La variante del coronavirus Delta, que devastó la India y obligó al Reino Unido a retrasar el levantamiento de sus restricciones de coronavirus restantes, ahora está aumentando en los EE. UU.
Los expertos dicen que podemos estar a punto de ver el surgimiento de “dos Américas” de COVID: una con altas tasas de vacunación donde la variante del coronavirus Delta representa una amenaza moderada, y la otra con bajos niveles de vacunación que serán vulnerables a nuevas oleadas mortales. Esa división es impulsada en gran parte por la política partidista, con las tasas de vacunación más altas en las ciudades liberales y más bajas en los bastiones conservadores en el sur profundo y en las áreas rurales de todo el país.
“Yo lo llamo dos naciones COVID”, dijo Peter Hotez, investigador de vacunas del Baylor College of Medicine en Houston.
Dondequiera que haya bajas tasas de vacunación, el virus seguirá circulando y mutando, aumentando el riesgo de que surjan nuevas variantes más peligrosas, potencialmente afectando aún a los que están vacunados. Dado que la vacunación en la mayor parte del mundo está muy por detrás de los EE. UU., es probable que la variante Delta sea seguida por otras.
La variante Delta, también conocida como B.1.617.2, se descubrió por primera vez en India a fines de 2020 y se cree que impulsó el devastador aumento de COVID-19 en ese país, que comenzó en marzo. Desde entonces, se ha extendido a más de 80 países en todo el mundo, incluido EE. UU., donde los Centros de Enfermedades Contagiosas (CDC) lo designaron oficialmente el martes como una “variante de extrema preocupación”.
Los datos de Public Health England indican que la variante Delta es entre un 40% y un 60% más transmisible que la variante Alpha, también conocida como B.1.1.7. identificada por primera vez en el Reino Unido y ahora la variante más común en los EE. UU., la variante Alpha es a su vez mucho más transmisible que las formas anteriores del coronavirus.
Hasta ahora, las vacunas disponibles parecen ofrecer una buena protección contra la mayoría de las variantes. Pero la variante Delta parece capaz de escapar de la inmunidad parcial al coronavirus.
También hay indicios de que la variante Delta puede causar una enfermedad más grave. Un estudio de casos en Escocia publicado esta semana encontró que el riesgo de ingreso hospitalario con la variante Delta se duplicó aproximadamente en comparación con las personas infectadas con la variante Alfa.
“Este es un virus desagradable”, dijo John Moore, virólogo del Weill Cornell Medical College en Nueva York.
Ahora que se cree que la variante Delta representa más del 90% de las nuevas infecciones en el Reino Unido, y con el aumento de casos y hospitalizaciones una vez más, el primer ministro Boris Johnson anunció el martes que retrasará la eliminación de las restricciones de coronavirus restantes en Inglaterra, originalmente (Escocia, Gales e Irlanda del Norte establecen sus propias reglas de salud, pero han realizado movimientos similares).
En los EE. UU., la variante Delta ahora parece propagarse más rápidamente que la variante Alpha en una etapa similar en su ascenso al dominio, según datos de outbreak.info, un proyecto de seguimiento de coronavirus dirigido por investigadores de Scripps Research en La Jolla, California.
No está claro si Delta dominará tan rápida y totalmente como lo hizo en el Reino Unido, donde reemplazó un brote impulsado casi en su totalidad por la variante Alpha. En los EE. UU., circula una mayor cantidad de variantes en competencia, lo que dificulta predecir lo que sucederá, dijo Bette Korber, bióloga computacional del Laboratorio Nacional de Los Alamos en Nuevo México. Pero espera que Delta se convierta en la variante más común en los EE. UU. en unas semanas. “Se está moviendo realmente rápido”, dijo Korber.
Dada la velocidad esperada de propagación de la variante Delta y el hecho de que la vacuna no es suficiente para brindar una mediana protección, decidir retrasar la vacunación es arriesgado. “Algunas de esas personas se van a llevar una sorpresa desagradable”, dijo Bob Wachter, presidente del Departamento de Medicina de la Universidad de California en San Francisco.
La baja absorción de vacunas en el sur y en las áreas rurales de todo el país hace que estas áreas sean más vulnerables a la variante Delta. “Creo que hay una posibilidad inminente de que, en invierno o en otoño, se produzcan aumentos repentinos importantes”, dijo Wachter.
