El candidato a presidente de Argentina por La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, solicitó ayer miércoles ser aceptado como parte querellante en la investigación por supuesto espionaje ilegal que involucraría a dirigentes del kirchnerismo. La causa se abrió paso en la Justicia a partir de una nota periodística que señala presuntas maniobras de inteligencia ilegal contra miembros de la Corte Suprema de Justicia, así como referentes políticos del oficialismo y la oposición. Por el caso está detenido el policía retirado y exagente de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Ariel Pedro Zanchetta, acusado de elaborar más de 1.000 expedientes con información confidencial de personas del ámbito público y civil.
De acuerdo a la investigación, Zanchetta mantuvo conversaciones con dos dirigentes del kirchnerismo: el diputado nacional del Frente de Todos (FdT), Rodolfo Tailhade, y el jefe de Comunicación de la agrupación kirchnerista La Cámpora, Fabián ‘Conu’ Rodríguez, a quienes les habría ofrecido la información recabada. ‘Conu’ Rodríguez es además funcionario de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Este miércoles, en pleno desarrollo de la campaña hacia el balotaje del 19 de noviembre, Milei, una de las presuntas víctimas, presentó un escrito ante el juez federal Marcelo Martínez De Giorgi, a cargo de la causa, para solicitar presentarse como querellante. Si se le concede el pedido, podrá tener acceso al expediente, y también quedará habilitado para pedir medidas de prueba y participar de diferentes trámites procesales. “Vengo a promover criminal querella contra Zanchetta y quienes sean sus cómplices, encubridores o instigadores”, señala el documento.
En la misma jornada, el legislador Tailhade reconoció haber mantenido chats telefónicos con el expolicía Zanchetta, pero, según afirmó, no lo conoce personalmente y nunca le compró información, ni a él ni a nadie. Sí dijo que en diciembre del año pasado recibió tres mensajes de parte de Zanchetta, a través de la plataforma Telegram para ofrecerle datos, y se limitó a responderle. Además, aseguró que la acusación contra él es “una gran operación” para vincularlo con el caso y, de esa manera, “desacreditar el juicio político a la Corte” impulsado por el diputado junto a otros miembros del Frente de Todos en la cámara baja. Tailhade adelantó que también se presentará como querellante en la investigación.
Entre las personas que habrían sido espiadas aparecen personalidades de la actividad política, gremial, deportiva y empresarial, entre las que se encuentran también el candidato a presidente por el oficialismo, Sergio Massa, el presidente Alberto Fernández y la exaspirante a presidente de Juntos por el Cambio (JxC) Patricia Bullrich, entre otros.
A menos de dos semanas de los comicios, el candidato oficialista Massa fue consultado sobre el caso y se desvinculó. El actual ministro de Economía fue espiado en 2015, en momentos en que se había distanciado del kirchnerismo y encabezaba su propio espacio, el Frente Renovador. “Lo había denunciado ya, es más, lo denuncié en el 2015, lo denuncié de vuelta en el 2017, pero por ahí los que tenemos pertenencia a una fuerza política nunca toma trascendencia cuando hacemos estas denuncias”, dijo. La investigación fue especialmente reflejada por medios opositores y referentes de JxC, a pesar de que varios de ellos también están envueltos en un caso de espionaje ilegal durante la gestión de Mauricio Macri (2015-2019).
El propio expresidente de centro derecha está imputado en varias causas por escuchas ilegales desde la AFI, tanto a líderes opositores como a aliados de su propia fuerza. De hecho, Macri fue procesado por su implicación en el espionaje irregular a los familiares de los tripulantes del submarino ARA San Juan, que se hundió en noviembre de 2017 y fue encontrado un año después. Entre tanto, Bullrich, exministra de Seguridad de la gestión anterior, aprovechó la denuncia para acusar a Massa de estar detrás de las maniobras de inteligencia. “Massa nos espía usando la AFIP”, aseguró desde su cuenta de X (antes Twitter). Y llamó a votar a Milei, con quien selló un acuerdo tras su derrota en las elecciones generales del 22 de octubre.
“No los dejemos pasar. Votemos el cambio si no queremos ser todos rehenes de este régimen perverso”, afirmó.
