Ayer, en la puerta de entrada de Septiembre, el country donde vive Luis Abelardo Patti, se produjo un escrache y nuevas fotos han surgido. Las mismas muestran el problema detras del problema.
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El americanismo escrachar, vocablo que significa, entre otras cosas, “dejar en evidencia a alguien” y “golpear duramente a alguien”. El término escrache no aparece explícitamente dentro del Diccionario de la Real Academia Española, aunque sí que aparece el verbo escrachar como un coloquialismo argentino y uruguayo con dos acepciones, “fotografiar a una persona” y “romper, destruir, aplastar”.
El motivo del escrache no es solo para apuntar a la persona acusada de un crimen, sino también para influenciar en el vecindario donde mora. De acuerdo con ciertas reglas que estrictamente siguen los escrachadores, no es importante que la persona a escrachar se encuentre en su domicilio. De todas formas, no hay mucho que decirle a ese individuo y la confrontación cara a cara, considerada por algunos miembros del grupo convocante como un momento poderoso, no el tinte más valioso de la faena.
Por supuesto, el vecindario de la cual el escrachado es miembro es un protagonista apuntado y el verdadero receptor del escrache. Todo el trabajo y puesta en escena del grupo activo (Pancartas, representaciones teatrales, sonidos y lecturas de manifiestos, puede afectar de manera diferente en esa comunidad.
Por otro lado, estos escraches producen movilizaciones preventivas con el consiguiente gasto del presupuesto del Ministerio de Seguridad, pagado con el impuesto que tributan los trabajadores, además del consiguiente desplazamiento del personal que podría estar afectado a prevenir y resolver delitos comunes.
Ayer, en la puerta de entrada de Septiembre, el country donde vive Luis Abelardo Patti, se produjo un escrache y nuevas fotos han surgido. Las mismas muestran el problema detras del problema.
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El americanismo escrachar, vocablo que significa, entre otras cosas, “dejar en evidencia a alguien” y “golpear duramente a alguien”. El término escrache no aparece explícitamente dentro del Diccionario de la Real Academia Española, aunque sí que aparece el verbo escrachar como un coloquialismo argentino y uruguayo con dos acepciones, “fotografiar a una persona” y “romper, destruir, aplastar”.
El motivo del escrache no es solo para apuntar a la persona acusada de un crimen, sino también para influenciar en el vecindario donde mora. De acuerdo con ciertas reglas que estrictamente siguen los escrachadores, no es importante que la persona a escrachar se encuentre en su domicilio. De todas formas, no hay mucho que decirle a ese individuo y la confrontación cara a cara, considerada por algunos miembros del grupo convocante como un momento poderoso, no el tinte más valioso de la faena.
[ezcol_1half][/ezcol_1half] [ezcol_1half_end][/ezcol_1half_end]Por supuesto, el vecindario de la cual el escrachado es miembro es un protagonista apuntado y el verdadero receptor del escrache. Todo el trabajo y puesta en escena del grupo activo (Pancartas, representaciones teatrales, sonidos y lecturas de manifiestos, puede afectar de manera diferente en esa comunidad.
Por otro lado, estos escraches producen movilizaciones preventivas con el consiguiente gasto del presupuesto del Ministerio de Seguridad, pagado con el impuesto que tributan los trabajadores, además del consiguiente desplazamiento del personal que podría estar afectado a prevenir y resolver delitos comunes.
[/ezcol_2third_end]PrisioneroEnArgentina.com
Noviembre 9, 2017
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