Como estamos en democracia, creo que todos tenemos derecho a emitir nuestra opinión, pero la cuestión es ¿con qué “autoridad moral” lo hacemos, tanto como funcionarios o como ciudadanos comunes?
Los hechos cometidos el miércoles pasado fue una réplica casi exacta a la que hicieron “manifestantes” en el 2017 cuando casi destruyeron la plaza del Congreso, por la similar causa, a la del miércoles pasado: la supuesta defensa de los jubilados.
Por eso me gustaría resaltar al respecto un hecho puntual ocurrido por aquellos años, durante el gobierno de Macri, tal como muy bien lo explicaba un jubilado de entonces en un artículo publicado en el correo de lectores del periódico “La Capital” de Rosario, porque pone en evidencia la actitud de buen parte de nuestra clase política, cuando es “oposición”:
“Indigna en verdad el bajo nivel de parte de los partidos opositores al actual gobierno, (kirchneristas e izquierdistas), al intentar aprovechar políticamente el suicidio de un jubilado en Mar del Plata, afirmando de manera absolutamente irresponsable que el jubilado se había suicidado, por culpa de Macri.
Personajes como Mayra Mendoza, Pitrola y otros que ni siquiera averiguaron lo que pasaba en la vida privada de esta persona, que no era un “jubilado hambreado”, como dijeron, puesto que su sueldo era bastante más que “la mínima”, y no tenía ningún problema de tipo monetario, sino que sufría de un cuadro depresivo, porque había enviudado y temía que la familia lo “depositara” en un geriátrico… Éste fue el verdadero motivo, tal como luego se supo.
Pero la mala ideología ciega a estos “politicastros”, a la par de la ignorancia mal intencionada que los anima, oportunista y busca-votos, lo que es proverbial, ya que sin fundamentos serios atribuyen sólo a lo social, o a lo económico, la causa de los problemas psicológicos, psiquiátricos y espirituales que afectan o pueden afectar al ser humano.
Señores políticos: humildemente les sugiero que se ilustren, que estudien, que sean serios y razonables, y sólo después opinen.
Además, los “jubilados aportantes”, no estamos peor que en época de de la señora Cristina “K”, al contrario, “la líder popular de los pobres”, nos calificó de “caranchos” a todos los que con justicia le hacíamos entonces juicios al Estado por las malas liquidaciones de nuestros haberes entre otras falencias, incluso con el PAMI, pues usaba nuestros fondos para su política. Además, vetó el 82% móvil aduciendo que si lo pagaba “se desfinanciaría al sistema”. Sin embargo no tuvo el menor empacho en jubilar a millones de personas sin aportes, sin preocuparse de dónde saldría el dinero. Lo hizo con los fondos que eran genuinos de los aportantes en ANSES, cuando debería haber procurado otro recurso para no afectar a quiénes con su esfuerzo aspiraban a una jubilación digna. Esta mujer, hoy candidata a algo, es una mentirosa serial, pues la verdad es que la mencionada contaba con esos dineros. Como igualmente supieron hacer con los importes retenidos de las obras sociales. La Cámpora, ni ninguna de las versiones actuales del “cristinismo” tienen autoridad moral para hablar de la actual situación de los “jubilados aportantes”.
