Share

Grl. Heriberto Justo Auel

10 de Diciembre de 2024

“Nada es más difícil, y por tanto más precioso, que decidirse”.

Napoleón Bonaparte -1769/1821-

 

 

 

  1. EL IMPRESCINDIBLE CONOCIMIENTO SITUACIONAL COLECTIVO.
  2. LA APLICACIÓN DEL “ANALISIS FODA” A LA STUACIÓN POSELECTORAL DE EE.UU.
  3. LA “SOCIEDAD INFORMATIZADA” FRENTE A LAS DIRIGENCIAS EXTRAVIADAS.

 

 

  1. EL IMPRESCINDIBLE CONOCIMIENTO SITUACIONAL COLECTIVO.

 

Quienes realizan un seguimiento constante de nuestros ensayos mensuales, recordarán la Tesis que sostuve en 1959, en la Universidad de Cuyo (1) cuando cursaba Ciencias Políticas, pues he mantenido a lo largo de los años algunas de sus conclusiones, en particular el “conocimiento profundo de “las circunstancias, pues quien lo tiene puede accionar sobre ella, y cambiarla.  

 

Santo Tomás de Aquino -en la “Summa Theologiae”- agrega que el conocimiento es precursor del amor, afirmando que “no se puede amar lo que no se conoce”. Es un dicho con raíces profundas en nuestra forma de interactuar con el mundo, enfatizando la conexión entre conocimiento y aprecio. Es por ello por lo que entendemos como imprescindible el conocimiento de la situación política/estratégica que nos abarca, condiciona y/o determina, sin dejar de tener muy en cuenta lo que Bauman (2) bautizó como “modernidad liquida”, que en nuestra región está a la vista.

Ortega y Gasset

José Ortega y Gasset (3) -una de las figuras más influyentes de la filosofía española del siglo XX- desarrolló el siguiente pensamiento -en su obra “Meditaciones del Quijote” (1914), que profundiza en “El tema de nuestro tiempo” (1923)-: “Yo soy yo y mi circunstancia y si no la salvo a ella, no me salvo yo”. Este aforismo encapsula la idea central de Ortega sobre la relación entre el individuo y el mundo que lo rodea. En ese sentido hay varias dimensiones a considerar:

  • La relación entre el ser humano y la historia: Estamos condicionados por nuestro tiempo y lugar, pero también tenemos la capacidad de influir en ellos.
  • La libertad: La verdadera libertad radica en reconocer nuestras circunstancias y actuar sobre ellas, en lugar de ignorarlas o resignarnos a ellas.
  • El compromiso social: Ortega insiste en la responsabilidad ética del individuo hacia su comunidad y su entorno circunstancial.

Conscientes de la naturaleza de nuestra grave crisis -más que centenaria- de carácter cultural y político (4), ésta debe ser resuelta a través de la pacificación del país -mientras se atienden los urgentes problemas de orden socioeconómico- y a la vez se nos hace imperioso concientizar al soberano acerca de lo planteado en el primer párrafo de éste punto 1. (1), que exige poseer:

  1. a) una fuerte idea de pertenencia cultural,
  2. b) claros objetivos a plazo y
  3. c) conocer profundamente a nuestra circunstancia. Vamos a detenernos aquí, puntualmente.

  1. LA APLICACIÓN DEL “ANALISIS FODA” (5) A LA SITUACIÓN POSELECTORAL DE UU.

Decíamos en nuestro último ensayo (6) correspondiente a Nov 24:

En esencia: el posmarxismo representa un intento de adaptar el marxismo a las condiciones de la sociedad posmoderna, alejándose de los principios rígidos del materialismo histórico y del énfasis exclusivo en la economía. Es el “actual castrocomunismo iberoamericano” -bajo dirección del Foro de San Pablo y del Grupo de Puebla- que ocupa la mayor parte del subcontinente y que actualmente enfrenta serios problemas internos -en cada uno de los países que controla- por la reacción de las mayorías inorgánicas de “electorados informatizados” que rechazan los autoritarismos. A partir de Ene 25, el posmarxismo y sus aliados regionales enfrentarán a la ola expansiva del eje conservador/liberal Washington/Buenos Aires”, actualmente en gestación acelerada.

