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  Por Claudia Besone.

En marzo del año 2005, en Santa Cruz, California, un joven llamado Eddie tuvo un encuentro demoníaco. Después de regresar de su trabajo, Eddie estaba cansado y agotado, pero todavía tenía mucha tarea laboral atrasada que hacer. Trabajó hasta altas horas de la noche, antes de finalmente colapsar en la cama. Se quedó dormido al instante, pero no durmió profundamente. Soñó que un ser maligno estaba en su casa y estaba tratando de entrar a su habitación. Finalmente irrumpió, y tan pronto como lo hizo, Eddie se despertó con un zumbido en los oídos. Eddie sintió al demonio; estaba en la pared detrás de su cabeza, sujetando las extremidades de Eddie hacia abajo. Tenía algo en sus oídos, y su oreja izquierda comenzó a vibrar violentamente. La extraña sensación también se extendió a su oído derecho. Estaba inmóvil. Como atado sin cuerdas. Luchó, pero no pudo liberarse. Maldijo al ser y el demonio solo se rió de él, un sonido espeluznante y horrible que no era ni profundo ni agudo. El demonio gritó y soltó a Eddie. Este se incorporó rápidamente, saltando de la cama para encender las luces. Pero cuando la luz inundó su dormitorio, no había nada fuera de lo común. Sus gatos dormían placidamente. El Tv apagado. Los muebles en orden.

Si alguna vez pensó que estaba siendo secuestrado por un extraterrestre o, si tiene 400 años, fue seducido por un súcubo y no podía moverse, no está solo. El 7,6% de la población ha tenido la misma experiencia y se llama parálisis del sueño. Los psicólogos definen la parálisis del sueño como “un período discreto de tiempo durante el cual se inhibe el movimiento de los músculos voluntarios, pero los movimientos oculares y respiratorios están intactos” y, a menudo, implica alucinaciones.

Examinaron 35 estudios publicados, que consistían en encuestas de los últimos 50 años, un total de 36,533 personas. Descubrieron que la parálisis del sueño era más común en estudiantes y pacientes psiquiátricos. El 31,9% de los pacientes psiquiátricos y el 28,3% de los estudiantes autoinformaron al menos un episodio de este tipo de parálisis del sueño. Algunas personas encuestadas dijeron que tienen episodios todas las noches. La parálisis del sueño fue más común en los no caucásicos.

Los encuestados afirmaron haber tenido tres tipos básicos de alucinaciones durante la parálisis del sueño; presencia de un intruso, presión en el pecho a veces acompañada de agresión física y/o sexual y levitación o experiencias extracorporales. No siempre fue algo malo, aunque algunas personas afirmaron que tenían miedo de irse a dormir debido a ellos. Algunos informan que la alucinación de la parálisis del sueño es bastante positiva.

Los psicólogos dicen que creen que los juicios de brujas de Salem, cuando 200 personas fueron acusadas de brujería en el Massachusetts colonial entre 1692 y 1693, podrían haber involucrado a gente del pueblo experimentando parálisis del sueño en lugar de ser solo fanáticos religiosos, o tal vez las brujas solo les hicieron pensar eso.

 

Con 22 años de experiencia profesional en la industria de la televisión como escritora profesional de propuestas, productora y ejecutiva de desarrollo, Claudia Besone es una respetada imágen para el ambiente documental. Ha producido series de televisión originales para Vault tv y Marvelous Entertainment.

 


PrisioneroEnArgentina.com

Febrero 8, 2022


 

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