Actualmente, en Argentina, más de 3000 prisioneros políticos, con sus respectivas familias son víctimas de la violación de los derechos humanos por parte de la justicia, con la complicidad del gobierno, de las mal llamadas asociaciones de derechos humanos y de otros militantes oportunistas. Esos hombres y mujeres, mayores de 70 aňos, enfermos, con prisiones preventivas ilimitadas, con detenciones domiciliarias condicionales, se atacan sus domicilios, no tienen los mismos derechos que los presos comunes. Mueren en silencio social, institucional y familiar. No es un secreto para nadie que no quiera saber.
Esos ex agentes del Estado, magistrados, sacerdotes, abogados, académicos, médicos, profesionales…que desde sus funciones, en los aňos 70, protegieron las instituciones del Estado y la sociedad, de los ataques de grupos terroristas, hoy son ilegalmente juzgados y condenados en nombre de una justicia de venganza y odio. Son condenados en un ficticio e ilegal proceso judicial. Los miembros de los grupos terroristas son indemnizados y declarados inocentes de todos los delitos y crimines cometidos.
Los autores de esas violaciones de los derechos humanos, principios constitucionales y convencionales a los Prisionerpos Políticos , son conocidos, actúan impunemente, públicamente, protegidos por un sistema corrupto y de inseguridad jurídica. Esos delincuentes a quienes la justicia todavía no los juzgó, son : Magistrados, jueces, altos funcionarios, oficiales de las fuerzas armadas, seguridad, policiales, penitenciarios, parlamentarios, funcionarios nacionales, provinciales, municipales, miembros de organizaciones ilegales de derechos humanos, militantes disfrazados de periodistas, académicos, artistas, profesionales….Los unos dicen obedecer ordenes, los otros argumentan principios jurídicos inexistentes.
Pero como todo tiene su tiempo de vida, el momento llegará que deberán responder ante una justicia parcial, objetiva y justa.
Ninguno de los que hoy violan los Derechos Humanos a los Prisioneros Políticos en Argentina podrá argumentar que ignoraban lo que hacían, el porque o a quienes. Actúan como agentes de persecución, se presentan como defensores de los humanos pero violan esos derechos a numerosas personas por venganza, odio y sobretodo por beneficios económicos. Tampoco ignoran que ningún país respectuoso del Estado de derecho, utiliza el « modelo de justicia argentina ». Con un relato, una ucronia engaňan la sociedad nacional y la comunidad internacional.
En la última reunión que tuvo el gobierno con más de 50 embajadares acreditados en el pais https://www.argentina.gob.ar/noticias/pena-se-reunio-con-50-embajadores-extranjeros el jefe de gabinete o el ministro de relaciones exteriores, presentaron a los representantes diplomáticos, el modelo de política de derechos humanos que utilizan con un sector particular de la sociedad. Comunicaron que continuarán en esa dirección (es decir violar los derechos humanos a numerosas personas) e invitaron a la comunidad internacional (representada en esa asamblea) a adherir y poner en prácticas principios de excepción, la suspensión de garantías, la irretroactividad penal, la responsabilidad penal colectiva, analogía penal, no respeto de la amnistía y otros pilares que violen las garantias del debido proceso, la seguridad juridica, los principios de legalidad…. en sus respectivas instituciones judiciales para defender los derechos humanos. https://mobile.twitter.com/JorgeFaurie/status/1115600929527492608 ¿O los países presentes en esa reunión violan los derechos humanos pero la Argentina no quiere denunciarlos ?
Pronto, donde vayan también los iremos a buscar, parar llevarlos ante la justicia nacional o universal, porque a esos individuos sí se les podrá aplicar el estatus de la CPI y las convenciones respectivas, sin violar sus derechos humanos, leyes y garantias procesales como actualmente se realiza con los Prisioneros Políticos. Ya no podrán cubrirse detrás de un asilo político o la persecución de una dictadura por haber simplemente distribuido un panfleto, luchar contra ella o querer un mundo mejor. Esperando ese día, será nuestra forma de resistir[1]. Paris, 15 abril 2019. CasppaFrance.
EL USO EXCESIVO DE LA PRISIÓN PREVENTIVA CONSTITUYE UNO DE LOS SIGNOS MÁS EVIDENTES DEL FRACASO DEL SISTEMA DE ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA, Y ES UN PROBLEMA ESTRUCTURAL INACEPTABLE EN UNA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA QUE RESPETA EL DERECHO DE TODA PERSONA A LA PRESUNCIÓN DE INOCENCIA, DESTACÓ UN RECIENTE INFORME DE LA COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS (CIDH).