Es esta la natural reacción de los “jóvenes pueblos americanos” a los excesos de corrupción e ineptitud del “largo proceso revolucionario castrista” que aún afecta al Continente. Experiencia inédita de redención política en la Historia de las Américas en la que las fuerzas de la Libertad -del Norte y del Sur-, -Washington y San Martín- se unen en la eventual recuperación cultural y política del Occidente Cristiano.

Marx

Si somos actores responsables, América tiene por delante una epopeya geopolítica mundial en ciernes. Iremos al rescate de la tierra de Bolívar, cuyo espacio es hoy la “plataforma de reunión y expansión” de los aliados estratégicos internacionales del “posmarxismo residual castro comunista”: el cartel de las FARC -Colombia- (g), el Islam Combativo -Irán- (h), el Eurasianismo/Cuarta Teoría Política -Rusia- (i), la “comunidad global de destino” -camino y franja de la seda de China- (j) y las fuerzas del “globalismo occidental” (k).   

Si -como lo afirmamos es estos párrafos del ensayo del pasado mes de Nov 24- tenemos una nueva e inédita   situacióncircunstancia política/estratégica– en el Continente Americano -a partir de Ene 25- ésta se caracterizaría -muy probablemente- del siguiente modo, en los frentes migratorios, económicos y geopolíticos:    

  1. Políticas Migratorias Más Restrictivas: que podrían afectar a países de América Central y México, que históricamente han sido puntos clave en la ruta migratoria hacia EE. UU. Podría aumentar la presión para reforzar las fronteras y contener el flujo migratorio en los países de origen y tránsito -Méjico-.
  2. Enfoque en Relaciones Comerciales Bilaterales: es probable que se fomenten acuerdos bilaterales -en lugar de iniciativas multilaterales- lo que podría generar presión sobre economías como México y Argentina -aliado especial- podría negociar en términos muy favorables un TLC.
  3. Reducción de Cooperación en Temas de Cambio Climático: dada la posición previa de Trump sobre el Acuerdo de París, es probable que disminuya el apoyo a iniciativas regionales relacionadas con el medio ambiente.
  4. Mayor Influencia China en la Región: si EE. UU. reduce su presencia e influencia económica o política/cultural en Iberoamérica, China podría llenar ese vacío. La presencia de Marco Rubio en la Secretaría de Estado indica la probabilidad de una futura mayor importancia al “patio de atrás” y Buenos Aires cobra primacía -como aliado estratégico- en caso muy probable de darse esta nueva actitud política.
  5. Polarización Ideológica: el liderazgo conservador de Trump/Milei podría intensificar las divisiones ideológicas en Iberoamérica. La declaratoria “trumpista” -aún antes de asumir en la Casa Blanca- indica la conformación futura de un “Eje” con Argentina colocando a Buenos Aires en la condición de líder regional en la “guerra cultural” que libra el Occidente Cristiano, frente al complejo “posmarxismo residual”, que en Iberoamérica es el “castrocomunismo”, en crisis electoral generalizada.
  6. En general la política exterior de EE.UU. hacia Iberoamérica será clave en la configuración de alianzas estratégicas y el futuro económico y social de la región. 

Establecidos los grandes lineamientos del giro situacional -que se aguarda desde Ene 25- con un nuevo gobierno en Washington, vamos a aplicar sobre ellos un análisis FODA (5), para obtener algunas conclusiones:

Fortalezas:

  1. Estabilidad institucional: Las elecciones reflejan la resiliencia de la democracia estadounidense, con procedimientos robustos y una transición estable, pese a las severas controversias. Aunque EE.UU. ha enfrentado tensiones políticas significativas, la capacidad de celebrar elecciones libres y transparentes se destaca como una fortaleza clave. Esto refuerza la confianza internacional en el sistema político y jurídico estadounidense, atrayendo inversión y consolidando su rol como modelo democrático.
  2. Influencia global de EE.UU.: El cambio en la administración puede redefinir significativamente el papel de EE.UU. en temas críticos como el cambio climático, comercio global y seguridad internacional. La estructura económica y militar de EE.UU. sigue siendo dominante a nivel mundial. Su capacidad para influir en organismos como la ONU, el FMI y la OTAN, permite proyectar liderazgo en áreas estratégicas como la paz y la seguridad internacionales.
  3. Innovación en diplomacia:UU. puede fortalecer alianzas estratégicas y abrir nuevas oportunidades de cooperación en regiones claves como Asia-Pacífico e Iberoamérica. Puede reinventar su diplomacia para enfrentar desafíos contemporáneos -como el cambio climático o la inteligencia artificial- marcando un liderazgo técnico y normativo.

