El 5 de octubre de 1975 en la Provincia de Formosa, durante el gobierno constitucional presidido por María Estela Martínez de Perón, tuvo lugar la Operación Primicia. Así bautizaron los montoneros a su acción de guerra contra el gobierno constitucional y la sociedad toda. Fue una acción espectacular que incluyó el secuestro del vuelo 706 de Aerolíneas Argentinas, con 102 pasajeros y 6 tripulantes a bordo; la toma del Aeropuerto El Pucú; el ataque al Regimiento de Infantería de Monte 29; y la huida de los guerrilleros en el Boeing 737-200 de Aerolíneas y en un Cessna 182 de cuatro plazas. En el hecho murieron doce militares (en su mayoría soldados conscriptos), un policía y tres civiles. Los terroristas, que sufrieron nueve bajas, contaban con la colaboración de Luis Roberto Mayol, el soldado traidor que entregó a sus compañeros. Más allá de la espectacularidad la operación fue un verdadero fracaso para los Montoneros. Los pocos soldados que estaban en el cuartel ese caliginoso domingo ofrecieron una fiera resistencia y los subversivos debieron batirse en retirada. En el fragor del combate, un hecho se destaca. El enemigo: “¡Rendíte, dame el arma, que la cosa no es con vos!”. Herminio Luna: “¡Aquí no se rinde nadie mierda!”. Y mientras alza su fusil una ráfaga de ametralladora lo parte por la mitad. El negro Hermindo ha cumplido; con las vísceras expuestas se va en sangre. Sus compañeros, alertados, toman posición y se cobran la vida del amigo. Cae el soldado traidor. Los Montoneros huyen. El ataque ha sido repelido.
Año 2006. En la Universidad Nacional del Litoral, ciudad de Santa Fe, se descubre una placa recordatoria en la que se rinde homenaje, entre otros, al soldado Luis Roberto Mayol. El entonces miembro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, participa con una conferencia.
Año 2015. Cuatro décadas han pasado y se cumple el aniversario del combate. En el Colegio Nº 1 Joaquín V. González -ex Colegio Nacional de La Rioja-, la docente Fernanda Mejías recuerda al “Negro” Hermindo y su muerte heroica; exhibe su foto en la cartelera con palabras alusivas. Estupor. El gobierno provincial reacciona con un brío digno de mejores causas: instruye sumario administrativo a la docente y a la directora del establecimiento para deslindar responsabilidades. ¡ Hermindo Luna es un maldito que no merece homenaje alguno! El titular de Derechos Humanos de La Rioja, Delfor Brizuela, pone el grito en el cielo. Acusa a la docente Mejías de referirse a las víctimas (así llama a los asesinos de Hermindo Luna) como “subversivos, guerrilleros y asesinos”. Más allá de unos pocos que se solidarizan con Mejías, el asunto pasa sin pena ni gloria. El presidente Macri se desentendió del caso. Los muertos montoneros en el ataque son homenajeados en el Parque de la Memoria de la ciudad de Buenos Aires. Los que mataron a los soldados formoseños están allí grabados en la piedra. Sus familiares directos fueron indemnizados con una suma cercana a los 250 mil dólares.
Año 2019. Jovina Luna es la hermana de Hermindo. Lleva años luchando por hacer saber quién fue. La invitan a la televisión. Los medios nacionales le hacen notas. Por fin fue recibida por el Secretario de derechos Humanos de la Nación, Claudio Avruj. Denunció la corrupción que está atrás del “curro” de los derechos humanos y la indignidad que a los asesinos de su hermano se le rindan honores en el Parque de la Memoria. Es la primera vez que la Secretaría recibe a un familiar víctima de las bandas terroristas y se ocupa de sus reclamos (En época de elecciones cada voto cuenta).
