Haydee Ordas, de 62 años, fue identificada por la Justicia porteña y el viernes demorada en la Comisaría. Ordas acusada de ser la envenenadora de animales de la zona, donde el año pasado, de acuerdoa investigaciones, unos 40 perros sufrieron envenenamiento.
El modus operandi de la mujer consistía en recorrer las calles aledaneas a su edificio y tiraba trozos de carne con un potente insecticida. En otras oportunidades, directamente dejaba caer en las aceras bolsitas con polvo conteniendo veneno. Además de insecticida, utilizaba un agrotóxico muy potente.
Las muertes de los perros empezaron hace más de un año. Al ser este un delito excarcelable, la mujer fue liberada tras declarar en la comisaría. Al volver a su domicilio, vecinos pintaron la entrada del inmueble con consignas develando el cruel comportamiento de este “ser humano”.
Cuando se produjo el allanamiento a su casa, que fue autorizado por la jueza penal Natalia Molina, las autoridades policiales divisaron un bidón con un veneno conocido como Furadán, una sustancia prohibida en otros países, pero que en Argentina es utilizado en agricultura para el control de plagas.
El fiscal Matías Michienzi, de la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental, dispuso un operativo en manos de la Dirección General de Limpieza de la Ciudad en los alrededores del domicilio de la acusada y en las inmediaciones del parque para eliminar cualquier rastro de la sustancia.
Ordas fue imputada por actos de crueldad animal, contemplados en la ley 14.346, que establece una pena que va arranca con 15 días al año de cárcel.
“Ordas” de crueldad
Haydee Ordas, de 62 años, fue identificada por la Justicia porteña y el viernes demorada en la Comisaría. Ordas acusada de ser la envenenadora de
animales de la zona, donde el año pasado, de acuerdoa investigaciones, unos 40 perros sufrieron envenenamiento.
El modus operandi de la mujer consistía en recorrer las calles aledaneas a su edificio y tiraba trozos de carne con un potente insecticida. En otras oportunidades, directamente dejaba caer en las aceras bolsitas con polvo conteniendo veneno. Además de insecticida, utilizaba un agrotóxico muy potente.
Las muertes de los perros empezaron hace más de un año. Al ser este un delito excarcelable, la mujer fue liberada tras declarar en la comisaría. Al volver a su domicilio, vecinos pintaron la entrada del inmueble con consignas develando el cruel comportamiento de este “ser humano”.
El fiscal Matías Michienzi, de la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental, dispuso un operativo en manos de la Dirección General de Limpieza de la Ciudad en los alrededores del domicilio de la acusada y en las inmediaciones del parque para eliminar cualquier rastro de la sustancia.
Ordas fue imputada por actos de crueldad animal, contemplados en la ley 14.346, que establece una pena que va arranca con 15 días al año de cárcel.
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 10, 2018