Oportunidades:

  1. Redefinición de alianzas internacionales: La administración entrante puede aprovechar para reforzar relaciones deterioradas o construir nuevos acuerdos, especialmente con aliados europeos, asiáticos e iberoamericanos. La nueva administración podría fortalecer relaciones con socios tradicionales como la UE, especialmente en temas de defensa común (OTAN) o regulaciones tecnológicas. Pero además puede acercarse a economías emergentes o, para contrarrestar la influencia china en Iberoamérica y abrir nuevas alianzas. Enfrentará al “wokismo”, dentro y fuera del país (6).
  2. Posicionamiento geopolítico: La competencia con China presenta una oportunidad para que EE. UU. afiance su liderazgo en tecnología, economía y defensa. Enfrenta a China en el Indo-Pacífico mediante asociaciones como AUKUS (7) o QUAD (8). Se posiciona como un baluarte frente al expansionismo asiático. Esto también puede consolidar su influencia en temas como cadenas de suministro y semiconductores.
  3. Reforma económica global: Promover nuevas políticas comerciales y energéticas podría consolidar a EE.UU. como un líder en la transición energética y en la regulación digital. La transición hacia energías limpias es una oportunidad clave para EE.UU. al promover tecnologías avanzadas que lideren mercados globales. Nuevos acuerdos sobre el cambio climático también pueden servir como una plataforma para ampliar su influencia.
  4. Impacto en Iberoamérica: Puede abrir nuevas rutas de cooperación económica y política, además de abordar temas de migración y desarrollo sostenible en la región. EE.UU. puede replantear su relación con Iberoamérica a través de políticas económicas inclusivas y proyectos de desarrollo sostenible. Esto podría disminuir la migración irregular y contrarrestar la influencia china en la región, presente en la compleja alianza del posmarxismo, que incluye al “globalismo”.

Debilidades:

  1. Polarización interna: La división política/cultural interna puede debilitar la posición internacional de EE. UU., afectando la percepción de su liderazgo y capacidad para actuar unificadamente. La intensa división entre republicanos y demócratas -conservadores y globalistas- limita la capacidad de EE.UU. para implementar políticas externas coherentes y sostenidas. Además, proyecta una imagen de inestabilidad que otros actores podrían aprovechar.
  2. Inestabilidad de políticas exteriores: Los cambios abruptos entre administraciones afectan la confianza de los socios internacionales, que podrían buscar diversificar sus alianzas. Ej.: las posturas sobre el acuerdo nuclear con Irán o el TPP que erosionan la confianza de socios clave, en un ámbito situacional “líquido”.
  3. Dependencia económica: Con una deuda pública creciente y desafíos internos -como el déficit comercial- la capacidad de financiar proyectos internacionales a gran escala podría verse limitada, dejando espacio a actores como China para llenar ese vacío. La experiencia Milei -2024- podría ser considerada.

Amenazas:

  1. Competencia global: El ascenso de China -y Rusia- como potencias alternativas puede socavar la influencia estadounidense, si estas ofrecieran modelos más atractivos para países en desarrollo. China se presenta como un modelo alternativo con iniciativas como la Franja y la Ruta, desafiando la hegemonía de EE.UU. en regiones críticas como África, Asia e Iberoamérica. Rusia explota conflictos regionales, para socavar la influencia occidental globalista.
  2. Crisis multilaterales: Conflictos existentes como las tensiones en Taiwán, en Corea, la guerra en Ucrania y en el Mar Arábigo, pueden emplear nuevos recursos diplomáticos y militares de EE.UU., como ya lo ha anticipado Trump antes de las elecciones. La situación en Siria agrava la situación del Gran Medio Oriente.
  3. Fragmentación de alianzas: Si la nueva administración no maneja adecuadamente las relaciones internacionales, países aliados podrían girar hacia bloques alternativos. Si EE.UU. no lograra coordinar eficazmente con aliados clave, países como Alemania, Francia o Japón podrían diversificar sus relaciones hacia potencias como China o India, debilitando el liderazgo estadounidense en foros multilaterales.
  4. Impacto de la desinformación: Narrativas que cuestionan la legitimidad del gobierno estadounidense podrían amplificar conflictos internos y debilitar su posición externa. La proliferación de noticias falsas tanto a nivel interno como externo afecta la credibilidad de las elecciones estadounidenses y la percepción de su democracia, debilitando su autoridad moral en el ámbito internacional.