Consciente o no, Jovina Luna está dando una pelea que va más allá de su interés familiar. Ante la defección de tantos, se ha hecho cargo de dar la batalla cultural. Cuál prueba viva de los sucesos, anda por el mundo refutando, inequívocamente, la mentira infame del relato setentista. De que fue una guerra y que su hermano murió defendiendo al gobierno constitucional, no se lo contó nadie. La historia (la de los hechos, la verdadera, la que se niega a nuestros niños en las escuelas), como una sombra luminosa, la acompaña a donde va.
El ex titular del Ejército Argentino durante el kirchnerismo César Gerardo Santos del Corazón de Jesús Milani quedó detenido hoy en la provincia de La Rioja luego de declarar en una causa que investiga los secuestros de Ramón Alfredo Olivera y su padre Pedro Adán Olivera, ocurridos en marzo de 1977 en la capital de la mencionada región. Así lo dio a conocer el ex cura enamorado Delfor “Pocho” Brizuela, el representante de Derechos Humanos en la jurisdicción, por otra parte, un hombre muy apegado a métodos mafiosos para quienes tienen ideas diferentes. Entre otras cosas, Brizuela es el inquisidor general que propuso y consiguió la suspención de la maestra Fernanda Mejías, que solo proponía dar una clase de historia, aunque claro, no era un relato.
En el año 1977, Pedro Adán Olivera fue secuestrado en su casa y permaneció desaparecido durante dos días, en los que dijo haber sido torturado. Luego lo liberaron en la puerta de su casa y se llevaron a su hijo, Ramón Alfredo Olivera, con idéntico destino durante más de una semana. La decisión de la captura de Milani fue ordenada por el juez federal Daniel Herrera Piedrabuena. Se lo acusa de haber estado presuntamente involucrado en los secuestros cuando era un joven oficial en el Batallón 141 de Ingenieros de La Rioja. La declaración del día de hoy fue la segunda del ex militar devenido a político populista Milani en la semana. El miércoles último, había declarado en la causa por la desaparición del soldado Alberto Ledo. En esa oportunidad, Milani aseguró que nunca conoció a Ledo, y que no tuvo nada que ver con el acta, cuya autoría le atribuyen, en la que se hizo figurar como desertor al conscripto riojano, con la finalidad de ocultar su desaparición forzada. También sostuvo que no integró el aparato de inteligencia del Ejército en la última dictadura y que solo realizó este tipo de operaciones en un pasado reciente. Fue la primera vez que Milani compareció en la causa que investiga la desaparición del soldado Ledo, ocurrida en 1976. El ex alto mando militar durante el gobierno de Cristina Kirchner declaró durante aproximadamente tres horas y media ante el juez federal N° 2 de Tucumán, Fernando Poviña.
Culpable o inocente, es de esperar que Milani tenga un juicio justo, ese que ninguno de sus “camaradas” acusados por delitos menores y mucho más escasas “pruebas” que él, tuvo el derecho a experimentar.
Milani, un despreciable sujeto que, con la intención de salvarse de las garras de los jueces militantes, abandonó a sus hombres en desgracia refugiándose bajo las polleras de Hebe de Bonafini. Esta, le dio aire y “creyó” en su inocencia al ver la evidencia presentada. Allá por el año 2015 intentamos entrevistar a la máxima representante de Madres de Plaza de Mayo. Cuando se nos preguntó sobre el temario, nuestra contestación fue que sería importante compartir las pruebas que Milani le presentó exonerándole de sus pecados. Estas podían ayudar a otros presos políticos ilegalmente arrestados. Al día siguiente, la señora de Bonafini se excusó diciendo que -por ahora- no daría entrevistas.
La pregunta para la historia será: ¿Cómo un cobarde de esta categoría y tan poco talento (¿No sospechaba que sus secuaces lo iban a abandonar?) llegó a semejante cargo en las Fuerzas Armadas? ¿Fue magia?