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La variante del coronavirus Delta, que devastó la India y obligó al Reino Unido a retrasar el levantamiento de sus restricciones de coronavirus restantes, ahora está aumentando en los EE. UU.
Los expertos dicen que podemos estar a punto de ver el surgimiento de “dos Américas” de COVID: una con altas tasas de vacunación donde la variante del coronavirus Delta representa una amenaza moderada, y la otra con bajos niveles de vacunación que serán vulnerables a nuevas oleadas mortales. Esa división es impulsada en gran parte por la política partidista, con las tasas de vacunación más altas en las ciudades liberales y más bajas en los bastiones conservadores en el sur profundo y en las áreas rurales de todo el país.
Dondequiera que haya bajas tasas de vacunación, el virus seguirá circulando y mutando, aumentando el riesgo de que surjan nuevas variantes más peligrosas, potencialmente afectando aún a los que están vacunados. Dado que la vacunación en la mayor parte del mundo está muy por detrás de los EE. UU., es probable que la variante Delta sea seguida por otras.
La variante Delta, también conocida como B.1.617.2, se descubrió por primera vez en India a fines de 2020 y se cree que impulsó el devastador aumento de COVID-19 en ese país, que comenzó en marzo. Desde entonces, se ha extendido a más de 80 países en todo el mundo, incluido EE. UU., donde los Centros de Enfermedades Contagiosas (CDC) lo designaron oficialmente el martes como una “variante de extrema preocupación”.
Los datos de Public Health England indican que la variante Delta es entre un 40% y un 60% más transmisible que la variante Alpha, también conocida como B.1.1.7. identificada por primera vez en el Reino Unido y ahora la variante más común en los EE. UU., la variante Alpha es a su vez mucho más transmisible que las formas anteriores del coronavirus.
Hasta ahora, las vacunas disponibles parecen ofrecer una buena protección contra la mayoría de las variantes. Pero la variante Delta parece capaz de escapar de la inmunidad parcial al coronavirus.
También hay indicios de que la variante Delta puede causar una enfermedad más grave. Un estudio de casos en Escocia publicado esta semana encontró que el riesgo de ingreso hospitalario con la variante Delta se duplicó aproximadamente en comparación con las personas infectadas con la variante Alfa.
“Este es un virus desagradable”, dijo John Moore, virólogo del Weill Cornell Medical College en Nueva York.
Ahora que se cree que la variante Delta representa más del 90% de las nuevas infecciones en el Reino Unido, y con el aumento de casos y hospitalizaciones una
vez más, el primer ministro Boris Johnson anunció el martes que retrasará la eliminación de las restricciones de coronavirus restantes en Inglaterra, originalmente (Escocia, Gales e Irlanda del Norte establecen sus propias reglas de salud, pero han realizado movimientos similares).
En los EE. UU., la variante Delta ahora parece propagarse más rápidamente que la variante Alpha en una etapa similar en su ascenso al dominio, según datos de outbreak.info, un proyecto de seguimiento de coronavirus dirigido por investigadores de Scripps Research en La Jolla, California.
No está claro si Delta dominará tan rápida y totalmente como lo hizo en el Reino Unido, donde reemplazó un brote impulsado casi en su totalidad por la variante Alpha. En los EE. UU., circula una mayor cantidad de variantes en competencia, lo que dificulta predecir lo que sucederá, dijo Bette Korber, bióloga computacional del Laboratorio Nacional de Los Alamos en Nuevo México. Pero espera que Delta se convierta en la variante más común en los EE. UU. en unas semanas. “Se está moviendo realmente rápido”, dijo Korber.
Dada la velocidad esperada de propagación de la variante Delta y el hecho de que la vacuna no es suficiente para brindar una mediana protección, decidir retrasar la vacunación es arriesgado. “Algunas de esas personas se van a llevar una sorpresa desagradable”, dijo Bob Wachter, presidente del Departamento de Medicina de la Universidad de California en San Francisco.
La baja absorción de vacunas en el sur y en las áreas rurales de todo el país hace que estas áreas sean más vulnerables a la variante Delta. “Creo que hay una posibilidad inminente de que, en invierno o en otoño, se produzcan aumentos repentinos importantes”, dijo Wachter.
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 20, 2021