El documento, fue emitido por la CIDH, de julio de este año, y se titula “Informe sobre medidas dirigidas a reducir el uso de la prisión preventiva en las Américas”.
En ese documento, destaca que “la aplicación arbitraria e ilegal de la prisión preventiva es un problema crónico en la región”, e hicieron un llamado a tomar en cuenta que la prisión preventiva debe partir de la consideración al derecho a la presunción de inocencia y tener en cuenta la naturaleza excepcional de esta medida; igualmente, debe aplicarse de conformidad con los criterios de legalidad, necesidad y proporcionalidad.
El uso no excepcional de la detención preventiva, es uno de los problemas más graves y extendidos que enfrentan los Estados miembros de la Organización de los Estados Americanos (OEA), señala el documento.
Por otra parte, en Panamá, activistas por los derechos humanos, sectores políticos opositores al gobierno de Juan Carlos Varela, y abogados litigantes han denunciando un abuso en las medidas cautelares de detención preventiva, las que han recaído principalmente en figuras a las que se le siguen procesos en caso de alto perfil.
Los mismos abogados y activistas locales señalan que cifras de la Dirección General del Sistema Penitenciario de Panamá, dan cuenta que para julio de 2017, había en las cárceles del país 8947 personas, las cuales estaban detenidas preventivamente, es decir sin tener condena en firma y ejecutoriada, cifra que constituye el 55% del total de los presos.
La detención preventiva, por largo tiempo, en condiciones de hacinamiento, constituye una violación al derecho que tiene toda persona, a recibir cumplida justicia en tiempo oportuno, consagrado en la Convención Interamericana de Derechos Humanos, de la cual Panamá es signataria.
En realidad, mi primera preocupación es hacer entender que los derechos humanos, constituyen un problema abierto.
¿Qué quiere decir esto? Que el tema no está agotado, ni se ha encontrado un listado definitivo que es válido hasta el fin del mundo. Hay muchos, que lo consideran un tema terminado. Y yo pecaminosamente diría que recién estamos comenzando. Hay un largo caminar que quizás lo mediremos en un futuro de siglos.
Pero a la vez, hay que reconocer que, gracias a los esfuerzos realizados durante la segunda mitad del siglo XX, se ha tomado conciencia de la existencia de los derechos humanos y se ha concretado una enumeración de ellos de inapreciable valor.
Para mejor se ha logrado concretar en acuerdos planetarios, y en documentos que no son nada despreciables.
Por lo tanto, destaco que hasta ahora hay una enumeración de derechos humanos que hay que valorar y asegurar su cumplimiento.
Como es costumbre en el mundo político, muchas personas que se declararon defensores de los derechos humanos, tienen en sus curriculums antecedentes terroristas, así como de corrupción; que los utilizan para encontrar beneficios políticos espurios.
Esto ha llevado a mucha gente a cuestionar la validez de los derechos humanos desvalorizando su valor, por el hecho de ser usados por violadores de esos mismos derechos.
Creo que esta confusión en muchos casos simplista y es también aprovechado por quienes desconocen la vigencia de los mismos, por conductas también violatorias, en función de intereses ajenos al respeto del ser humano.
Reivindico la vigencia de los derechos humanos, sin dejar de pensar que deben constantemente ser estudiados en busca de nuevos fundamentos que los revaliden constantemente.
Pero hay una reflexión sobre lo que se convierte un negocio de los derechos humanos.
La existencia de los derechos humanos vigentes a la fecha, impone el deber de cada uno, de respetar con su propia conducta los derechos de los demás. Lo más importante es no ser un cazador de brujas que busca quienes los violan. El tema es como “yo” cumplo respetando los derechos humanos de los demás.
En un plano ideal, si todos asumen que es deber de cada uno es cumplir con los derechos humanos, en todo momento y lugar, seguramente no habría violaciones a los mismos. Ni se daría pie a los que viven estos derechos como un negocio.
Ni tampoco permitiría que fueran ignorados en su contenido, porque como todos tenemos el deber de cumplir con ellos cuando tratamos con los demás, tenemos que conocerlos.
