La carrera para colonizar Marte está en marcha, lo que significa que muchos de nosotros podemos ser testigos de cómo la humanidad pone un pie en el planeta rojo antes de morir.
Weintraub
“La vida en Marte: lo que hay que saber antes de partir” es el último libro del profesor David Weintraub de la Universidad de Vanderbilt. Pero un profesor de astronomía cree que deberíamos reducir el ritmo y descubrir si hay vida en el planeta vecino de la Tierra antes de que nuestra exploración la destruya.
“Si hay algún tipo de biología activa en Marte, por primitiva que sea, el primer paso es encontrarla y comprenderla”, dijo David Weintraub, profesor de la Universidad Vanderbilt en Nashville.
“Entonces, podríamos intentar tomar decisiones informadas sobre lo que es correcto hacer o no hacer”.
Él defiende pisar el freno e investigar más a fondo mientras la NASA y empresas respaldadas por multimillonarios como SpaceX de Elon Musk y Blue Origin de Jeff Bezos hacen planes ambiciosos para seguir adelante. Weintraub escribió sobre los dilemas éticos que nos esperan en su libro recién publicado “La vida en Marte: lo que debemos saber antes de irnos”. En él, explica la historia de nuestra larga fascinación por el cuarto planeta de nuestro sistema solar y la búsqueda de marcianos.
Al igual que la carrera hacia la Luna en el siglo pasado, la idea de colonizar Marte durante nuestras vidas es emocionante, dijo Weintraub. Pero estamos cegados por la emoción y nos olvidamos de hacer las preguntas morales necesarias y sopesar las consecuencias de aterrizar en el planeta antes de saber que existe vida, dijo.
“Espero que al menos tengamos una conversación sobre eso antes de que sea demasiado tarde”, dijo Weintraub.
Durante siglos, los humanos hemos estudiado a nuestro vecino más cercano. Las ideas filosóficas y la cultura pop también han alimentado nuestra fascinación. Pero Weintraub sostiene que los humanos pueden haberse engañado durante cientos de años al pensar que existe vida en Marte porque asumimos que el planeta se parece más a la Tierra de lo que realmente es. Considera que la posibilidad de vida en el planeta rojo es pequeña, pero no nula. Si existe, se espera que la vida sea microscópica. Pero encontrar vida en Marte sería un gran descubrimiento, independientemente de su tamaño.
“El conocimiento sería muy valioso para comprendernos a nosotros mismos y de dónde venimos y sobre la posibilidad de vida en el universo más allá de la Tierra y Marte”, dijo Weintraub. “Creo que deberíamos intentar obtener esa información, si existe, antes de que ya no esté disponible”.
Ralentizar la carrera espacial ofrece más tiempo para aprender, investigar y explorar desde lejos si existe vida, dijo Weintraub. Si nos vamos antes de que nos demos cuenta, los humanos podrían contaminar Marte, dijo Weintraub. Colonizar el planeta y alterar su clima y ambiente para hacerlo habitable para los humanos puede destruir la vida que existe sin que lo sepamos, dijo.
“Si Marte es estéril, ¿por qué no ir?” dijo Weintraub. “Queremos ir. Está justo ahí”.
Independientemente de su posición, Weintraub cree que habrá huellas humanas en Marte a finales del siglo XXI. Incluso si encontráramos vida en el planeta y las naciones con capacidad espacial prohibieran los viajes a Marte, alguien encontraría una manera porque los humanos tienen un impulso innato para explorar, dijo.
“Mi apuesta es que alguien en su sótano construirá un cohete e irá a Marte por su cuenta”, dijo Weintraub.
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La carrera para colonizar Marte está en marcha, lo que significa que muchos de nosotros podemos ser testigos de cómo la humanidad pone un pie en el planeta rojo antes de morir.
“La vida en Marte: lo que hay que saber antes de partir” es el último libro del profesor David Weintraub de la Universidad de Vanderbilt. Pero un profesor de astronomía cree que deberíamos reducir el ritmo y descubrir si hay vida en el planeta vecino de la Tierra antes de que nuestra exploración la destruya.
“Si hay algún tipo de biología activa en Marte, por primitiva que sea, el primer paso es encontrarla y comprenderla”, dijo David Weintraub, profesor de la Universidad Vanderbilt en Nashville.
“Entonces, podríamos intentar tomar decisiones informadas sobre lo que es correcto hacer o no hacer”.
Él defiende pisar el freno e investigar más a fondo mientras la NASA y empresas respaldadas por multimillonarios como SpaceX de Elon Musk y Blue Origin de Jeff Bezos hacen planes ambiciosos para seguir adelante. Weintraub escribió sobre los dilemas éticos que nos esperan en su libro recién publicado “La vida en Marte: lo que debemos saber antes de irnos”. En él, explica la historia de nuestra larga fascinación por el cuarto planeta de nuestro sistema solar y la búsqueda de marcianos.
Al igual que la carrera hacia la Luna en el siglo pasado, la idea de colonizar Marte durante nuestras vidas es emocionante, dijo Weintraub. Pero estamos cegados por la emoción y nos olvidamos de hacer las preguntas morales necesarias y sopesar las consecuencias de aterrizar en el planeta antes de saber que existe vida, dijo.
“Espero que al menos tengamos una conversación sobre eso antes de que sea demasiado tarde”, dijo Weintraub.
Durante siglos, los humanos hemos estudiado a nuestro vecino más cercano. Las ideas filosóficas y la cultura pop también han alimentado nuestra fascinación. Pero Weintraub sostiene que los humanos pueden haberse engañado durante cientos de años al pensar que existe vida en Marte porque asumimos que el planeta se parece más a la Tierra de lo que realmente es. Considera que la posibilidad de vida en el planeta rojo es pequeña, pero no nula. Si existe, se espera que la vida sea microscópica. Pero encontrar vida en Marte sería un gran descubrimiento, independientemente de su tamaño.
Ralentizar la carrera espacial ofrece más tiempo para aprender, investigar y explorar desde lejos si existe vida, dijo Weintraub. Si nos vamos antes de que nos demos cuenta, los humanos podrían contaminar Marte, dijo Weintraub. Colonizar el planeta y alterar su clima y ambiente para hacerlo habitable para los humanos puede destruir la vida que existe sin que lo sepamos, dijo.
“Si Marte es estéril, ¿por qué no ir?” dijo Weintraub. “Queremos ir. Está justo ahí”.
Independientemente de su posición, Weintraub cree que habrá huellas humanas en Marte a finales del siglo XXI. Incluso si encontráramos vida en el planeta y las naciones con capacidad espacial prohibieran los viajes a Marte, alguien encontraría una manera porque los humanos tienen un impulso innato para explorar, dijo.
“Mi apuesta es que alguien en su sótano construirá un cohete e irá a Marte por su cuenta”, dijo Weintraub.
PrisioneroEnArgentina.com
Noviembre 20, 2023