La Casa Blanca anunció que se encontraron cinco páginas más de material clasificado en la residencia de Biden en Wilmington, Delaware. Eso se suma a las páginas de documentos clasificados que se encontraron previamente en el garaje de la casa de Delaware de Biden y en la oficina de D.C. que usó antes de su campaña electoral de 2020. El fiscal general Merrick Garland nombró a un abogado especial para investigar el asunto, y es la segunda vez durante su mandato que hace esto. Una investigación separada está analizando la posesión de documentos clasificados por parte del expresidente Trump en su residencia en los terrenos de la finca Mar-a-Lago en Florida.
Donald J. Trump
El Archivo Nacional está a cargo de recopilar y almacenar estos documentos después de que un presidente deja el cargo. Los presidentes están obligados a entregar los documentos al archivo para su custodia. Cuando el presidente Trump no hizo esto, el Departamento de Justicia se involucró. Pero parece que el archivo no estaba al tanto de los materiales que tenía el presidente Biden.
Los pensamientos iniciales son que se trata de un error no forzado de la administración de Biden. Hace aproximadamente un año y medio, los Archivos Nacionales se comunicaron con el equipo del expresidente Trump en busca de materiales que sabían que no estaban en Washington como deberían y que probablemente estaban en Mar-a-Lago. En ese momento, los Archivos Nacionales se comunicaron con el equipo de Trump de que la Casa Blanca estaba alerta. Y ahora el público estadounidense se pregunta por qué, en 2021, la Casa Blanca de Biden no dijo: “Me pregunto si hay algunos materiales que están en los documentos de la vicepresidencia que el entonces vicepresidente Biden pudo conservar. Nos preguntamos si hay no hay algunos materiales allí que no deberían estar allí”
Los presidentes y vicepresidentes producen enormes cantidades de papel y, obviamente, también registros digitales. No hay una lista de verificación. De hecho, los Archivos Nacionales tardan décadas en procesar completamente los materiales presidenciales y vicepresidenciales. En el caso del presidente Trump, había materiales muy famosos que los Archivos Nacionales no adquirieron el 20 de enero de 2021 y que obviamente se suponía que estaban en Washington.
En el caso del vicepresidente Biden, en primer lugar, no hay evidencia de que alguien de los Archivos Nacionales o alguno de sus abogados dijera en 2017 que lo que sea que estamos encontrando ahora debería haber sido entregado a los Archivos Nacionales. Y dado que no había un registro de todos los documentos de la vicepresidencia, los Archivos Nacionales no podrían haber sabido, a menos que fuera algo extraordinariamente conocido, no podrían haber sabido que en realidad faltaba algo. Así que eso es parte de la explicación.
Joe Biden
Pero hay algo más que debe tenerse en cuenta, y es que los Archivos Nacionales tienen un papel de consulta, no de investigación, en una transición. ¿Que significa eso? Significa que los Archivos Nacionales irán a una administración saliente, trabajarán con ellos y luego creerán en el hecho de que todo lo que el exvicepresidente y el expresidente se lleven a casa es lo que se les permite llevar a casa según la Ley de Registros Presidenciales. Los Archivos Nacionales no tienen el personal ni la autoridad para negar o autorizar. o decir: “Nos gustaría buscar en cada una de esas cajas que llevará a Mar-a-Lago (residencia del expresidente Trump) o Wilmington (Propiedad del presidente Bideen) el 20 de enero”. Por eso es posible que los materiales de seguridad nacional, desafortunadamente y de manera incorrecta, se confundan en trato incorrectamente con documentos privados liberables.
Los presidentes y vicepresidentes y miembros del Consejo de Seguridad Nacional viven en una burbuja. Pueden mover registros clasificados alrededor de sus oficinas y, en el caso del presidente y el vicepresidente, también, sus residencias, de una manera que los mortales comunes no pueden. Ahora, eso no significa que esto deba continuar una vez que dejen el cargo porque una vez que dejen el cargo, esos materiales clasificados no les pertenecen. Pertenecen al pueblo estadounidense. Tienen derecho a ir a los Archivos Nacionales en cualquier momento que quieran leer sus materiales mientras trabajan en sus memorias. Pero ya no se les permite traer esos materiales clasificados a casa para escribir sus memorias. Hubo un tiempo en que podían, pero eso terminó hace décadas. Terminó por el caso Watergate.
La libertad de los ciudadanos estadounidenses depende de la mayor transparencia posible del gobierno. Los seres humanos tienen fallas, y se debería esperar que sean optadas personas con fallas, pero no siempre. Y es fundamental que los futuros presidentes sepan que podrán ser aptrapados, descubiertos. Se podrá averiguar si abusan del poder. Y la única forma de establecer ese tipo de miedo en los futuros líderes es que haya un sistema de desclasificación, control y rendición de cuentas. Entonces, aunque la maquinaria de desclasificación es complicada, es un poco mundano discutirla, esa maquinaria es una parte importante de la responsabilidad o incapacidad como ciudadanos para restringir a quienes dirigen el destino todo.