Hay numerosos documentos donde se encuentran enumerados los derechos humanos, desde las Naciones Unidas y las organizaciones internacionales regionales. Aún así, debo destacar que un documento que no puede ser eludido es “Pacem in terris” última encíclica de Juan XXIII, escrita para todas las personas de buena voluntad.
Estoy seguro, que el estudio de estos documentos que debemos leer responsablemente, permitirá asegurar los derechos humanos de los demás. Y esto se hace no empleando palabras de “barricada”, sino cuidando la propia conducta.
Soy reiterativo en este trabajo, para que se entienda lo que no se quiere ver. ¿Defendés los derechos humanos? Cumplilos celosamente.
CARLOS ANTONIO ESPAÑADERO es un oficial jefe retirado del Ejército Argentino con gran intelectualidad y una mente privilegiada que goza de máxima lucidez. Es padre de seis hijos y abuelo de cuatro nietas, y lo destacable: Tiene 84 jóvenes años de edad a pesar de lo cual, ocupa una celda en el Pabellón 8 de esta misma prisión. Ha escrito y publicado dos libros: EL PROBLEMA DEL TERRORISMO (2008) y LA SEGURIDAD PÚBLICA (2009) Al día de hoy, se encuentra completando un tercero titulado: LA TRAGEDIA TERRORISTA ARGENTINA. Con él, todos los días nos reunimos en horas de la tarde intercambiando comentarios y pareceres de todo tipo. Preponderantemente de Geopolítica e Historia Contemporánea. Bien, esto es un decir, casi se podría expresar que me brinda clases sobre los mencionados tópicos. El tratarle es un placer ya que enriquece el conocimiento teniéndose en cuenta su condiciones didácticas. Fue profesor durante largos años de Geopolítica en la Universidad Nacional de Mar del Plata, en el Consejo Superior de Educación Católica (CONSUDEC) de Buenos Aires, en la Escuela Superior de Policía de la Provincia de Buenos Aires en la ciudad de La Plata, en la Academia de Estudios Penitenciarios en la ciudad de Buenos Aires y también en la Escuela de Inteligencia de la Fuerza Aérea.
Donde vayan los iremos a buscar. Nosotros también.
Actualmente, en Argentina, más de 3000 prisioneros políticos, con sus respectivas familias son víctimas de la violación de los derechos humanos por parte de la justicia, con la complicidad del gobierno, de las mal llamadas asociaciones de derechos humanos y de otros militantes oportunistas. Esos hombres y mujeres, mayores de 70 aňos, enfermos, con prisiones preventivas ilimitadas, con detenciones domiciliarias condicionales, se atacan sus domicilios, no tienen los mismos derechos que los presos comunes. Mueren en silencio social, institucional y familiar. No es un secreto para nadie que no quiera saber.
Esos ex agentes del Estado, magistrados, sacerdotes, abogados, académicos, médicos, profesionales…que desde sus funciones, en los aňos 70, protegieron las instituciones del Estado y la sociedad, de los ataques de grupos terroristas, hoy son ilegalmente juzgados y condenados en nombre de una justicia de venganza y odio. Son condenados en un ficticio e ilegal proceso judicial. Los miembros de los grupos terroristas son indemnizados y declarados inocentes de todos los delitos y crimines cometidos.
Los autores de esas violaciones de los derechos humanos, principios constitucionales y convencionales a los Prisionerpos Políticos , son conocidos, actúan impunemente, públicamente, protegidos por un sistema corrupto y de inseguridad jurídica. Esos delincuentes a quienes la justicia todavía no los juzgó, son : Magistrados, jueces, altos funcionarios, oficiales de las fuerzas armadas, seguridad, policiales, penitenciarios, parlamentarios, funcionarios nacionales, provinciales, municipales, miembros de organizaciones ilegales de derechos humanos, militantes disfrazados de periodistas, académicos, artistas, profesionales….Los unos dicen obedecer ordenes, los otros argumentan principios jurídicos inexistentes.
Pero como todo tiene su tiempo de vida, el momento llegará que deberán responder ante una justicia parcial, objetiva y justa.
Ninguno de los que hoy violan los Derechos Humanos a los Prisioneros Políticos en Argentina podrá argumentar que ignoraban lo que hacían, el porque o a quienes. Actúan como agentes de persecución, se presentan como defensores de los humanos pero violan esos derechos a numerosas personas por venganza, odio y sobretodo por beneficios económicos. Tampoco ignoran que ningún país respectuoso del Estado de derecho, utiliza el « modelo de justicia argentina ». Con un relato, una ucronia engaňan la sociedad nacional y la comunidad internacional.
