Niños se encuentran entre las 22 personas que murieron en un ataque suicida después de un concierto de Ariana Grande en el Manchester Arena de Gran Bretaña, informó la policía el martes. Rose Roussos, de ocho años, pereció en el instante de la explosión. Funcionarios dijeron que otras 59 personas resultaron heridas, entre ellas algunas que sufrieron heridas que ponían y ponen en peligro sus vidas.
El agresor también murió cuando detonó un dispositivo explosivo improvisado cerca de una de las salidas de la sede del Manchester Arena a las 10:33 p.m. hora local (5:33 p.m. ET) el lunes, según las autoridades.
ISIS reclamó como suya la responsabilidad del ataque, pero hasta ahora no hay un indicio real de la veracidad de esta afirmación. un hombre de 23 años de edad fue arrestado en Manchester en relación con el ataque, aunque no es preciso saber en que condición de sospecha o situación legal se encuentra.
La explosión provocó una búsqueda nocturna de seres queridos por parte de padres frenéticos que trataban de localizar a sus hijos, y grupos de amigos dispersos por la explosión se buscaban unos a otros.
El ataque se produjo en el Manchester Arena de la localidad inglesa donde se presentaba la cantante americana Ariana Grande. La base de los admiradores de la estrella del pop es principalmente de niñas y adolescentes, por lo que el lugar estaba repleto de familias. En el sitio oficial de la interprete aún no se refleja noticia sobre este atentado y no se han cancelado ninguno de los 35 conciertos programados, incluyendo su presentación en Buenos Aires, el 5 de julio.
Ataques en ciudades como París, Niza, Bruselas, San Petersburgo, Berlín y Londres han conmocionado a los europeos ya ansiosos por los desafíos de seguridad de la inmigración masiva y los bolsillos del radicalismo islámico nacional. El Estado islámico ha pedido reiteradamente que los ataques sean represalias por la participación de Occidente en los conflictos en Siria e Irak.
Testigos relataron el horror de la explosión de Manchester, que desencadenó una estampida justo cuando el concierto terminó en el estadio más grande de Europa, con capacidad para 21.000 espectadores.
“Corrimos y la gente estaba gritando alrededor de nosotros y empujando en las escaleras para salir a la calle y la gente se caía, las chicas estaban llorando, y vimos a estas mujeres siendo tratadas por paramédicos con heridas abiertas en sus piernas … era un caos, “Dijo Sebastian Díaz, de 19 años.” Fue literalmente sólo un minuto después de que terminó, las luces se encendieron y la bomba se disparó. “
Una fuente con conocimiento de la situación dijo que los explosivos del bombardero estaban llenos de metales, tuercas y pernos.
Atentado en Manchester
Niños se encuentran entre las 22 personas que murieron en un ataque suicida después de un concierto de Ariana Grande en el Manchester Arena de Gran Bretaña, informó la policía el martes. Rose Roussos, de ocho años, pereció en el instante de la explosión. Funcionarios dijeron que otras 59 personas resultaron heridas, entre
ellas algunas que sufrieron heridas que ponían y ponen en peligro sus vidas.
El agresor también murió cuando detonó un dispositivo explosivo improvisado cerca de una de las salidas de la sede del Manchester Arena a las 10:33 p.m. hora local (5:33 p.m. ET) el lunes, según las autoridades.
ISIS reclamó como suya la responsabilidad del ataque, pero hasta ahora no hay un indicio real de la veracidad de esta afirmación. un hombre de 23 años de edad fue arrestado en Manchester en relación con el ataque, aunque no es preciso saber en que condición de sospecha o situación legal se encuentra.
La explosión provocó una búsqueda nocturna de seres queridos por parte de padres frenéticos que trataban de localizar a sus hijos, y grupos de amigos dispersos por la explosión se buscaban unos a otros.
El ataque se produjo en el Manchester Arena de la localidad inglesa donde se presentaba la cantante americana Ariana Grande. La base de los admiradores de la estrella del pop es principalmente de niñas y adolescentes, por lo que el lugar estaba repleto de familias. En el sitio oficial de la interprete aún no se refleja noticia sobre este atentado y no se han cancelado ninguno de los 35 conciertos programados, incluyendo su presentación en Buenos Aires, el 5 de julio.
Testigos relataron el horror de la explosión de Manchester, que desencadenó una estampida justo cuando el concierto terminó en el estadio más grande de Europa, con capacidad para 21.000 espectadores.
“Corrimos y la gente estaba gritando alrededor de nosotros y empujando en las escaleras para salir a la calle y la gente se caía, las chicas estaban llorando, y vimos a estas mujeres siendo tratadas por paramédicos con heridas abiertas en sus piernas … era un caos, “Dijo Sebastian Díaz, de 19 años.” Fue literalmente sólo un minuto después de que terminó, las luces se encendieron y la bomba se disparó. “
Una fuente con conocimiento de la situación dijo que los explosivos del bombardero estaban llenos de metales, tuercas y pernos.
PrisioneroEnArgentina.com
Mayo 23, 2017