JOVINA LUNA NO SE RINDE
Por Mauricio Ortín
El 5 de octubre de 1975 en la Provincia de Formosa, durante el gobierno constitucional presidido por María Estela Martínez de Perón, tuvo lugar la Operación Primicia. Así bautizaron los montoneros a su acción de guerra contra el gobierno constitucional y la sociedad toda. Fue una acción espectacular que incluyó el secuestro del vuelo 706 de Aerolíneas Argentinas, con 102 pasajeros y 6 tripulantes a bordo; la toma del Aeropuerto El Pucú; el ataque al Regimiento de Infantería de Monte 29; y la huida de los guerrilleros en el Boeing 737-200 de Aerolíneas y en un Cessna 182 de cuatro plazas. En el hecho murieron doce militares (en su mayoría soldados conscriptos), un policía y tres civiles. Los terroristas, que sufrieron nueve bajas, contaban con la colaboración de Luis Roberto Mayol, el soldado traidor que entregó a sus compañeros. Más allá de la espectacularidad la operación fue un verdadero fracaso para los Montoneros. Los pocos soldados que estaban en el cuartel ese caliginoso domingo ofrecieron una fiera resistencia y los subversivos debieron batirse en retirada. En el fragor del combate, un hecho se destaca. El enemigo: “¡Rendíte, dame el arma, que la cosa no es con vos!”. Herminio Luna: “¡Aquí no se rinde nadie mierda!”. Y mientras alza su fusil una ráfaga de ametralladora lo parte por la mitad. El negro Hermindo ha cumplido; con las vísceras expuestas se va en sangre. Sus compañeros, alertados, toman posición y se cobran la vida del amigo. Cae el soldado traidor. Los Montoneros huyen. El ataque ha sido repelido.
Año 2006. En la Universidad Nacional del Litoral, ciudad de Santa Fe, se descubre una placa recordatoria en la que se rinde homenaje, entre otros, al soldado Luis Roberto Mayol. El entonces miembro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, participa con una conferencia.
Año 2015. Cuatro décadas han pasado y se cumple el aniversario del combate. En el Colegio Nº 1 Joaquín V. González -ex Colegio Nacional de La Rioja-, la docente Fernanda Mejías recuerda al “Negro” Hermindo y su muerte heroica; exhibe su foto en la cartelera con palabras alusivas. Estupor. El gobierno provincial reacciona con un brío digno de mejores causas: instruye sumario administrativo a la docente y a la directora del establecimiento para deslindar responsabilidades. ¡ Hermindo Luna es un maldito que no merece homenaje alguno! El titular de Derechos Humanos de La Rioja, Delfor Brizuela, pone el grito en el cielo. Acusa a la docente Mejías de referirse a las víctimas (así llama a los asesinos de Hermindo Luna) como “subversivos, guerrilleros y asesinos”. Más allá de unos pocos que se solidarizan con Mejías, el asunto pasa sin pena ni gloria. El presidente Macri se desentendió del caso. Los muertos montoneros en el ataque son homenajeados en el Parque de la Memoria de la ciudad de Buenos Aires. Los que mataron a los soldados formoseños están allí grabados en la piedra. Sus familiares directos fueron indemnizados con una suma cercana a los 250 mil dólares.
Año 2019. Jovina Luna es la hermana de Hermindo. Lleva años luchando por hacer saber quién fue. La invitan a la televisión. Los medios nacionales le hacen notas. Por fin fue recibida por el Secretario de derechos Humanos de la Nación, Claudio Avruj. Denunció la corrupción que está atrás del “curro” de los derechos humanos y la indignidad que a los asesinos de su hermano se le rindan honores en el Parque de la Memoria. Es la primera vez que la Secretaría recibe a un familiar víctima de las bandas terroristas y se ocupa de sus reclamos (En época de elecciones cada voto cuenta).
