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  Por CLAUDIO KUSSMAN.

NEBBIA, PALAZZANI, CASTAÑO Y DA SILVA, LA MENTIRA Y LA BRUTALIDAD, AL SERVICIO DE LA “JUSTICIA” FEDERAL ARGENTINA.

Lo peor que a uno le puede pasar, es que lo involucren en una causa por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad, en la que no solo se pierden derechos constitucionales, sino que hay que tratar con un conjunto de ruines, esta vez pertenecientes al poder judicial federal. Debido a la edad y con muchos años de retiro la agilidad mental ya no existe, muy atrás en el tiempo, quedaron las épocas en que se estaba en condiciones de confrontar día tras día con delincuentes, en un territorio neutral como era la calle. Hoy esta se cambió por ámbitos cerrados, dominados por burócratas judiciales, en mayoría corruptos, en donde hipócritamente se debate “la memoria, la verdad y la justicia”. Allí debemos enfrentar desarmados, a seres con un poder ilimitado, que pueden ser militantes, inescrupulosos o incapaces, lo cual hace que seamos fácilmente vencidos. Como vivo ejemplo tenemos en Bahía Blanca, a los fiscales JOSÉ NEBBIA, MIGUÉL PALAZZANI, fanáticos militantes de “Justicia Legítima” y ANTONIO CASTAÑO. este último al que yo apodara “GATO DE YESO”, por su poca visión para investigar delitos y no decir que es un bruto, quien también arrastra un desagradable tufo a relación con narcos, los genocidas del presente y el futuro.

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No puedo dejar de mencionar a WALTER LOPEZ DA SILVA, un juez falaz como el que más, completando así un equipo de siniestros “ciegos, sordos y mudos”, ante la verdad.  El día 5 de febrero de 2018, luego de insistir durante 8 meses, recurriendo a la cámara de apelaciones (¡EL JUEZ NO QUERIA INDAGARME!) el Dr. MIÑO (mi defensor) logró que el magistrado-semidiós me recibiera una ampliación de declaración indagatoria. Tras viajar a Bahía Blanca (650 kilómetros- 404 millas) presté la misma, sin asistencia de letrado alguno (el Dr. Miño había tenido un contratiempo en el viaje). Estando en espera, en la mesa de entrada en un breve dialogo con el juez DA SILVA, le solicité la presencia de fiscales de la causa para que me pudieran interrogar, cosa imposible de lograr con CASTAÑO, tan afecto a jugar con su celular. El togado nuevamente mintió, diciendo que aparentemente NEBBIA Y PALAZZANI ya no estaban más en Bahía Blanca. Esto resultó falso y así a través de los años, nunca logré estar frente a los fiscales que junto con ABÉL CÓRDOBA, me involucraron en  delitos de lesa humanidad.  Estos siempre se ocultaron y mandaron a dar la cara a su par, alias “GATO DE YESO”. Antes del acto, accidentalmente una de mis cámaras espía había quedado accidentalmente encendida registrándose mi solicitud sobre los fiscales y la mentira de DA SILVA, avalando siempre la presencia de CASTAÑO, acusador ajeno a la causa. Así actúan los miembros de la corrupta y mal oliente jurisprudencia federal argentina. ¿Qué mejor oportunidad para un equipo de investigadores de “la memoria, la verdad y la justicia” que tener a disposición un imputado, sin asistencia de su abogado defensor, que quiere declarar y ser interrogado?  En su actuación estos “funcionarios”, son brutales, ya que haciendo valer la impunidad de la que gozan no disimulan, en nada, que nuestra pérdida de libertad y nuestra muerte ya están aseguradas y certificadas de antemano, porque en la “ley” Argentina a eso llaman:  POLÍTICA DE ESTADO.  

 

 

Claudio Kussman

Comisario Mayor (R) 

Policía Pcia. Buenos Aires

Enero 31, 2021

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“La gran diferencia entre un gato y un mentiroso es que el gato tiene apenas nueve vidas”

Mark Twain (1835-1910)

 

 

 

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Enero 31, 2021

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