Conclusión: La situación emergente de las elecciones en EE.UU. presenta un panorama complejo, donde las grandes oportunidades se entrelazan con amenazas significativas. Para maximizar sus fortalezas EE.UU. deberá abordar su polarización interna y proyectar una estrategia internacional coherente que refuerce alianzas, contrarreste rivales y recupere su influencia global. Será central para ello presentar un sólido frente de carácter cultural-ético-político.

  1. LA “SOCIEDAD INFORMATIZADA” FRENTE A LAS DIRIGENCIAS EXTRAVIADAS.

 

En la últimas elecciones -Ej.: Argentina y EE.UU.- han existido sorpresas y estas dan cuenta de que en el ámbito político-dirigencial hay un retraso en comprender la presencia de una nueva “sociedad informatizada”, que supera a las falacias y relatos. Ha variado el “ritmo” de los acontecimientos y emergen “outsiders” que rompen con lo “políticamente correcto” y sinceran la situación crítica que nos abarca. ¿Cómo llegamos a esta etapa? Veamos:

Una “sociedad informatizada es aquella en la que las tecnologías de la información y la comunicación -TIC- desempeñan un papel central en casi todos los aspectos de la vida. Esto incluye la manera en que las personas trabajan, se comunican, acceden a la educación, interactúan con el gobierno y participan en la economía. Las características principales de una sociedad informatizada son las siguientes:

  1. Dependencia de la tecnología: Gran parte de las actividades cotidianas se realiza mediante dispositivos electrónicos, internet y software.
  2. Digitalización de la información: Los datos y documentos que antes existían en papel ahora se almacenan y procesan digitalmente.
  3. Conectividad global: Internet conecta a personas, empresas y gobiernos en tiempo real, sin importar la distancia.
  4. Automatización: Uso de sistemas automatizados en industrias, servicios y procesos administrativos.
  5. Acceso masivo a la información: Cualquier persona con conexión puede acceder a una enorme cantidad de información en línea.
  6. Transformación de la economía: Emergen nuevas formas de comercio y empleo, basadas en lo digital, como el comercio electrónico y el teletrabajo. El “analfabeto digital” queda fuera del mercado.

Ejemplos de su impacto:

  • Educación: Las clases virtuales y el aprendizaje en línea han transformado el acceso al conocimiento.
  • Economía: Plataformas como Amazon o Uber, han redefinido sectores completos.
  • Relaciones sociales: Las redes sociales han cambiado la forma de cómo interactúan las personas, promoviendo conexiones virtuales.
  • Gobierno: La instrumentación de sistemas del “e-gobierno” (9) facilita trámites en línea.
Laje

En resumen, una “sociedad informatizada” no solo utiliza la tecnología, sino que está estructurada en torno a ella, lo que trae tanto ventajas como desafíos relacionados con la realidad presente, la privacidad, la seguridad y la exclusión digital. La ventaja política central es la que ha sorprendido a quienes navegan en la inercia del pasado inmediato. Por ello es imprescindible aceptar el desafío del  “conocimiento colectivo y holístico” de nuestra actual circunstancia histórica, para llevar adelante con éxito la nueva epopeya americana: la recuperación cultural del Occidente Cristiano.

Existe una confrontación mundial hemisférica Occidente Vs Oriente -EE.UU./China- de naturaleza geopolítica/civilizatoria, pero simultáneamente Occidente enfrenta un complejo conflicto de naturaleza cultural/estratégico, en su intimidad, frente a un complejo enemigo interno, con alianzas externas. Es la “batalla cultural y política” a la que hemos llamado “epopeya americana”, que por primera vez en la historia encuentra a Buenos Aires en alianza estratégica con Washington.

