Como una tragicomedia más en esta Argentina que está en “guerra” con el coronavirus, hoy en la Unidad Penitenciaria 31 de Ezeiza donde se encuentran alojados prisioneros adultos mayores, imputados por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad, se produjeron algunas novedades.
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Como parte de esa misma “guerra”, sin pudor alguno, el Servicio Penitenciario Federal proveyó a cada uno de los cautivos UN JABÓN HOTELERO LUX DE 15 GRAMOS, fragancia… “Encántame”.
También un rollo de papel higiénico de 40 metros de longitud. Ignoramos si esta entrega no fue acompañada de la recomendación, de no abusar en el uso de estos elementos.
Asimismo horas antes, preventivamente se cortó toda visita con lo cual la situación de los internos se hace muy precaria, más para aquellos que no disponen de dinero para realizar compras en la cantina de esa prisión. Si bien al lugar no pueden llegar los familiares de los reclusos, sí cruzan permanentemente por el pasillo central entre 10 y 12 obreros que se encuentran reformando el pabellón 19, en donde yo estuviera alojado durante un año y medio. Las colonias de cucarachas, ajenas a la existencia de la pandemia, siguen su existencia normal y el riesgo es que vuelvan las chinches que habían sido casi erradicadas con Kaotrina, llevada por familiares de los cautivos.
Mientras los días transcurren, el coronavirus se sigue expandiendo y la espera sobre lo que se decidirá con esta franja etaria de alto riesgo privada de libertad continua. El tiempo, el destino y viles gobernantes tienen la palabra sobre cada uno de esos septuagenarios, octogenarios e inclusive nonagenarios, encerrados a como dé lugar en un mundo paralelo de sombras.
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Por CLAUDIO KUSSMAN
UN JABÓN HOTELERO Y 40 METROS DE PAPÉL SANITARIO
Como una tragicomedia más en esta Argentina que está en “guerra” con el coronavirus, hoy en la Unidad Penitenciaria 31 de Ezeiza donde se encuentran alojados prisioneros adultos mayores, imputados por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad, se produjeron algunas novedades.
[ezcol_1half]Como parte de esa misma “guerra”, sin pudor alguno, el Servicio Penitenciario Federal proveyó a cada uno de los cautivos UN JABÓN HOTELERO LUX DE 15 GRAMOS, fragancia… “Encántame”.
También un rollo de papel higiénico de 40 metros de longitud. Ignoramos si esta entrega no fue acompañada de la recomendación, de no abusar en el uso de estos elementos.
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end] [/ezcol_1half_end]Asimismo horas antes, preventivamente se cortó toda visita con lo cual la situación de los internos se hace muy precaria, más para aquellos que no disponen de dinero para realizar compras en la cantina de esa prisión. Si bien al lugar no pueden llegar los familiares de los reclusos, sí cruzan permanentemente por el pasillo central entre 10 y 12 obreros que se encuentran reformando el pabellón 19, en donde yo estuviera alojado durante un año y medio. Las colonias de cucarachas, ajenas a la existencia de la pandemia, siguen su existencia normal y el riesgo es que vuelvan las chinches que habían sido casi erradicadas con Kaotrina, llevada por familiares de los cautivos.
[ezcol_1half] [/ezcol_1half] [ezcol_1half_end] [/ezcol_1half_end]Mientras los días transcurren, el coronavirus se sigue expandiendo y la espera sobre lo que se decidirá con esta franja etaria de alto riesgo privada de libertad continua. El tiempo, el destino y viles gobernantes tienen la palabra sobre cada uno de esos septuagenarios, octogenarios e inclusive nonagenarios, encerrados a como dé lugar en un mundo paralelo de sombras.
[ezcol_1half]Claudio Kussman
Comisario Mayor (R)
Policía Pcia. Buenos Aires
Marzo 21, 2020
claudio@PrisioneroEnArgentina.com
www.PrisioneroEnArgentina.com
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]Sara de Ibáñez (1909-1971)
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 21, 2020