Consciente o no, Jovina Luna está dando una pelea que va más allá de su interés familiar. Ante la defección de tantos, se ha hecho cargo de dar la batalla cultural. Cuál prueba viva de los sucesos, anda por el mundo refutando, inequívocamente, la mentira infame del relato setentista. De que fue una guerra y que su hermano murió defendiendo al gobierno constitucional, no se lo contó nadie. La historia (la de los hechos, la verdadera, la que se niega a nuestros niños en las escuelas), como una sombra luminosa, la acompaña a donde va.
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 20, 2019
EL COBARDE DEL CONDADO
El ex titular del Ejército Argentino durante el kirchnerismo César Gerardo Santos del Corazón de Jesús Milani quedó detenido hoy en la provincia de La Rioja luego de declarar en una causa que investiga los secuestros de Ramón Alfredo Olivera y su padre Pedro Adán Olivera, ocurridos en marzo de 1977 en la capital de la mencionada región. Así lo dio a conocer el ex cura enamorado Delfor “Pocho” Brizuela, el representante de Derechos Humanos en la jurisdicción, por otra parte, un hombre muy apegado a métodos mafiosos para quienes tienen ideas diferentes. Entre otras cosas, Brizuela es el inquisidor general que propuso y consiguió la suspención de la maestra Fernanda Mejías, que solo proponía dar una clase de historia, aunque claro, no era un relato.
En el año 1977, Pedro Adán Olivera fue secuestrado en su casa y permaneció desaparecido durante dos días, en los que dijo haber sido torturado. Luego lo liberaron en la puerta de su casa y se llevaron a su hijo, Ramón Alfredo Olivera, con idéntico destino durante más de una semana. La decisión de la captura de Milani fue ordenada por el juez federal Daniel Herrera Piedrabuena. Se lo acusa de haber estado presuntamente involucrado en los secuestros cuando era un joven oficial en el Batallón 141 de Ingenieros de La Rioja. La declaración del día de hoy fue la segunda del ex militar devenido a político populista Milani en la semana. El miércoles último, había declarado en la causa por la desaparición del soldado Alberto Ledo. En esa oportunidad, Milani aseguró que nunca conoció a Ledo, y que no tuvo nada que ver con el acta, cuya autoría le atribuyen, en la que se hizo figurar como desertor al conscripto riojano, con la finalidad de ocultar su desaparición forzada. También sostuvo que no integró el aparato de inteligencia del Ejército en la última dictadura y que solo realizó este tipo de operaciones en un pasado reciente. Fue la primera vez que Milani compareció en la causa que investiga la desaparición del soldado Ledo, ocurrida en 1976. El ex alto mando militar durante el gobierno de Cristina Kirchner declaró durante aproximadamente tres horas y media ante el juez federal N° 2 de Tucumán, Fernando Poviña.
Culpable o inocente, es de esperar que Milani tenga un juicio justo, ese que ninguno de sus “camaradas” acusados por delitos menores y mucho más escasas “pruebas” que él, tuvo el derecho a experimentar.
Milani, un despreciable sujeto que, con la intención de salvarse de las garras de los jueces militantes, abandonó a sus hombres en desgracia refugiándose bajo las polleras de Hebe de Bonafini. Esta, le dio aire y “creyó” en su inocencia al ver la evidencia presentada. Allá por el año 2015 intentamos entrevistar a la máxima representante de Madres de Plaza de Mayo. Cuando se nos preguntó sobre el temario, nuestra contestación fue que sería importante compartir las pruebas que Milani le presentó exonerándole de sus pecados. Estas podían ayudar a otros presos políticos ilegalmente arrestados. Al día siguiente, la señora de Bonafini se excusó diciendo que -por ahora- no daría entrevistas.
La pregunta para la historia será: ¿Cómo un cobarde de esta categoría y tan poco talento (¿No sospechaba que sus secuaces lo iban a abandonar?) llegó a semejante cargo en las Fuerzas Armadas? ¿Fue magia?
PrisioneroEnArgentina.com
febrero 17, 2017