Lo mejor que pueden hacer es callarse prudentemente, ya que los jubilados tenemos memoria y no comemos vidrio”. G. Navas
Post Data
El gobierno del Pte. Milei tiene poco más de un año, y desde el primer día de su gobierno “el peronismo kirchnerista” no dejó de ponerle palos en la rueda. El peronismo no ayuda nunca, no tolera cuando al país lo gobierna un partido que no es peronista, al que no ayudan poniendo por encima el interés partidario, o sectorial, por sobre el interés nacional. No quieren que a ningún gobierno no peronista le vaya bien, quieren que fracase cínicamente para hacer cierto su famoso “vamos a volver”. Así hicieron históricamente con Raúl Alfonsín organizando saqueos, huelgas a repetición y diferentes desmanes, al punto que tuvo que entregar el gobierno antes, o con De la Rúa aprovechando sus errores económicos, incluso lo intentaron con Macri aunque éste soportó como pudo y completó su mandato. Ahora, están planificando hacer lo mismo, con el gobierno de Milei, pues como dijo el líder piquetero Juan Grabois, “no queremos que a este gobierno le vaya bien”, y al mismo tiempo cuales espectros que reaparecen, estamos viendo de nuevo a personajes como Massa, que habla pontificando como si su gobierno junto Alberto Fernández y Cristina Kirchner no hubieran protagonizado uno de los peores gobiernos de nuestra historia entre 2019 y 2023, responsables en buena parte de la situación que le dejaron a este gobierno que tanto critican.
Los municipios argentinos ya no podrán cobrar tasas, impuestos y otros recargos en las facturas de servicios básicos, como la electricidad o el gas, lo que supondrá un duro golpe a las arcas de las entidades locales. La medida fue anunciada el martes por el ministro de Economía de Argentina, Luis Caputo, a través de una publicación en su perfil oficial de la red social X, argumentando “reiteradas denuncias públicas” sobre esta situación. Así, la Secretaría de Industria y Comercio del departamento que dirige dispone que “las facturas de servicios esenciales deben contener de forma única y exclusiva la descripción y el precio correspondiente al servicio contratado por el consumidor”, a lo que se añade la prohibición de “incluir cargos ajenos a la naturaleza del servicio”.
CaputoMendoza
El ministro de Economía ya había criticado reiteradamente esa imposición de tasas. La semana pasada, Caputo aseguró que los municipios estaban “aumentando de forma descontrolada sus tasas” y denunció que era con fines “recaudatorios” y “políticos”.
“Obstaculizan el programa económico que lleva adelante este Gobierno para bajar la inflación y, como siempre, los grandes perdedores son los ciudadanos”, dijo entonces.
Las tasas municipales son aportaciones que abonan los ciudadanos y empresas por servicios prestados por los municipios, tales como el alumbrado públicos, la limpieza vial o la seguridad. La medida anunciada por Caputo ha sido acogida de forma ambivalente. Por un lado se encuentran quienes la aplauden, como el propio presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, que reaccionó con un escueto pero elocuente “¡¡Brillante!!”. Por otro lado, se han empezado a producir quejas desde el ámbito municipal. La intendenta de Quilmes, de la provincia de Buenos Aires, Mayra Mendoza, denunció que “el Gobierno de Javier Milei tiene decidido ahogar a los municipios”. En el mismo mensaje, Mendoza aseveró que las tasas están establecidas “por convenio hace años y no han variado sustancialmente en el último tiempo”, y que el alza de las facturas se debe a la elevada inflación, así como que la política energética del Gobierno “está hundiendo la economía de los argentinos”.
DESPRECIABLE OPORTUNISMO DE POLÍTICOS APOSITORES
♦
Como estamos en democracia, creo que todos tenemos derecho a emitir nuestra opinión, pero la cuestión es ¿con qué “autoridad moral” lo hacemos, tanto como funcionarios o como ciudadanos comunes?
Los hechos cometidos el miércoles pasado fue una réplica casi exacta a la que hicieron “manifestantes” en el 2017 cuando casi destruyeron la plaza del Congreso, por la similar causa, a la del miércoles pasado: la supuesta defensa de los jubilados.
Por eso me gustaría resaltar al respecto un hecho puntual ocurrido por aquellos años, durante el gobierno de Macri, tal como muy bien lo explicaba un jubilado de entonces en un artículo publicado en el correo de lectores del periódico “La Capital” de Rosario, porque pone en evidencia la actitud de buen parte de nuestra clase política, cuando es “oposición”:
“Indigna en verdad el bajo nivel de parte de los partidos opositores al actual gobierno, (kirchneristas e izquierdistas), al intentar aprovechar políticamente el suicidio de un jubilado en Mar del Plata, afirmando de manera absolutamente irresponsable que el jubilado se había suicidado, por culpa de Macri.
