BODARENKO | Prisionero en Argentina

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Por Claudio Kussman.

A lo largo de una década como imputado por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad, más allá de la perdida de la libertad, de la iniquidad y reiterados abusos políticos judiciales, hay algo más que juntamente con el sacrificio de la familia, resulta verdaderamente devastador. Es el monumental hijoputismo de no pocos uniformados que por rastreras conveniencias personales se han abrazado y hermanado con terroristas asesinos de nuestra propia gente, como así también indiscriminadamente de hombres, mujeres, y niños. Por supuesto también lo ha hecho la sociedad en general, esa que un día pidió a gritos para que se aniquilara el terror que asolaba al país y con el tiempo aplaudieron a los asesinos sobrevivientes. Ocurrió cuando estos, generosa e injustamente indemnizados pasaron a ocupar cargos gubernamentales y frecuentemente aparecieron en los medios dando clases de camaleónica “moral, patriotismo, y armonía democrática”. Refiriéndome a los uniformados, en horas recientes hizo su irrupción en el privilegiado estrellato político un desconocido llamado MAXIMILIANO BONDARENKO, primer candidato a diputado bonaerense de La Libertad Avanza (LLA) en la ambicionada Tercera Sección Electoral, bastión del peronista por excelencia, en los comicios del 7 de septiembre próximo. Este resultó ser un ex Comisario Inspector de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y en consecuencia “camarada mío”, si bien afortunadamente, no nos conocemos por pertenecer a diferentes generaciones dentro de la institución. Reconozco que, el verlo al borde de las lágrimas abrazado a la terrorista PATRICIA BULLRICH, Ministra de Seguridad de la Nación me produjo un gran rechazo y pronuncié una palabra soez, recordando a tantas víctimas de las organizaciones terroristas, a una de las cuales perteneció esta señora. Su aparición se produce en medio de una descarnada confrontación política que llevó a la separación de veinticuatro efectivos policiales de sus cargos por una presunta conspiración, entre este personaje y personal en actividad. Vale acotar que no es verdad que se traten todos de altos jefes como se ha dicho. Esto se puede constatar en la copia de la resolución del 23 de julio pasado que se adjunta. Allí ocho son oficiales con jerarquías menores. Asimismo escándalos y sospechas conspirativas policiales similares se han producido anteriormente cuando llegaban tiempos de cambios gubernamentales. Es más, esto ha ocurrido, tambien cuando en el gobierno estaban los militares. La gran diferencia es que el castigo se zanjaba con traslados de efectivos a lejanas zonas rurales, de donde regresaban cuando volvía a haber nuevos cambios. En esta ocasión en el intercambio de verdades y mentiras entre políticos, como siempre quedaron al medio y pagaron los uniformados. Al referirme a los políticos lo incluyo a BODARENKO ya que en la policía tuvo múltiples licencias especiales, durante años, para dedicarse de pleno a esa actividad. Por ejemplo, en el 2015, para desempeñarse en el Registro Nacional de las Personas (Renaper), gracias a sus vínculos con el PRO. Entre los años 2016 y 2021 cuando ocupara una banca de concejal en Florencio Varela. En 2021 aliado a la UCR de Facundo Manes, enfrentando sin éxito a DIEGO SANTILLI en la interna de Juntos por el Cambio. Finalmente pegó otro “saltito ventajero” y el 10 de abril de 2025, como libertario presentó su baja voluntaria, y entonces su discurso se volcó a destacar soluciones para contrarrestar a la inseguridad imperante en el conurbano. En su paso por la policía ocupó pocos destinos “calientes”, a pesar de lo cual registra 3 arrestos por incumplimiento del deber, una amonestación por impuntualidad, 15 días de suspensión en un sumario administrativo por abandonar el servicio por más de setenta y dos (72) horas, sin causa justificada (infracción al artículo 198 del Decreto 1050/09). Además, en el 2010 estuvo involucrado en un sumario por presunto hurto de automotor, el cual fue archivado por falta de pruebas. A todo esto, destaco la hipocresía de BULLRICH, cuando hace pocas horas haciendo campaña y defendiendo a BONDARENKO se refiriera al Gobernador bonaerense AXEL KICILLOF manifestando: “Además de ser un inútil, es una persona que odia a la Policía y que está del lado de los delincuentes. Esa es mi lectura del hecho. Echar a 24 policías porque comparten amistad con un candidato… Ellos (por Fuerza Patria) no son capaces de poner a un policía como candidato”. Primeramente, es verdad que “El soviético”, como le dice MILEI a KICILLOF, al igual que el resto de la casta política, y parte de la sociedad, no quiere a la policía, en cuyo caso vale preguntarle a la ministra si ella sí la quiere. De ser así, ¿Por qué la tiene tan mal paga? y más aún ¿por qué la utiliza para reprimir jubilados, lo cual da un espectáculo cobarde e institucionalmente denigrante? Acá una vez más se da aquello de “haz lo que yo digo pero no lo que yo hago”, tan repetitivo en nuestra clase política, a la que ni Dios ni la Patria se lo reclaman.