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El candidato a presidente de Argentina por La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, solicitó ayer miércoles ser aceptado como parte querellante en la investigación por supuesto espionaje ilegal que involucraría a dirigentes del kirchnerismo. La causa se abrió paso en la Justicia a partir de una nota periodística que señala presuntas maniobras de inteligencia ilegal contra miembros de la Corte Suprema de Justicia, así como referentes políticos del oficialismo y la oposición. Por el caso está detenido el policía retirado y exagente de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Ariel Pedro Zanchetta, acusado de elaborar más de 1.000 expedientes con información confidencial de personas del ámbito público y civil.
De acuerdo a la investigación, Zanchetta mantuvo conversaciones con dos dirigentes del kirchnerismo: el diputado nacional del Frente de Todos (FdT), Rodolfo Tailhade, y el jefe de Comunicación de la agrupación kirchnerista La Cámpora, Fabián ‘Conu’ Rodríguez, a quienes les habría ofrecido la información recabada. ‘Conu’ Rodríguez es además funcionario de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Este miércoles, en pleno desarrollo de la campaña hacia el balotaje del 19 de noviembre, Milei, una de las presuntas víctimas, presentó un escrito ante el juez federal Marcelo Martínez De Giorgi, a cargo de la causa, para solicitar presentarse como querellante. Si se le concede el pedido, podrá tener acceso al expediente, y también quedará habilitado para pedir medidas de prueba y participar de diferentes trámites procesales. “Vengo a promover criminal querella contra Zanchetta y quienes sean sus cómplices, encubridores o instigadores”, señala el documento.
En la misma jornada, el legislador Tailhade reconoció haber mantenido chats telefónicos con el expolicía Zanchetta, pero, según afirmó, no lo conoce personalmente y nunca le compró información, ni a él ni a nadie. Sí dijo que en diciembre del año pasado recibió tres mensajes de parte de Zanchetta, a través de la plataforma Telegram para ofrecerle datos, y se limitó a responderle. Además, aseguró que la acusación contra él es “una gran operación” para vincularlo con el caso y, de esa manera, “desacreditar el juicio político a la Corte” impulsado por el diputado junto a otros miembros del Frente de Todos en la cámara baja. Tailhade adelantó que también se presentará como querellante en la investigación.
Entre las personas que habrían sido espiadas aparecen personalidades de la actividad política, gremial, deportiva y empresarial, entre las que se encuentran también el candidato a presidente por el oficialismo, Sergio Massa, el presidente Alberto Fernández y la exaspirante a presidente de Juntos por el Cambio (JxC) Patricia Bullrich, entre otros.
A menos de dos semanas de los comicios, el candidato oficialista Massa fue consultado sobre el caso y se desvinculó. El actual ministro de Economía fue espiado en 2015, en momentos en que se había distanciado del kirchnerismo y encabezaba su propio espacio, el Frente Renovador. “Lo había denunciado ya, es más, lo denuncié en el 2015, lo denuncié de vuelta en el 2017, pero por ahí los que tenemos pertenencia a una fuerza política nunca toma trascendencia cuando hacemos estas denuncias”, dijo. La investigación fue especialmente reflejada por medios opositores y referentes de JxC, a pesar de que varios de ellos también están envueltos en un caso de espionaje ilegal durante la gestión de Mauricio Macri (2015-2019).
El propio expresidente de centro derecha está imputado en varias causas por escuchas ilegales desde la AFI, tanto a líderes opositores como a aliados de su propia fuerza. De hecho, Macri fue procesado por su implicación en el espionaje irregular a los familiares de los tripulantes del submarino ARA San Juan, que se hundió en noviembre de 2017 y fue encontrado un año después. Entre tanto, Bullrich, exministra de Seguridad de la gestión anterior, aprovechó la denuncia para acusar a Massa de estar detrás de las maniobras de inteligencia. “Massa nos espía usando la AFIP”, aseguró desde su cuenta de X (antes Twitter). Y llamó a votar a Milei, con quien selló un acuerdo tras su derrota en las elecciones generales del 22 de octubre.
“No los dejemos pasar. Votemos el cambio si no queremos ser todos rehenes de este régimen perverso”, afirmó.
PrisioneroEnArgentina.com
Noviembre 9, 2023
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