La leyenda moderna del Monstruo del Lago Ness nace cuando un avistamiento es noticia local el 2 de mayo de 1933. El periódico Inverness Courier relata la experiencia de una pareja local que afirma haber visto “un enorme animal rodando y sumergiéndose en el lago”. La historia del “monstruo Nessie” (un apodo elegido por el editor de Courier) se convierte en un fenómeno mediático, con los periódicos de Londres enviando corresponsales a Escocia y un circo ofreciendo una recompensa de 20.000 libras esterlinas por la captura de la bestia.
Después de que el periódico informara sobre el avistamiento de abril de 1933 el 2 de mayo, el interés creció constantemente, especialmente después de que otra pareja afirmó haber visto al animal en tierra.
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Los investigadores aficionados han mantenido una vigilia casi constante durante décadas, y en la década de 1960 varias universidades británicas lanzaron expediciones de sonar al lago. No se encontró nada concluyente, pero en cada expedición los operadores del sonar detectaron algún tipo de objetos submarinos grandes y en movimiento. En 1975, otra expedición combinó el sonar y la fotografía submarina en el lago Ness. Resultó una foto que, después de la mejora, pareció mostrar lo que se parecía vagamente a la aleta gigante de un animal acuático.
Otras expediciones de sonar en las décadas de 1980 y 1990 dieron como resultado lecturas menos concluyentes. Las revelaciones en 1994 de que la famosa foto de 1934 era un completo engaño solo han reducido ligeramente el entusiasmo de los turistas e investigadores por la legendaria bestia del lago Ness.
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La leyenda moderna del Monstruo del Lago Ness nace cuando un avistamiento es noticia local el 2 de mayo de 1933. El periódico Inverness Courier relata la experiencia de una pareja local que afirma haber visto “un enorme animal rodando y sumergiéndose en el lago”. La historia del “monstruo Nessie” (un apodo elegido por el editor de Courier) se convierte en un fenómeno mediático, con los periódicos de Londres enviando corresponsales a Escocia y un circo ofreciendo una recompensa de 20.000 libras esterlinas por la captura de la bestia.
Después de que el periódico informara sobre el avistamiento de abril de 1933 el 2 de mayo, el interés creció constantemente, especialmente después de que otra pareja afirmó haber visto al animal en tierra.
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[/ezcol_1half_end]Los investigadores aficionados han mantenido una vigilia casi constante durante décadas, y en la década de 1960 varias universidades británicas lanzaron expediciones de sonar al lago. No se encontró nada concluyente, pero en cada expedición los operadores del sonar detectaron algún tipo de objetos submarinos grandes y en movimiento. En 1975, otra expedición combinó el sonar y la fotografía submarina en el lago Ness. Resultó una foto que, después de la mejora, pareció mostrar lo que se parecía vagamente a la aleta gigante de un animal acuático.
Otras expediciones de sonar en las décadas de 1980 y 1990 dieron como resultado lecturas menos concluyentes. Las revelaciones en 1994 de que la famosa foto de 1934 era un completo engaño solo han reducido ligeramente el entusiasmo de los turistas e investigadores por la legendaria bestia del lago Ness.
PrisioneroEnArgentina.com
Mayo 2, 2021