La lectura de “El Globalismo” (10) de Agustín Laje (11) se hace indispensable para calibrar a este fenómeno político, económico y cultural, cuyos principales objetivos serían debilitar las soberanías nacionales y reconfigurar las sociedades bajo un modelo homogéneo, impulsado por élites transnacionales. Laje conecta esta ideología con políticas específicas, como la promoción de la agenda verde, el feminismo radical o los derechos trans, las cuales sirven como herramientas para reestructurar valores tradicionales. Basado en una amplia investigación, combina filosofía, historia y política para fundamentar sus argumentos, haciendo énfasis en el contraste entre globalismo y patriotismo.

China juega en ambas pistas, con roles diferenciados. En la primera actúa como “Imperio del Centro”,  privilegiando el “soft power” con asociados de Occidente. En la segunda ingresa en bloques en los que revistan los enemigos de Occidente, operando como moderador, como lo observamos en estos días en Siria. Todo ello mientras nuestros “topos centristas” -Lousteau, Rodríguez Larreta, Carrió, Monzó, etc.- continúan insistiendo en negociar con el “enemigo”…y Cristina sigue en libertad.

Nada es más difícil, y por tanto más precioso, que decidirse“.

 

CITAS Y ACLARACIONES:

(1). La Tesis: a partir de la hipótesis “El conductor ¿debe ser sabio o erudito?” se llegaba a la conclusión que el sabio lo era por tener: a) una fuerte idea de pertenencia, b) claros objetivos a plazo y c) conocer profundamente a su circunstancia.

(2). S. Bauman: la metáfora de la “modernidad líquida” es la idea clave de éste sociólogo polaco, que aparece en su libro “Modernidad líquida”, publicado en el año 2000. Con esta expresión Bauman describe cómo las relaciones sociales, económicas y políticas han cambiado radicalmente en el mundo contemporáneo, comparándolas con líquidos que no tienen forma fija y son difíciles de contener. No solo describió el cambio, sino que también alertó sobre los riesgos de vivir en un mundo tan incierto, donde la falta de seguridad puede llevar a la ansiedad, el aislamiento y la alienación. Su pensamiento sigue siendo relevante para comprender los desafíos contemporáneos.

(3). J. Ortega y Gasset: filósofo español -1883-1955-, una de las figuras más influyentes de la filosofía española del siglo XX. Su pensamiento se desarrolla principalmente en “Meditaciones del Quijote” (1914) y se profundiza en otros textos, como “El tema de nuestro tiempo” (1923).

(4). H. J. Auel. “La interrelación de la religión, la cultura y la política”. 03 Oct 24. www.ieeba.org

(5). Análisis FODA:  es una herramienta estratégica utilizada para evaluar una situación, organización, proyecto o persona. Su propósito es identificar aspectos internos y externos que puedan influir en el éxito o fracaso de un objetivo, en planificar estrategias, potenciar fortalezas, superar debilidades, aprovechar oportunidades y mitigar amenazas. En tomar decisiones acertadas y establecer prioridades.

(6). H. J. Auel. “La evolución de la agresión marxista en el siglo XXI”. 18 Nov 24. www.ieeba.org

(7). AUKUS: Es un pacto de seguridad entre Australia, RU y EE.UU. que busca defender sus intereses en el Océano Pacífico.

(8). QUADS: Es la alianza que reúne a EE.UU, India, Australia y Japón. Nació en 2007 con el objetivo de contrarrestar la creciente influencia china en la Región.

(9). e-gobierno: también conocido como “gobierno digital”, es un sistema que utiliza tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) para mejorar la relación entre el gobierno y los ciudadanos.

(10). “El Globalismo. La Tercera Etapa de la Globalización y la Revolución de la Izquierda” Ed. Unión. 2023. 478 páginas.

(11). A. Laje: estudió Ciencia Política y Relaciones Internacionales en la Universidad Católica de Córdoba y ha realizado estudios de posgrado en instituciones internacionales. Es reconocido por su habilidad para debatir y su enfoque polémico en temas sensibles, lo que lo ha convertido en una figura prestigiosa dentro del panorama intelectual hispanoamericano.

 


PrisioneroEnArgentina.com

Diciembre 11, 2024