Está circulando un video donde el jefe máximo de la organización terrorista Montoneros, justificaba el accionar de los subversivos de los años 70 e instigaba a repetir aquel momento histórico. Dicho en otras palabras, arengaba a la juventud actual a volver a la lucha. En ese video, hace clara alusión a la Vicepresidente Victoria Villaruel, quien pide que se juzgue a los terroristas del pasado.
Ese fue el claro mensaje de este criminal y genocida, que bien le cabe este calificativo. Firmenich fue el principal psicópata y responsable de la muerte de miles de inocentes. Esta organización subversiva, integrada por jóvenes peronistas pero con fuerte tendencia de izquierda, a toda costa querían llegar al poder, sabiendo que por los votos no lo lograrían, lo hacían por medio de la violencia, con las armas, como rezaba su mensaje: “el poder está en la punta del fusil”. Por ello secuestraban, ponían bombas, asaltaban bancos, empresas, asesinaban niños, sindicalistas, religiosos. periodistas, profesores, empresarios, estudiantes, etc. También a sus propios compañeros que los traicionaban o se querían retirar del grupo. Instaban a no rendirse, a no entregarse, sino que ingirieran una cápsula de cianuro que proveían . Las mayores bajas fueron de las fuerzas armadas, de seguridad y policiales. Los ataques sorpresivos eran su principal arma y su fin la muerte.
La mayoría de quienes integraban Montoneros, ERP, FAP, JP y otras, eran de izquierda, jóvenes de clase media acomodada de muy buena preparación, había profesionales, católicos militantes y religiosos tercermundistas de armas llevar, ellos decían ser “jóvenes idealistas”.
Hoy Firmenich es asesor político del dictador y criminal Daniel Ortega (el zorro pierde el pelo pero no las mañas).
Este montonero con 76 años de edad, vive la “dolce vita” mientras que muchos de sus “cumpas” no alcanzaron siquiera los 30 años de edad, y quienes nos salvaron de no caer en manos de estos psicópatas, hoy son ancianos que se están muriendo privados de su libertad.
En el video, este personaje aparece de forma arrogante, queriendo nuevamente instalar en los jóvenes la lucha de clases, que en el pasado le dio a él, frutos de los que hoy goza.
Su mensaje no fue al azar, ”cuando el río suena, aguas trae”, dicen los que saben y la vivieron.
Recordemos que no tenemos más aquellos uniformados que con muy buen espíritu de cuerpo, vocación de servicio y amor a la Patria, se jugaron la vida por los argentinos, para que no nos cambien nuestra forma de vida, costumbres y no seamos como la pobre y esclavizada Cuba.
De repetirse la historia la izquierda marxista, sabe muy bien que nuestros uniformados del presente, no sé si procederán como en el pasado que a sangre y fuego defendieron nuestra celeste y blanca, sabiendo lo que están sufriendo sus camaradas de ayer, en cuanto a persecución, venganza y privación de la libertad.
Si algún día llegaran al poder los discípulos de Firmenich, entonces seremos millones que terminaremos presos, muertos o en el exilio.
◘
Está circulando un video donde el jefe máximo de la organización terrorista Montoneros, justificaba el accionar de los subversivos de los años 70 e instigaba a repetir aquel momento histórico. Dicho en otras palabras, arengaba a la juventud actual a volver a la lucha. En ese video, hace clara alusión a la Vicepresidente Victoria Villaruel, quien pide que se juzgue a los terroristas del pasado.
Ese fue el claro mensaje de este criminal y genocida, que bien le cabe este calificativo. Firmenich fue el principal psicópata y responsable de la muerte de miles de inocentes. Esta organización subversiva, integrada por jóvenes peronistas pero con fuerte tendencia de izquierda, a toda costa querían llegar al poder, sabiendo que por los votos no lo lograrían, lo hacían por medio de la violencia, con las armas, como rezaba su mensaje: “el poder está en la punta del fusil”. Por ello secuestraban, ponían bombas, asaltaban bancos, empresas, asesinaban niños, sindicalistas, religiosos. periodistas, profesores, empresarios, estudiantes, etc. También a sus propios compañeros que los traicionaban o se querían retirar del grupo. Instaban a no rendirse, a no entregarse, sino que ingirieran una cápsula de cianuro que proveían . Las mayores bajas fueron de las fuerzas armadas, de seguridad y policiales. Los ataques sorpresivos eran su principal arma y su fin la muerte.
Hoy Firmenich es asesor político del dictador y criminal Daniel Ortega (el zorro pierde el pelo pero no las mañas).
Este montonero con 76 años de edad, vive la “dolce vita” mientras que muchos de sus “cumpas” no alcanzaron siquiera los 30 años de edad, y quienes nos salvaron de no caer en manos de estos psicópatas, hoy son ancianos que se están muriendo privados de su libertad.
En el video, este personaje aparece de forma arrogante, queriendo nuevamente instalar en los jóvenes la lucha de clases, que en el pasado le dio a él, frutos de los que hoy goza.
Su mensaje no fue al azar, ”cuando el río suena, aguas trae”, dicen los que saben y la vivieron.
Recordemos que no tenemos más aquellos uniformados que con muy buen espíritu de cuerpo, vocación de servicio y amor a la Patria, se jugaron la vida por los argentinos, para que no nos cambien nuestra forma de vida, costumbres y no seamos como la pobre y esclavizada Cuba.
De repetirse la historia la izquierda marxista, sabe muy bien que nuestros uniformados del presente, no sé si procederán como en el pasado que a sangre y fuego defendieron nuestra celeste y blanca, sabiendo lo que están sufriendo sus camaradas de ayer, en cuanto a persecución, venganza y privación de la libertad.
Si algún día llegaran al poder los discípulos de Firmenich, entonces seremos millones que terminaremos presos, muertos o en el exilio.
MIIGUEL FRANCISCO PRESTOFELIPPO
Ciudadano argentino.
PrisioneroEnArgentina.com
Setiembre 8, 2024
Tags: Daniel Ortega, Mario FirmenichRelated Posts
LESA: CUANDO EL GOBIERNO JUEGA CON FUEGO
○ Por Dr. Gonzalo Miño. Si algo le [...]
Carta abierta a Mario Eduardo Firmanich.
◘ Por Eduardo Ramos. Con un dejo de [...]
VIEJOS FANTASMAS
◘ Por Enrique Guillermo Avogadro. Los argentinos somos, [...]