Ayer en Bahía Blanca, con la lectura de las condenas finalizó un juicio más contra uniformados que lucharon, o no, contra el terrorismo que asoló y ensangrentó al país en los años 70. Había comenzado en octubre del 2016 con 39 imputados, pero por el fallecimiento o razones de salud, la cantidad se redujo a 31. A partir de las 17.45 h. el tribunal integrado por los jueces Jorge Ferro, José Mario Triputti y Martín Bava, como si fueran confites repartieron nada más y nada menos que 21 prisiones perpetuas. También una de 10 años, cinco de 9 años, una de 6 años, dos de 3 años y una absolución.
Permanentemente se refirieron a las “victimas” como PERSEGUIDOS POLÍTICOS. ¿Los que hoy atentan en Europa, sin el poder de fuego que tenían los vernáculos, también los definirían como tales? Con gran bonhomía e infringiendo la ley, permitieron aplausos, exhibición de letreros y emblemas. Al finalizar los togados con su “reparto”, estallaron los gritos e insultos por parte de los presentes.
Si se presta atención se podrá apreciar en el video, los rostros complacientes de los dos fiscales militantes Nebbia y Palazzani. Se comportan como verdaderos delincuentes, mientras se expresaban los energúmenos, de quien parecen ser cómplices.
NOEL, LONCÓN Y SALINAS, VERDADEROS POLICIAS DE HONOR
Entre los de mayor condena están los policías José Pedro Noel y Jesús Salinas, con quienes comparto las mismas imputaciones y a quienes conozco de hace más de medio siglo. Eso me llevó a considerarlos de siempre dos hombres de honor y un verdadero ejemplo de lo que debe ser el hombre policía. Por ello hoy, con más convicción que nunca, luego de sus vergonzantes e injustas condenas, ratifico lo expresado el 16 de diciembre de 2014. En esa oportunidad presté declaración ante la empleada contratada por la Secretaría de Derechos Humanos Susana Arrechea, luego de 18 días de detención y DIJE:
“Sobre Noel diré: se detuvo a un excelente ser humano que fue hijo de un comisario de Bahía Blanca, con quien presté servicio 2 años en mis primeros años como oficial. Noel siempre vivió en Bahía Blanca donde también fue director de la Biblioteca de General Daniel Cerri por casi -creo- 30 años. En dicho pueblo se trató la posibilidad de hacer una marcha de apoyo pero por temor, la hipocresía y la cobardía pudo más. Y esta no se llevó a cabo. Si bien el temor a los escraches llevados a cabo permanentemente hoy por algunas organizaciones, en algo los justifica. Destaco también que, por motivos que desconozco, Noel noblemente se opuso a la misma“.
De las numerosas virtudes de Loncón no diré nada ya que está más allá de esta “justicia terrenal”
“Con respecto a Salinas aparte de excelente ex policía y gran investigador de la época pasada, se detuvo al reconocido “Vigilante de la esquina” que vivió siempre en White. De él relataré dos anécdotas de las que me enteré casualmente en Bahía Blanca el día 11 o 14 de abril del 2012 en oportunidad de cenar en un restaurante muy próximo al Teatro Municipal. Atendido por una camarera de edad bastante mayor, conversando con ella, me mencionó que era de Ingeniero White. Por supuesto toqué el tema de la detención de un ciudadano de esa localidad de apellido Salinas. Esta persona me dijo “yo al negro Salinas lo conozco de joven. Cuando yo era muy jovencita y finalizaba mi trabajo en Bahía Blanca, llegaba tarde y luego de bajar del colectivo, debía circular caminando delante los bares y lugares de expansión nocturna, donde era molestada por personas, parroquianos alcoholizados, que SALINAS, que en esa época prestaría servicio en Ingeniero White, se bajaba de la garita y la acompañaba varias cuadras, con gran respeto hacia su persona, “rigoreaba” y advertía a los parroquianos que estaban en la vía pública. Esto lo repitió en varias oportunidades hasta que pudo circular sola por el lugar sin que nadie la molestara. La otra anécdota era que en esa pequeña localidad de White había un ebrio consuetudinario a quien SALINAS todas las noches en vez de llevar detenido a la dependencia policial lo arrastraba hasta su domicilio y lo encerraba para que no volviera a molestar en la vía pública. Así por largo tiempo, hasta que un día o una noche mejor dicho, éste ebrio se resistió a ingresar a la finca pese a lo cual SALINAS lo introdujo por la fuerza. Al día siguiente tomó conocimiento que la resistencia era porque el ebrio se había mudado del lugar que ya era ocupado por otra gente que se encontró con un intruso dentro de su domicilio. El nombrado ya retirado, entre 1989 y 1998 trabajó a la vista pública en el Banco Provincia y luego de igual forma en el Club Comercial. También diré que se trataba de un policía muy serio y que nunca mentía. Por su personalidad dudo que le hubieran ofrecido y mucho menos aún que se hubiera prestado a alguna maniobra ilegal de ningún tipo. Cualquiera de los tres en un secuestro de 10 kilos de dólares (lo que pesa 1.000.000 de dólares) como es moda reunir y mencionar ahora, estoy totalmente seguro no se hubieran quedado con ningún billete. Mucha gente de esta ciudad y la zona les debe mucho, a pesar que el egoísmo y el tiempo lo haya hecho olvidar“.