La Casa Blanca anunció que se encontraron cinco páginas más de material clasificado en la residencia de Biden en Wilmington, Delaware. Eso se suma a las páginas de documentos clasificados que se encontraron previamente en el garaje de la casa de Delaware de Biden y en la oficina de D.C. que usó antes de su campaña electoral de 2020. El fiscal general Merrick Garland nombró a un abogado especial para investigar el asunto, y es la segunda vez durante su mandato que hace esto. Una investigación separada está analizando la posesión de documentos clasificados por parte del expresidente Trump en su residencia en los terrenos de la finca Mar-a-Lago en Florida.
El Archivo Nacional está a cargo de recopilar y almacenar estos documentos después de que un presidente deja el cargo. Los presidentes están obligados a entregar los documentos al archivo para su custodia. Cuando el presidente Trump no hizo esto, el Departamento de Justicia se involucró. Pero parece que el archivo no estaba al tanto de los materiales que tenía el presidente Biden.
Los pensamientos iniciales son que se trata de un error no forzado de la administración de Biden. Hace aproximadamente un año y medio, los Archivos Nacionales se comunicaron con el equipo del expresidente Trump en busca de materiales que sabían que no estaban en Washington como deberían y que probablemente estaban en Mar-a-Lago. En ese momento, los Archivos Nacionales se comunicaron con el equipo de Trump de que la Casa Blanca estaba alerta. Y ahora el público estadounidense se pregunta por qué, en 2021, la Casa Blanca de Biden no dijo: “Me pregunto si hay algunos materiales que están en los documentos de la vicepresidencia que el entonces vicepresidente Biden pudo conservar. Nos preguntamos si hay no hay algunos materiales allí que no deberían estar allí”
Los presidentes y vicepresidentes producen enormes cantidades de papel y, obviamente, también registros digitales. No hay una lista de verificación. De hecho, los Archivos Nacionales tardan décadas en procesar completamente los materiales presidenciales y vicepresidenciales. En el caso del presidente Trump, había materiales muy famosos que los Archivos Nacionales no adquirieron el 20 de enero de 2021 y que obviamente se suponía que estaban en Washington.
En el caso del vicepresidente Biden, en primer lugar, no hay evidencia de que alguien de los Archivos Nacionales o alguno de sus abogados dijera en 2017 que lo que sea que estamos encontrando ahora debería haber sido entregado a los Archivos Nacionales. Y dado que no había un registro de todos los documentos de la vicepresidencia, los Archivos Nacionales no podrían haber sabido, a menos que fuera algo extraordinariamente conocido, no podrían haber sabido que en realidad faltaba algo. Así que eso es parte de la explicación.
Pero hay algo más que debe tenerse en cuenta, y es que los Archivos Nacionales tienen un papel de consulta, no de investigación, en una transición. ¿Que significa eso? Significa que los Archivos Nacionales irán a una administración saliente, trabajarán con ellos y luego creerán en el hecho de que todo lo que el exvicepresidente y el expresidente se lleven a casa es lo que se les permite llevar a casa según la Ley de Registros Presidenciales. Los Archivos Nacionales no tienen el personal ni la autoridad para negar o autorizar. o decir: “Nos gustaría buscar en cada una de esas cajas que llevará a Mar-a-Lago (residencia del expresidente Trump) o Wilmington (Propiedad del presidente Bideen) el 20 de enero”. Por eso es posible que los materiales de seguridad nacional, desafortunadamente y de manera incorrecta, se confundan en trato incorrectamente con documentos privados liberables.
Los presidentes y vicepresidentes y miembros del Consejo de Seguridad Nacional viven en una burbuja. Pueden mover registros clasificados alrededor de sus oficinas y, en el caso del presidente y el vicepresidente, también, sus residencias, de una manera que los mortales comunes no pueden. Ahora, eso no significa que esto deba continuar una vez que dejen el cargo porque una vez que dejen el cargo, esos materiales clasificados no les pertenecen. Pertenecen al pueblo estadounidense. Tienen derecho a ir a los Archivos Nacionales en cualquier momento que quieran leer sus materiales mientras trabajan en sus memorias. Pero ya no se les permite traer esos materiales clasificados a casa para escribir sus memorias. Hubo un tiempo en que podían, pero eso terminó hace décadas. Terminó por el caso Watergate.
La libertad de los ciudadanos estadounidenses depende de la mayor transparencia posible del gobierno. Los seres humanos tienen fallas, y se debería esperar que sean optadas personas con fallas, pero no siempre. Y es fundamental que los futuros presidentes sepan que podrán ser aptrapados, descubiertos. Se podrá averiguar si abusan del poder. Y la única forma de establecer ese tipo de miedo en los futuros líderes es que haya un sistema de desclasificación, control y rendición de cuentas. Entonces, aunque la maquinaria de desclasificación es complicada, es un poco mundano discutirla, esa maquinaria es una parte importante de la responsabilidad o incapacidad como ciudadanos para restringir a quienes dirigen el destino todo.
PrisioneroEnArgentina.com
Enero 21, 2023