“Declaro que todo estigma y toda vergüenza sean borrados para siempre de los nombres de Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti”.
Así lo afirmó el gobernador de Massachusetts, Michael Dukakis, en 1977, disolviendo todos los cargos contra estos dos italianos, Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti.
Nacidos ambos en Italia, uno en Torremaggiore (Sacco), el otro en Villafalletto (Vanzetti), intentaron encontrar una nueva vida en América. Pero lo que les esperaba era sólo un triste destino.
Sacco llegó a Boston en 1908, Vanzetti a Nueva York en 1909. Ambos anarquistas se conocieron en 1916 y, tras el estallido de la guerra, emigraron a México y luego regresaron a Boston después de la gran guerra.
En 1920 ambos fueron arrestados, acusados falsamente de ser responsables del asesinato de un contable y un guardia de la fábrica de zapatos “Slater and Morrill” de Boston.
Después de siete años de juicios, de protestas de manifestantes que defendieron enérgicamente su inocencia, después de siete años de declaraciones, fueron condenados a muerte en la prisión de Charlestown.
Ambos murieron el 23 de agosto de 1927 en la silla eléctrica, uno con pocos minutos de diferencia entre el otro.
Sacco y Vanzetti
○
Por Cyd Ollack.
Así lo afirmó el gobernador de Massachusetts, Michael Dukakis, en 1977, disolviendo todos los cargos contra estos dos italianos, Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti.
Nacidos ambos en Italia, uno en Torremaggiore (Sacco), el otro en Villafalletto (Vanzetti), intentaron encontrar una nueva vida en América. Pero lo que les esperaba era sólo un triste destino.
Sacco llegó a Boston en 1908, Vanzetti a Nueva York en 1909. Ambos anarquistas se conocieron en 1916 y, tras el estallido de la guerra, emigraron a México y luego regresaron a Boston después de la gran guerra.
En 1920 ambos fueron arrestados, acusados falsamente de ser responsables del asesinato de un contable y un guardia de la fábrica de zapatos “Slater and Morrill” de Boston.
Después de siete años de juicios, de protestas de manifestantes que defendieron enérgicamente su inocencia, después de siete años de declaraciones, fueron condenados a muerte en la prisión de Charlestown.
Ambos murieron el 23 de agosto de 1927 en la silla eléctrica, uno con pocos minutos de diferencia entre el otro.
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 17, 2024