La aerolínea se expresó tres años después del incidente en el que varias mujeres fueron forzadas a una revisión médica tras hallar a un recién nacido en un bote de basura del aeropuerto de Doha.
El vicepresidente de Qatar Airways, Matt Raos, afirmó este miércoles en una audiencia con el Senado australiano que no se repetirá el incidente en el que años atrás varias pasajeras fueron sometidas a exámenes ginecológicos invasivos en el aeropuerto internacional de Doha (Catar).
El escándalo se produjo tras el hallazgo de un bebé recién nacido abandonado en un bote de basura en la terminal aérea de la capital del país árabe el 2 de octubre de 2020.
Aquel día los agentes de seguridad del aeropuerto de Doha hicieron bajar del avión a pasajeras de un vuelo con destino a Sidney, obligándolas a realizarse exámenes para determinar si alguna de ellas acaba de dar a luz.
Hace tres semanas, la ministra de Transporte australiana, Catherine King, señaló que el incidente de 2020 fue un factor que influyó en la decisión del pasado julio para denegar a la aerolínea, propiedad del Gobierno de Catar, vuelos adicionales a Australia.
Raos describió el escándalo como “un incidente único”y “muy extremo”. “No hemos tenido nada parecido anteriormente en nuestra historia y estamos completamente comprometidos a garantizar que nada como esto vuelva a suceder”, aseguró el directivo dirigiéndose al senador Tony Sheldon, quien había demandado esa garantía en nombre de las pasajeras que temían ser sometidas a tales procedimientos.
Asimismo, se informa que cinco de las mujeres forzadas a realizarse exámenes hace tres años han demandado a la aerolínea en el Tribunal Federal de Australia.
“El resultado de ese caso en la Corte Federal es algo que honraremos y respetaremos”, comentó Raos.
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El vicepresidente de Qatar Airways, Matt Raos, afirmó este miércoles en una audiencia con el Senado australiano que no se repetirá el incidente en el que años atrás varias pasajeras fueron sometidas a exámenes ginecológicos invasivos en el aeropuerto internacional de Doha (Catar).
El escándalo se produjo tras el hallazgo de un bebé recién nacido abandonado en un bote de basura en la terminal aérea de la capital del país árabe el 2 de octubre de 2020.
Aquel día los agentes de seguridad del aeropuerto de Doha hicieron bajar del avión a pasajeras de un vuelo con destino a Sidney, obligándolas a realizarse exámenes para determinar si alguna de ellas acaba de dar a luz.
Hace tres semanas, la ministra de Transporte australiana, Catherine King, señaló que el incidente de 2020 fue un factor que influyó en la decisión del pasado julio para denegar a la aerolínea, propiedad del Gobierno de Catar, vuelos adicionales a Australia.
Raos describió el escándalo como “un incidente único”y “muy extremo”. “No hemos tenido nada parecido anteriormente en nuestra historia y estamos completamente comprometidos a garantizar que nada como esto vuelva a suceder”, aseguró el directivo dirigiéndose al senador Tony Sheldon, quien había demandado esa garantía en nombre de las pasajeras que temían ser sometidas a tales procedimientos.
Asimismo, se informa que cinco de las mujeres forzadas a realizarse exámenes hace tres años han demandado a la aerolínea en el Tribunal Federal de Australia.
“El resultado de ese caso en la Corte Federal es algo que honraremos y respetaremos”, comentó Raos.
PrisioneroEnArgentina.com
Octubre 6, 2023