YO ME PREGUNTO
Pidiendo perdón a sus votantes, me pregunto: Esta es la justicia “independiente” que pondera el presidente Mauricio Macri? ¿Estos fiscales militantes como Nebbia y Palazzani, a quienes tantas veces pedí que me interrogaran y nunca aparecieron, son los que a la distancia disponen la vida y la muerte nuestra? ¿Esta es la nación que tanta gente quiere mientras a nosotros nos condenan porque sí? ¿En donde funcionarios sanos y dignos como Noel y Salinas son estigmatizados?
Una nación donde intocables personajes como Isabel Martínez, Carlos Ruckauf, o numerosos empresarios, sindicalistas, uniformados, clérigos, miembros del poder judicial y político, verdaderos partícipes y responsables del horror del pasado siguen libres. Ellos gozan de una libertad impropia y prebendas, al igual que los terroristas devenidos en juventud idealista, mientras nosotros tenemos que morir por ellos. Por todo esto y mucho mas, yo no quiero a esta nación.
Por Claudio Kussman.
COMO SI REPARTIERAN “CONFITES”
Ayer en Bahía Blanca, con la lectura de las condenas finalizó un juicio más contra uniformados que lucharon, o no, contra el terrorismo que asoló y ensangrentó al país en los años 70. Había comenzado en octubre del 2016 con 39 imputados, pero por el fallecimiento o razones de salud, la cantidad se redujo a 31. A partir de las 17.45 h. el tribunal integrado por los jueces Jorge Ferro, José Mario Triputti y Martín Bava, como si fueran confites repartieron nada más y nada menos que 21 prisiones perpetuas. También una de 10 años, cinco de 9 años, una de 6 años, dos de 3 años y una absolución.
Permanentemente se refirieron a las “victimas” como PERSEGUIDOS POLÍTICOS. ¿Los que hoy atentan en Europa, sin el poder de fuego que tenían los vernáculos, también los definirían como tales? Con gran bonhomía e infringiendo la ley, permitieron aplausos, exhibición de letreros y emblemas. Al finalizar los togados con su “reparto”, estallaron los gritos e insultos por parte de los presentes.
[ezcol_1quarter][/ezcol_1quarter] [ezcol_1quarter][/ezcol_1quarter] [ezcol_1half_end][/ezcol_1half_end]Si se presta atención se podrá apreciar en el video, los rostros complacientes de los dos fiscales militantes Nebbia y Palazzani. Se comportan como verdaderos delincuentes, mientras se expresaban los energúmenos, de quien parecen ser cómplices.
NOEL, LONCÓN Y SALINAS, VERDADEROS POLICIAS DE HONOR
Entre los de mayor condena están los policías José Pedro Noel y Jesús Salinas, con quienes comparto las mismas imputaciones y a quienes conozco de hace más de medio siglo. Eso me llevó a considerarlos de siempre dos hombres de honor y un verdadero ejemplo de lo que debe ser el hombre policía. Por ello hoy, con más convicción que nunca, luego de sus vergonzantes e injustas condenas, ratifico lo expresado el 16 de diciembre de 2014. En esa oportunidad presté declaración ante la empleada contratada por la Secretaría de Derechos Humanos Susana Arrechea, luego de 18 días de detención y DIJE:
“Sobre Noel diré: se detuvo a un excelente ser humano que fue hijo de un comisario de Bahía Blanca, con quien presté servicio 2 años en mis primeros años como oficial. Noel siempre vivió en Bahía Blanca donde también fue director de la Biblioteca de General Daniel Cerri por casi -creo- 30 años. En dicho pueblo se trató la posibilidad de hacer una marcha de apoyo pero por temor, la hipocresía y la cobardía pudo más. Y esta no se llevó a cabo. Si bien el temor a los escraches llevados a cabo permanentemente hoy por algunas organizaciones, en algo los justifica. Destaco también que, por motivos que desconozco, Noel noblemente se opuso a la misma“.
