Son pájaros sin alas nuestras manos, pero también emprenden vuelo Derecha e izquierda, incansables compañeras de renglones, bohemias cultoras de versos a veces inconclusos, sigan, no se detengan hasta llegar al último punto, allí, debajo del cual escribiremos nuestros nombres. Manos que golpetean sin cesar buscando el sentido a las palabras. Fieles herramientas, creadas por Tata Dios, ayuden a que nuestros escritos tengan la fuerza y energía necesaria para organizar en este mundo compungido la epidemia del bien y que todo el mundo se contagie. Manos, levanten sus dedos y vuelen hacia el infinito para sembrar con poesías y moldear con palabras como un artesano ajusta el barro para hacer sus vasijas. Siembren la tierra para que las almas entristecidas, puedan tomar la espiga de la esperanza. Manos vuelen, guarden la esperanza de que alguna gaviota rescate sus mensajes de amor y paz y los entregue al mundo.-
MANOS DE ESCRITORES
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Dr. Jorge Bernabé Lobo Aragón
María Isabel Clausen
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 21, 2025