En la última reunión que tuvo el gobierno con más de 50 embajadares acreditados en el pais https://www.argentina.gob.ar/noticias/pena-se-reunio-con-50-embajadores-extranjeros el jefe de gabinete o el ministro de relaciones exteriores, presentaron a los representantes diplomáticos, el modelo de política de derechos humanos que utilizan con un sector particular de la sociedad. Comunicaron que continuarán en esa dirección (es decir violar los derechos humanos a numerosas personas) e invitaron a la comunidad internacional (representada en esa asamblea) a adherir y poner en prácticas principios de excepción, la suspensión de garantías, la irretroactividad penal, la responsabilidad penal colectiva, analogía penal, no respeto de la amnistía y otros pilares que violen las garantias del debido proceso, la seguridad juridica, los principios de legalidad…. en sus respectivas instituciones judiciales para defender los derechos humanos. https://mobile.twitter.com/JorgeFaurie/status/1115600929527492608 ¿O los países presentes en esa reunión violan los derechos humanos pero la Argentina no quiere denunciarlos ?
Pronto, donde vayan también los iremos a buscar, parar llevarlos ante la justicia nacional o universal, porque a esos individuos sí se les podrá aplicar el estatus de la CPI y las convenciones respectivas, sin violar sus derechos humanos, leyes y garantias procesales como actualmente se realiza con los Prisioneros Políticos. Ya no podrán cubrirse detrás de un asilo político o la persecución de una dictadura por haber simplemente distribuido un panfleto, luchar contra ella o querer un mundo mejor. Esperando ese día, será nuestra forma de resistir[1]. Paris, 15 abril 2019. CasppaFrance.
[1]
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 15, 2019
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Detención preventiva es, fracaso de la justicia
Por Aneldo Arosemena
EL USO EXCESIVO DE LA PRISIÓN PREVENTIVA CONSTITUYE UNO DE LOS SIGNOS MÁS EVIDENTES DEL FRACASO DEL SISTEMA DE ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA, Y ES UN PROBLEMA ESTRUCTURAL INACEPTABLE EN UNA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA QUE RESPETA EL DERECHO DE TODA PERSONA A LA PRESUNCIÓN DE INOCENCIA, DESTACÓ UN RECIENTE INFORME DE LA COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS (CIDH).
El documento, fue emitido por la CIDH, de julio de este año, y se titula “Informe sobre medidas dirigidas a reducir el uso de la prisión preventiva en las Américas”.
En ese documento, destaca que “la aplicación arbitraria e ilegal de la prisión preventiva es un problema crónico en la región”, e hicieron un llamado a tomar en cuenta que la prisión preventiva debe partir de la consideración al derecho a la presunción de inocencia y tener en cuenta la naturaleza excepcional de esta medida; igualmente, debe aplicarse de conformidad con los criterios de legalidad, necesidad y proporcionalidad.
El uso no excepcional de la detención preventiva, es uno de los problemas más graves y extendidos que enfrentan los Estados miembros de la Organización de los Estados Americanos (OEA), señala el documento.
Por otra parte, en Panamá, activistas por los derechos humanos, sectores políticos opositores al gobierno de Juan Carlos Varela, y abogados litigantes han denunciando un abuso en las medidas cautelares de detención preventiva, las que han recaído principalmente en figuras a las que se le siguen procesos en caso de alto perfil.
Los mismos abogados y activistas locales señalan que cifras de la Dirección General del Sistema Penitenciario de Panamá, dan cuenta que para julio de 2017, había en las cárceles del país 8947 personas, las cuales estaban detenidas preventivamente, es decir sin tener condena en firma y ejecutoriada, cifra que constituye el 55% del total de los presos.
La detención preventiva, por largo tiempo, en condiciones de hacinamiento, constituye una violación al derecho que tiene toda persona, a recibir cumplida justicia en tiempo oportuno, consagrado en la Convención Interamericana de Derechos Humanos, de la cual Panamá es signataria.
Colaboración: Cnel Osvaldo Guarnaccia
PrisioneroEnArgentina.com
Septiembre 28, 2017
EL DEBER DE CUMPLIR CON LOS DERECHOS HUMANOS
Escribe Carlos Españadero.
En realidad, mi primera preocupación es hacer entender que los derechos humanos, constituyen un problema abierto.
