pudo pagar sus cuentas.
“Aunque dice que el dinero ha sido un salvavidas, está aterrorizada de que su expareja violenta se entere y lo use contra ella a través de los servicios sociales”, relató.
Adams da otro ejemplo de una mujer de la ciudad de Bristol que durante mucho tiempo abandonó la prostitución y se convirtió en vendedora, pero perdió su trabajo debido a la pandemia. Por lo tanto, tuvo que volver a su forma anterior de ganar dinero.
Del mismo modo, Nikki McNeill, una empleada de la organización Beyond the Streets que ofrece servicios de apoyo a las mujeres, también confirma que ella y sus colegas han visto un aumento en las llamadas y el número de mujeres que venden “sexo para sobrevivir”.
Además, varios hombres esperan que las mujeres brinden sexo sin protección. “Los clientes saben que están en una posición en la que no pueden decir que ‘no’, por lo que algunos están empujando a las mujeres en tales circunstancias”, explicó McNeill.
Según un estudio realizado por la organización benéfica National Ugly Mug, las trabajadoras sexuales están 10 veces más seguras trabajando en interiores que en exteriores, pero las mujeres británicas salen a la calle, ya que trabajar con agencias conlleva otros riesgos.
Por otra parte, las mujeres también ven una salida al trabajar en línea, a través de servicios de suscripción como OnlyFans. Sin embargo, este tipo de opciones conlleva peligros como la posible filtración de información personal o el acoso por parte de los suscriptores y el chantaje.
La inflación en el Reino Unido se dispara al nivel más alto desde febrero de 1982. Los precios subieron un 0,6 % en julio con respecto a junio, sin tener en cuenta los ajustes estacionales.
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El aumento del costo de vida en el Reino Unido está obligando a las mujeres a ejercer el trabajo sexual.
Según los testimonios, más mujeres están recurriendo a la prostitución por primera vez, mientras que otras que han logrado dejarlo atrás se ven obligadas a regresar para pagar sus facturas.
Con la inflación en un nivel récord, los salarios bajos y los altos costos de la energía, el número de llamadas al Colectivo Inglés de Prostitutas ha aumentado en un tercio este verano. La red asesora a las mujeres en todas las líneas de trabajo sexual sobre cómo mantenerse seguras y dentro de la ley cuando sea posible.
La portavoz del colectivo, Niki Adams, aseguró que la gente opta por esta fuente de ingresos debido a la desesperación. Como ejemplo, mencionó el caso de una de las mujeres que ha acudido a la red: una madre soltera de cuatro hijos, que perdió su trabajo y no pudo pagar sus cuentas.
“Aunque dice que el dinero ha sido un salvavidas, está aterrorizada de que su expareja violenta se entere y lo use contra ella a través de los servicios sociales”, relató.
Adams da otro ejemplo de una mujer de la ciudad de Bristol que durante mucho tiempo abandonó la prostitución y se convirtió en vendedora, pero perdió su trabajo debido a la pandemia. Por lo tanto, tuvo que volver a su forma anterior de ganar dinero.
Del mismo modo, Nikki McNeill, una empleada de la organización Beyond the Streets que ofrece servicios de apoyo a las mujeres, también confirma que ella y sus colegas han visto un aumento en las llamadas y el número de mujeres que venden “sexo para sobrevivir”.
Además, varios hombres esperan que las mujeres brinden sexo sin protección. “Los clientes saben que están en una posición en la que no pueden decir que ‘no’, por lo que algunos están empujando a las mujeres en tales circunstancias”, explicó McNeill.
Según un estudio realizado por la organización benéfica National Ugly Mug, las trabajadoras sexuales están 10 veces más seguras trabajando en interiores que en exteriores, pero las mujeres británicas salen a la calle, ya que trabajar con agencias conlleva otros riesgos.
Por otra parte, las mujeres también ven una salida al trabajar en línea, a través de servicios de suscripción como OnlyFans. Sin embargo, este tipo de opciones conlleva peligros como la posible filtración de información personal o el acoso por parte de los suscriptores y el chantaje.
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 24, 2022