De las numerosas virtudes de Loncón no diré nada ya que está más allá de esta “justicia terrenal”
“Con respecto a Salinas aparte de excelente ex policía y gran investigador de la época pasada, se detuvo al reconocido “Vigilante de la esquina” que vivió siempre en White. De él relataré dos anécdotas de las que me enteré casualmente en Bahía Blanca el día 11 o 14 de abril del 2012 en oportunidad de cenar en un restaurante muy próximo al Teatro Municipal. Atendido por una camarera de edad bastante mayor, conversando con ella, me mencionó que era de Ingeniero White. Por supuesto toqué el tema de la detención de un ciudadano de esa localidad de apellido Salinas. Esta persona me dijo “yo al negro Salinas lo conozco de joven. Cuando yo era muy jovencita y finalizaba mi trabajo en Bahía Blanca, llegaba tarde y luego de bajar del colectivo, debía circular caminando delante los bares y lugares de expansión nocturna, donde era molestada por personas, parroquianos alcoholizados, que SALINAS, que en esa época prestaría servicio en Ingeniero White, se bajaba de la garita y la acompañaba varias cuadras, con gran respeto hacia su persona, “rigoreaba” y advertía a los parroquianos que estaban en la vía pública. Esto lo repitió en varias oportunidades hasta que pudo circular sola por el lugar sin que nadie la molestara. La otra anécdota era que en esa pequeña localidad de White había un ebrio consuetudinario a quien SALINAS todas las noches en vez de llevar detenido a la dependencia policial lo arrastraba hasta su domicilio y lo encerraba para que no volviera a molestar en la vía pública. Así por largo tiempo, hasta que un día o una noche mejor dicho, éste ebrio se resistió a ingresar a la finca pese a lo cual SALINAS lo introdujo por la fuerza. Al día siguiente tomó conocimiento que la resistencia era porque el ebrio se había mudado del lugar que ya era ocupado por otra gente que se encontró con un intruso dentro de su domicilio. El nombrado ya retirado, entre 1989 y 1998 trabajó a la vista pública en el Banco Provincia y luego de igual forma en el Club Comercial. También diré que se trataba de un policía muy serio y que nunca mentía. Por su personalidad dudo que le hubieran ofrecido y mucho menos aún que se hubiera prestado a alguna maniobra ilegal de ningún tipo. Cualquiera de los tres en un secuestro de 10 kilos de dólares (lo que pesa 1.000.000 de dólares) como es moda reunir y mencionar ahora, estoy totalmente seguro no se hubieran quedado con ningún billete. Mucha gente de esta ciudad y la zona les debe mucho, a pesar que el egoísmo y el tiempo lo haya hecho olvidar“.
YO ME PREGUNTO
Pidiendo perdón a sus votantes, me pregunto: Esta es la justicia “independiente” que pondera el presidente Mauricio Macri? ¿Estos fiscales militantes como Nebbia y Palazzani, a quienes tantas veces pedí que me interrogaran y nunca aparecieron, son los que a la distancia disponen la vida y la muerte nuestra? ¿Esta es la nación que tanta gente quiere mientras a nosotros nos condenan porque sí? ¿En donde funcionarios sanos y dignos como Noel y Salinas son estigmatizados?
Una nación donde intocables personajes como Isabel Martínez, Carlos Ruckauf, o numerosos empresarios, sindicalistas, uniformados, clérigos, miembros del poder judicial y político, verdaderos partícipes y responsables del horror del pasado siguen libres. Ellos gozan de una libertad impropia y prebendas, al igual que los terroristas devenidos en juventud idealista, mientras nosotros tenemos que morir por ellos. Por todo esto y mucho mas, yo no quiero a esta nación.
Claudio Kussman
www.PrisioneroEnArgentina.com
Claudio@PrisioneroEnArgentina.com
@PrisioneroA
Octubre 03, 2017
Tags: Claudio Kussman, Fiscal Luis Nebbia, Fiscal Miguel Palazzani, Jesús Salinas, Jorge Ferro, Mario Triputti, Martín Bava, Pedro Noel
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