¿Qué quiere decir esto? Que el tema no está agotado, ni se ha encontrado un listado definitivo que es válido hasta el fin del mundo. Hay muchos, que lo consideran un tema terminado. Y yo pecaminosamente diría que recién estamos comenzando. Hay un largo caminar que quizás lo mediremos en un futuro de siglos.
Pero a la vez, hay que reconocer que, gracias a los esfuerzos realizados durante la segunda mitad del siglo XX, se ha tomado conciencia de la existencia de los derechos humanos y se ha concretado una enumeración de ellos de inapreciable valor.
Para mejor se ha logrado concretar en acuerdos planetarios, y en documentos que no son nada despreciables.
Por lo tanto, destaco que hasta ahora hay una enumeración de derechos humanos que hay que valorar y asegurar su cumplimiento.
Como es costumbre en el mundo político, muchas personas que se declararon defensores de los derechos humanos, tienen en sus curriculums antecedentes terroristas, así como de corrupción; que los utilizan para encontrar beneficios políticos espurios.
Esto ha llevado a mucha gente a cuestionar la validez de los derechos humanos desvalorizando su valor, por el hecho de ser usados por violadores de esos mismos derechos.
Creo que esta confusión en muchos casos simplista y es también aprovechado por quienes desconocen la vigencia de los mismos, por conductas también violatorias, en función de intereses ajenos al respeto del ser humano.
Reivindico la vigencia de los derechos humanos, sin dejar de pensar que deben constantemente ser estudiados en busca de nuevos fundamentos que los revaliden constantemente.
Pero hay una reflexión sobre lo que se convierte un negocio de los derechos humanos.
La existencia de los derechos humanos vigentes a la fecha, impone el deber de cada uno, de respetar con su propia conducta los derechos de los demás. Lo más importante es no ser un cazador de brujas que busca quienes los violan. El tema es como “yo” cumplo respetando los derechos humanos de los demás.
En un plano ideal, si todos asumen que es deber de cada uno es cumplir con los derechos humanos, en todo momento y lugar, seguramente no habría violaciones a los mismos. Ni se daría pie a los que viven estos derechos como un negocio.
Ni tampoco permitiría que fueran ignorados en su contenido, porque como todos tenemos el deber de cumplir con ellos cuando tratamos con los demás, tenemos que conocerlos.
Hay numerosos documentos donde se encuentran enumerados los derechos humanos, desde las Naciones Unidas y las organizaciones internacionales regionales. Aún así, debo destacar que un documento que no puede ser eludido es “Pacem in terris” última encíclica de Juan XXIII, escrita para todas las personas de buena voluntad.
Estoy seguro, que el estudio de estos documentos que debemos leer responsablemente, permitirá asegurar los derechos humanos de los demás. Y esto se hace no empleando palabras de “barricada”, sino cuidando la propia conducta.
Soy reiterativo en este trabajo, para que se entienda lo que no se quiere ver. ¿Defendés los derechos humanos? Cumplilos celosamente.
CARLOS ANTONIO ESPAÑADERO es un oficial jefe retirado del Ejército Argentino con gran intelectualidad y una mente privilegiada que goza de máxima lucidez. Es padre de seis hijos y abuelo de cuatro nietas, y lo destacable: Tiene 84 jóvenes años de edad a pesar de lo cual, ocupa una celda en el Pabellón 8 de esta misma prisión. Ha escrito y publicado dos libros: EL PROBLEMA DEL TERRORISMO (2008) y LA SEGURIDAD PÚBLICA (2009) Al día de hoy, se encuentra completando un tercero titulado: LA TRAGEDIA TERRORISTA ARGENTINA. Con él, todos los días nos reunimos en horas de la tarde intercambiando comentarios y pareceres de todo tipo. Preponderantemente de Geopolítica e Historia Contemporánea. Bien, esto es un decir, casi se podría expresar que me brinda clases sobre los mencionados tópicos. El tratarle es un placer ya que enriquece el conocimiento teniéndose en cuenta su condiciones didácticas. Fue profesor durante largos años de Geopolítica en la Universidad Nacional de Mar del Plata, en el Consejo Superior de Educación Católica (CONSUDEC) de Buenos Aires, en la Escuela Superior de Policía de la Provincia de Buenos Aires en la ciudad de La Plata, en la Academia de Estudios Penitenciarios en la ciudad de Buenos Aires y también en la Escuela de Inteligencia de la Fuerza Aérea.
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 22, 2016