Personajes como Mayra Mendoza, Pitrola y otros que ni siquiera averiguaron lo que pasaba en la vida privada de esta persona, que no era un “jubilado hambreado”, como dijeron, puesto que su sueldo era bastante más que “la mínima”, y no tenía ningún
problema de tipo monetario, sino que sufría de un cuadro depresivo, porque había enviudado y temía que la familia lo “depositara” en un geriátrico… Éste fue el verdadero motivo, tal como luego se supo.
Pero la mala ideología ciega a estos “politicastros”, a la par de la ignorancia mal intencionada que los anima, oportunista y busca-votos, lo que es proverbial, ya que sin fundamentos serios atribuyen sólo a lo social, o a lo económico, la causa de los problemas psicológicos, psiquiátricos y espirituales que afectan o pueden afectar al ser humano.
Señores políticos: humildemente les sugiero que se ilustren, que estudien, que sean serios y razonables, y sólo después opinen.
Además, los “jubilados aportantes”, no estamos peor que en época de de la señora Cristina “K”, al contrario, “la líder popular de los pobres”, nos calificó de “caranchos” a todos los que con justicia le hacíamos entonces juicios al Estado por las malas liquidaciones de nuestros haberes entre otras falencias, incluso con el PAMI, pues usaba nuestros fondos para su política. Además, vetó el 82% móvil aduciendo que si lo pagaba “se desfinanciaría al sistema”. Sin embargo no tuvo el menor empacho en jubilar a millones de personas sin aportes, sin preocuparse de dónde saldría el dinero. Lo hizo con los fondos que eran genuinos de los aportantes en ANSES, cuando debería haber procurado otro recurso para no afectar a quiénes con su esfuerzo aspiraban a una jubilación digna. Esta mujer, hoy candidata a algo, es una mentirosa serial, pues la verdad es que la mencionada contaba con esos dineros. Como igualmente supieron hacer con los importes retenidos de las obras sociales. La Cámpora, ni ninguna de las versiones actuales del “cristinismo” tienen autoridad moral para hablar de la actual situación de los “jubilados aportantes”.
Lo mejor que pueden hacer es callarse prudentemente, ya que los jubilados tenemos memoria y no comemos vidrio”. G. Navas
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 18, 2025
Municipios argentinos no podrán cobrar tasas de facturas a servicios
○
El ministro de Economía ya había criticado reiteradamente esa imposición de tasas. La semana pasada, Caputo aseguró que los municipios estaban “aumentando de forma descontrolada sus tasas” y denunció que era con fines “recaudatorios” y “políticos”.
“Obstaculizan el programa económico que lleva adelante este Gobierno para bajar la inflación y, como siempre, los grandes perdedores son los ciudadanos”, dijo entonces.
Las tasas municipales son aportaciones que abonan los ciudadanos y empresas por servicios prestados por los municipios, tales como el alumbrado públicos, la limpieza vial o la seguridad. La medida anunciada por Caputo ha sido acogida de forma ambivalente. Por un lado se encuentran quienes la aplauden, como el propio presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, que reaccionó con un escueto pero elocuente “¡¡Brillante!!”. Por otro lado, se han empezado a producir quejas desde el ámbito municipal. La intendenta de Quilmes, de la provincia de Buenos Aires, Mayra Mendoza, denunció que “el Gobierno de Javier Milei tiene decidido ahogar a los municipios”. En el mismo mensaje, Mendoza aseveró que las tasas están establecidas “por convenio hace años y no han variado sustancialmente en el último tiempo”, y que el alza de las facturas se debe a la elevada inflación, así como que la política energética del Gobierno “está hundiendo la economía de los argentinos”.
PrisioneroEnArgentina.com
Setiembre 11, 2024